A la semana siguiente, el viernes por la tarde, una vez finalicé las clases, decidí quedar con Ramírez. Mi amigo tuvo la gran idea de ir al Museo de las Ciencias, donde estuvimos hasta las ocho. Sobre las once de la noche fuimos a cenar a un bar cercano, cuando, de repente, desde la ventana del bar, vi a un hombre misterioso con traje y con el rostro tapado cerca de un callejón. Tuve la "genial" idea de seguirlo a escondidas para ver a dónde iba, ya que me parecía muy sospechoso. Cuando me dirigía hacia la salida, diciendo a mi amigo que me tenía que ir, me preguntó que a dónde iba y le dije que me tenía que ir ya, a lo cual mi amigo que, no vio nada de la escena, decidió irse tras eso.
-Parece ser que nada más yo vi al hombre misterioso.-
Seguí al hombre hasta el callejón y me puse tras un contenedor de basura, donde pude observar la escena en ese momento. Curiosamente, comenzó a llover también. Pude ver cómo el hombre misterioso perseguía a otro tipo al que no podía coger y al cuál le asestó un tiro en la cabeza con una pistola con silenciador. Asustado por lo ocurrido y paralizado, no pude seguir viendo más hasta que oí un ruido de cristal roto. Tras eso, volví a mirar a ver qué pasaba y no vi nada. No estaban ni el hombre misterioso ni el cuerpo, ni restos de sangre ni nada. Parecía como si no hubiera pasado nada, como un sueño, pero era real, lo había visto, sólo lo vi yo.
Me dirigí hacia la supuesta escena del crimen cuando, a causa de la lluvia, me tropecé y caí de frente con las manos en el suelo. Tras levantarme, comencé a ver cómo caía sangre de mi mano derecha. Miré y comenzó a dolerme mucho, y vi que mi mano estaba morada e hinchada, viendo que tenía un trozo de cristal clavado en ella. Con esfuerzo y dolor, pude sacarme el cristal y cubrirme la herida con un trozo de tela de mi camiseta. Salí del callejón, comencé a marearme y llamé a la ambulancia para que me llevaran a urgencias de inmediato. Tras llegar la ambulancia, me montaron porque no podía ni mantenerme en pie, me tumbaron en una cama y limpiaron la herida para que dejara de sangrar. Tenía un color raro; la sangre era roja y tenía tonos morados, como si el cristal tuviera algún tipo de líquido o algo. No pasaron ni diez minutos para que todo esto ocurriera. Todo ocurrió muy deprisa. Sabía que me quedaría una gran cicatriz, por lo que los médicos me dejaron en la entrada de una de las salas donde me tenían que curar la herida que tenía. Me suturaron la herida con varios puntos, aunque la herida no era muy profunda. Me dijeron que volviera en unas semanas para que me la vieran de nuevo y me quitaran los puntos. Ya podía volver a casa.
Eran más de las dos de la mañana. Tenía más de diez llamadas perdidas de mis tíos. Estaba solo en la calle oscura y siniestra, aún lloviendo. El problema era que fui en bus y la bici la dejé en casa, así que tuve que volver andando. Camino a casa, pensé coger un atajo para llegar antes, pero tenía que pasar por unos callejones oscuros (vaya tela con los callejones hoy), donde entré con cuidado y precaución, ya que apenas veía nada, teniendo que usar la linterna del móvil. Por el callejón pude notar cómo un grupo de tipos me estaba siguiendo. Intentando salir del callejón, acabé en un callejón sin salida. Me di la vuelta y vi a cuatro tipos con palos y navajas. En ese momento pensé que estaba muerto. Seguía lloviendo, estaba asustado y me sentía más sensible de lo normal, como si sintiera las cosas con más intensidad, oyera mejor y viera mejor. Llevaba gafas y comencé a ver borroso, pensando que tendría empañadas las gafas, a lo que me las quité para limpiarlas y vi que veía bien sin ellas. Los tipos estaban rodeándome en ese momento y me estaban pidiendo dinero. Asustado, les di todo pero uno de los tipos quería pelea, no sé porqué.
Noté en ese momento cómo uno de los tipos venía de frente con un palo y, sin darme cuenta, pude esquivarlo y quitárselo. Inmediatamente, otro de los tipos que, venía por mi derecha, me intentó agarrar el brazo pero no fue capaz ni de tocarme, ya que di una voltereta hacia su espalda y luego un salto hacia la parte posterior de los tipos. Al saber que podía hacer todo esto, quise recuperar mis cosas.
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Sucesos de lo extraño
General FictionCon una vida normal y sencilla, un estudiante de Biología vivirá una serie de sucesos que le cambiarán la vida para siempre. Recopilando cartas e historias contadas por él mismo, este chico muestra acontecimientos de su vida, además de saber que con...