Luhan despertó con un horrible dolor de cabeza.
Trató de abrir los ojos pero los sentía tan pesados que solo los movió un poco. Por un momento se olvidó hasta de donde estaba pero cuando quiso moverse un poco sintió como unos brazos fuertes le impedían cualquier tipo de movimiento.
Con sus ojos todavía cerrados dió media vuelta y abrazo a su novio con algo de fuerza, pasando su pierna izquierda por la cadera de Sehun y un brazo por su amplio pecho.
Siempre le gustaba dormir abrazado de esa forma de él. Poder sentir ese olor tan masculino y a la vez dulce, era como su pequeña y secreta adicción cada día que despertaba, era lo mejor del mundo.
Después de un minutos de pequeña paz, se dió cuenta que el dolor de cabeza había desaparecido por completo y cuando abrió los ojos quedó maravillado con el primer plano de Sehun que era iluminado por algunos rayos de sol que se habían colado por la cortina entreabierta.
Dos años de despertar a su lado pero cada día parecía ser el primero.
Con una pequeña sonrisa se acercó y trató de despertar a besos a Sehun como todos los fines de semana lo hacía, pero una ola de recuerdos lo golpeó.
Como si Sehun estuviera prendido fuego se alejó de el de forma tan brusca que por poco y cayó de la cama. El movimiento brusco por parte de Luhan ocasionó que el pelirubio soltara un pequeño gruñido y que volviera a envolverlo en un abrazo.
El corazón de LuHan empezó a latir rápido a la vez que los mil y un lo siento de su novio resonaban en su cabeza.
Con cuidado de no despertar a Sehun se deslizó de la cama y salió de ella, pero antes de salir de la habitación se giró un poco y echó un vistazo.
El cabello de su novio estaba un poco revuelto, sus cejas un poco fruncidas y sus labios entre abiertos. No pudo evitar que una pequeña risita escapara.
De esa forma parecía un niño y era tan adorable que le recordaba los primeros meses de noviazgo.
Sehun era bastante torpe, casi siempre tartamudeaba cuando Luhan se acercaba, se ponía todo rojito y jugaba con sus manos. ¿Ya dijo que se parecía a un niño?
Pero con el tiempo fue agarrando seguridad y el efecto que Luhan causaba en Sehun se revirtió. Ahora era Luhan quien se sonrojaba con cada toque o con algunas palabras que no iban de acuerdo con el momento, ¡Ni mucho menos el lugar! Exactamente cinco años de relación y todavía se ruborizaba como un adolescente. ¿Como eso era posible?
-Tan lindo recordar..- murmuró Luhan, negó con la cabeza y salió de la habitación no sin antes ponerse un pantalón deportivo que se encontraba en el suelo.- ojalá solo pudiéramos recordar los momentos felices.- deseó cerrando sus ojos con fuerza para impedir que nuevas lágrimas aparecieran y se apoyó contra la madera.
Ojalá existiera un método para borrar todo lo malo, para eliminar todo esa angustia y dolor que estaba sintiendo en ese preciso momento.
Pero no existe, y la imagen de su novio arreglándose después de tener sexo con esa.. con.. ¡Ah!
Luhan abrió sus ojos, sin poder aguantar ese feo sentimiento que se instalaba una vez más en su pecho caminó a la entrada del departamento tomando de paso su celular que estaba en la mesita ratona. Sin importarle estar con un simple pantalón de algodón al igual que una camiseta, se colocó los tenis que estaban a la par de la puerta y salió.
Caminaba sin rumbo, sus ideales de un futuro se esfumaron como el humo de un cigarrillo con el viento, caminó sin ganas de nada; su mirada vacía.
Esto no tenía que haber pasado, lo había perdonado una vez.
Sehun le había prometido nunca más volver a hacerlo.
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Nuestro amor. ||HunHan||♡
FanficUna caída de celular bastó para conocerlo. Un amable extraño devolviéndolo a su dueño. Se volvió su acosador por un tiempo y de ahí resulto una vergonzosa pero bonita declaración. Asi empezó una hermosa relación. Pasaron los años, las personas cambi...