No voy a permitir que ella me arruine esta noche. Siempre supe que no le caía bien, pero jamás se atrevió a contarme estas cosas de una manera tan directa. Aunque si de verdad, en algún futuro Ruggero sentirá lo mismo que yo siento por él, estaré dispuesta a luchar contra ella y si no, entonces lo nuestro no es destinado a ser.
Narra Karol
La discusión que tuve con Candelaria me mortificó el resto de la noche, y no porque me asustó, sino porque tiene razón. Me enamoré de él sabiendo que está de novio y que lo nuestro es un amor prohibido. Disney jamás nos permitirá presumir nuestra relación si estuvieramos juntos. Todo esto se vuelve en un rollo cada día más y tengo miedo...tengo miedo de no poder olvidar a Ruggero. La voz de Valentina me trae de nuevo a la realidad. Desde que regresé a la mesa, estoy muy inquieta y al parecer que ella también lo notó. - ¿Qué te pasa? ¿Por qué no me querés contar que hablaste con Cande? - bajó la voz cuando mencionó su nombre. - No es que no te lo quiera contarlo, pero acá nos puede escuchar cualquiera, mejor te digo cuando nos vayamos. - Está bien. - afirmó resignada - Pero no te escapas eh! - Te lo prometo - le dije sonriéndole, en toda la noche no me mostré feliz casi con nadie y el hecho de que tengo a Vale conmigo, me da la seguridad de que tal vez las cosas se van a arreglar.
[...]
Me estaba yendo al baño, para retocarme un poco el maquillaje y el pelo, con tantos momentos desagradables descuidé mi look y seguro me veía horrible. Saqué mi labial y mi cepillo y cuando me ví en el espejo empecé a darme cuenta que crecí muchísimo en los últimos meses. Ya no era una niña, era toda una jovencita, una normal, no como la mayoría de la gente puede pensar, con problemas en el amor y en la vida. Y sin embargo, estaba orgullosa de lo qué veía, de cómo me defendí hoy delante de ella, mi reflejo hoy me muestra por fin quién soy yo en realidad, esta es la chica que llegó ser la protagonista de una serie internacional, esta es la Karol que todos quieren ver: guerrera, potente, viva de verdad. Sonreí al espejo, volteé y salí del baño muy segura de mí misma: nada ni nadie me va a detener esta vez.
Pero, de hecho, algo si me hizo parar: mi celular estaba sonando a todo volumen y respondí muy rápido, sin mirar a la pantalla. - ¿Alo? - pregunté con cierta indiferencia. - ¡Hola, Karol! ¿Cómo estás? - era Lio, no tenía ganas de platicar con él. - Bieen, sigo en el evento de Once. ¿Tú cómo estás? - empecé a buscar con la mirada a alguno de los chicos. - Estaba pensando en vos. - qué lástima qué no puedo decir lo mismo - Me hubiera encantado estar ahí con todo el elenco. - Es una pena que no pudiste asistir, pero será para la próxima. - demonios, no veía a nadie conocido por aquí. - Así es, pero bueno, me gustó mucho llevarte a tu casa el lunes, ojalá no sea la última vez. - me dijo riendose. - Seguro no será. Mira, Lio, gracias por haberme llamado, necesitaba hablar con un amigo en este momento - le mentí, ahora más que nada quiero estar sola - pero tengo que colgar, aunque es tarde el evento sigue repleto de gente. Te mando un beso y gracias, te quiero mucho, byeee! - suspiré y colgué lallamada.
Después de esta llamada muy extraña de Lio, me dí cuenta que ya no quiero hablar con nadie, cerré mi iPhone y lo metí en el fondo de mi bolso, lista para dirigirme a casa. Ya me cansé de toda esta farsa, desde que me llevó a casa, Lio se comporta como si fuera una niña chiquita. Ni cuando estábamos más cercanos me trataba así. Es cierto que hasta hoy me alegraba este nuevo acercamiento, pero ahora me doy cuenta que cuando me habla lo noto más tierno que antes..¿qué le estará pasando?
Inhalo, exhalo y regreso al pasillo donde estaban el tocador y el baño, pero no pude hacer ni un paso más porque detrás de mí una voz me estaba hablando. No me extraña que me quiere hablar, la diferencia es que yo no quiero hablar con él. - Así que estabas hablando con Lionel. - me dijo Ruggero mientras jugaba con su anillo. - Sí - le respondí muy orgullosa - Pero no creo que eso a ti te importe, chau, me voy. - ¡Espera! - me agarra del brazo - ¿Qué...qué estuvieron hablando? Escuché que le dijiste "Te quiero" - me miraba fijamente a los ojos, diosss odio cuando hace esto. - Ah, así que escuchaste nuestra conversación. ¿Qué? ¿A caso ahora me espías también? - le pregunté levantando mis cejas. - ¡No! - afirmó sonriente. - Me estaba yendo al baño. Oí tu voz y decidí esperarte, porque quiero hablar con vos. - Pues yo creo que hablamos bastante por hoy, así que obtuviste lo que querías! - hago un paso para irme, pero me detiene de nuevo. - ¿Me puedes dejar pasar de una puta vez? - tengo ganas de golpearlo y besarlo al mismo tiempo. - Uuy Karol diciendo malas palabras - se acerca cada vez mas a mí - Me gusta... - ¡Bien... ya basta! ¿Estás borracho o qué? Tú y yo ya no tenemos nada más que hablar, desde la semana pasada te dije que ya no quiero nada contigo y sin embargo me sigues persiguiendo! - le grité muy enojada. - No es verrrrdad!!! Me dijiste que quiseras que nos alejaramos un poco, porque necesitas tiempo de pensar todo lo que pasa entre nosotros dos, pero no pensé que no me darías bola en absoluto. ¡Hasta ni me saludas, a propósito, para saludar a una persona le decis hola! - y me mostró un gesto de saludo con la mano. - Jajaja qué chistoso eres, me extraña que no te premiaron con un Oscar para esta actuación! Bravo!!! - junté las manos para aplaudirlo. - Aunque así le puedes hacer también a una persona que se tiene que ir. - reproduje su gesto yo también. - ¡Cómo yo! - le dije señalándome a mí y tratando huir de vuelta. - Al parecer que se volvió una costumbre pararte esta noche. - afirmó con sus manos en mi cintura y clavando sus ojos en los míos. Sentía su perfume, su olor tan varonil, este chico me trae loca, poco a poco estaba perdiendo la razón. - ¡No te vas a ir hasta que no hablemos! - soltó sus manos, bendito sea Dios - Quiero saber porque me tratas así de cortante, no te hice absolutamente nada por lo que yo sepa. ¿Por qué de repente quisiste terminar con nuestra amistad? - "Por lo que yo sepa" - repetí en un susurro sus palabras - ¿Y todavía me lo preguntas? ¿O sea tú tienes el derecho de presentarte esta noche acá con Candelaria y la villana de esta historia sigo siendo yo? - hacía todo el esfuerzo de tranquilizarme. - Así que de esto se trata, ¡estás celosa! - expresó tocandose su barbilla - Mira, si te tranquiliza, yo no quise venir con ella esta noche, hice de todo para que yo viniera solo, pero no pude, me hubiera gustado mucho pasar más tiempo con los chicos...con vos.. - me miró triste. - Pues no sé que habrán charlando ustedes, pero Candelaria me buscó para hablar conmigo. - empecé a buscarme en mi bolso la chaqueta, tenía un poco de frío. - ¿Qué? No sabía nada, de qué hablaron? - su cara se hizo más blanca que un papel. - Pues, en pocas palabras, me amenazó! - hice una pausa. - Me exigió que me alejara de ti y de su camino, porque si no, me voy a arrepentir. - ¿Es en serio? ¡Por favor decime que es un chiste! - exclamó incrédulo. - Sabía que no me ibas a creer. - le dije decepcionada. - Pero no, es verdad, habla con ella a ver cual es su version, seguro no es la misma que la mía! - rodeé los ojos. - ¿Vos qué le contestaste? - Obvio que no me iba a quedar de brazos cruzados. Me defendí, le dije que no le tengo miedo. - Ruggero me sonrió. - Me alegro. Esta es la Karol que yo conozco y que yo quiero.. - me dijo acercandose a mí y dejandome atónita por sus palabras. - ¿Qué nos está pasando, Karol? - No no...no sé... - balbuceo yo, mientras me doy cuenta que ahora nos seapara sólo un centímetro.
La tensión se sentía desde a miles kilómetros de distancia. Mi cuerpo y mis hormonas temblaban, mi corazón latía con mucha fuerza. Lo quería, lo quería besar, quería olvidarme de todo y de todos, quería sentirme suya aunque sea por un sólo instante. Me acerqué más para poder besarlo, nuestros labios estaban rozando y me atreví a tomar su mano, estaba dispuesta a todo por él, por ganarme su amor. Pero este no era nuestro momento, la voz de una mujer nos hizo saltar a ambos, avisandonos que nosotros dos y Michael nos tenemos que sacar unas fotos al lado de un cartel con nuestros personajes. Nos separamos muy exaltados y asentimos apenados, mirandonos entre si con complicidad.
Después de sacarnos los tres varias fotos, fui por Vale y nos regresamos para nuestras casas. No le conté nada de lo qué pasó, no todavía, porque quiero seguir recordando ese momento como algo personal, íntimo, como si de verdad nos hubieramos besado. Esa noche casi no logré dormir. No quise dormir, porque sé que si me despierto, todo esto va a ser un sueño, como dice la canción que canta Luna "Quiero recordar que la vida es un sueño", aunque hay una diferencia: al despertar, no lo llegué a encontrar.
HOLAAA! Primero quiero que me disculpen por no actualizar, sé qué no tengo excusas, pero como empecé las clases ya no tengo tanto tiempo para escribir, así que trataré de subir esta semana un capítulo más. Este capítulo es mi favorito hasta ahora. Me gustó mucho escribir esa conversación entre nuestras protagonistas. Con esto terminan las dos partes del evento de Once y los dejo con la intriga: muy pronto se vienen los capítulos de la firma, que pasará?? 🙊 También quiero agradecerles por los 2K, estoy muy feliz de que están leyendo mi historia y de que les gusta como escribo. Cuando recibo un mensaje suyo se me llena el corazón! Graaacias ❤️ Si me quieren buscar en las redes sociales, me pueden encontrar en INSTAGRAM y TWITTER como @zenereina. Muchas gracias a todos, los quiero mucho mucho y pronto nos leemos de nuevo! XOXO 💋
Y como un recuerdo, les voy a poner aquí abajo la foto qué Karol publicó con Rugge de esa noche inolvidable:
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