Un pasado por recordar (saint seiya)

Capitulo 1

Un día normal para el Santuario, los caballeros y amazonas entrenaban a pesar de ya no haber guerras y ahora que la paz reinaba por fin en la Tierra. Entre esas personas resaltaba un grupo de cinco personas, cinco caballeros de bronce que destacaban entre los mas fuertes, jóvenes que lograron crear milagros y ganarle hasta lo mas temibles y poderosos enemigos: el caballero del cisne, Hyoga; el caballero del fénix, Ikki; el caballero de andromeda y el hermano menor del fénix, Shun; el caballero del dragón, Shiryu; y el joven mas fuerte de los cinco, el caballero de pegaso, Seiya. Los cinco juntos eran los mas fuerte de todo el ejercito de la diosa Atenea, amigos y hermanos inseparables. 

Todos disfrutaban de esos momentos de tranquilidad, pero había un pequeño problema; Seiya ya le aburría todo eso, no le molestaba que las guerras ya se habían acabado y que la Tierra ya estaría en paz, pero el no ya estaba acostumbrado a pelear, simplemente necesitaba esa adrenalina que obtenía en cada batalla 

Ese día pegaso estaba en las gradas del Coliseo, mirando como sus compañeros entrenaban; su aburrimiento y molestia se notaba a kilómetros, todos sabían esa necesidad del joven caballero de bronce, pero no podían hacer nada

???: Seiya!! *se sienta a lado del joven* como estas?

Seiya: Aioria, bien y tu?

Aioria: diría que bien, estaba escapando de Milo

Seiya: le hiciste una broma, verdad?

Aioria: si

Seiya: estas muerto

Aioria: ya se, ya se 

La relación entre los dos caballeros eran como de hermanos, junto con el hermano mayor del caballero de Leo, Aioros, eran un trio inseparable, casi parecían una familia de tres

Aioria: quieres acompañarme a la Fuente de Atenea?

Seiya: si, por que no?

La fuente de Atenea es un templo que funciona como unidad de cuidados intensivos para los santos, se encuentra en medio de un bosque a las afueras del Santuario, ahí todos los santos que se acerquen se sentirían reconfortados y sus heridas serian sanadas. Muy pocos van a este templo, pero eso no significa que este descuidado, los santos de Atenea lo mantienen y van allí de vez de cuando, solo para relajarse o para estar un rato en soledad, le daban un uso mas divertido con la paz en pie, pero aun mantenía su función principal

Los dos caballeros llegaron al lugar anteriormente mencionado; un pequeño templo griego en sus mejores condiciones, parecia recién hecho, sus alrededores se componían de simples cosas, flores, arbustos, arboles llenos de frutos y un pequeño lago al fondo. El templo tambien estaba decorado en el interior, poseía unas reliquias que con el tiempo de las diferentes guerras pasadas se acumularon, tambien tenía objetos mas modernos guardados, ya sea de medicina como de entretenimiento para los santos. Una vez en allí, Seiya se sentó a los pies de uno de los pilares del templo y Aioria se puso a su lado

Aioria: estas aburrido?

Seiya: si, nunca pensé que tanta tranquilidad fuese tan aburrido y tedioso

Aioria: te entiendo, nacimos en lugar donde las peleas estaban a la vuelta de la esquina y ahora que todo eso desapareció, es como vivir en la nada 

Seiya: exageras

Aioria: lo dice el niño que busca pelea cada cinco segundos

Seiya: habla la gata del Santuario, jajajaja

Aioria: ya veras!!

El joven castaño salió corriendo, seguido del mayor entre risas; hasta que el caballero dorado logro alcanzarlo, atrapándolo entre sus brazos