Llevaba cuarenta y cinco minutos encerrado en la habitación de Luke, sentado en el piso con la luz apagada, recargado sobre su cama, el ruido de afuera no podía competir con el ruido que había en mi cabeza cada que pensaba en el momento en el que Irina me besó. No lo vi venir, cuando menos lo esperé sus labios estaban sobre los míos y me dejé llevar, lo disfruté.Pero en el momento en el que miré sus ojos, aquellos ojos que rogaban que dijera que la necesitaba, que la quería, que me pedían un beso más, al mirarlos me atemoricé tanto... ¿Cómo decirle que me gustaba, que adoro gastar mi tiempo con ella, pero que sigo amando a la chica que murió el año pasado? ¿Cómo decirle que Katherine jamás saldrá de mi corazón y que ella no merece vivir bajo esa sombra? ¡Irina es tan increíble! Ella merece algo mejor que esta versión de mí, esa que la dejó en medio de la noche sin decir nada más que un «lo siento».
La luz de la habitación se prendió y miré a Luke parado junto a la puerta.
—¡Aquí estás! Te estábamos buscando, Irina también. ¿Qué pasa?
Él se sentó a un lado de mí.
—Digamos que... Irina y yo nos besamos, todo fue tan rápido, de un momento a otro el mundo desapareció, besé a Irina y decidí marcharme.
—¿Por qué?
—Su vida ya es un desastre, no necesita a uno más.
—¿Realmente te gusta?
—Creí que sólo quería ayudarla, creí que solamente era mi amiga. Pero cuando me besó, Luke, me quedé helado. —Le confieso a mi mejor amigo—. ¿Recuerdas cuando me llevaste a casa de los Wylie? Bien, Hanna me besó, y se sintió tan mal. Pero con Irina, fue como si llevara una vida esperando a que ese beso pasara y arruiné el momento.
Puso su mano sobre mi hombro y mirándome a los ojos me dijo:
—¿Qué esperas para decírselo a ella? Dile que ha llegado a mover tu mundo, que te ha sacado de las sombras, que ese beso significó tanto que no supiste que hacer cuando la tuviste en frente. Dile lo que sientes y te aseguro que ella siente lo mismo.
—Luke... —Una voz femenina interrumpe nuestra conversación—. Se están peleando allá afuera.
Nos pusimos de pie y salimos de la habitación rápidamente, bajamos corriendo por las escaleras y nos abrimos paso entre los espectadores de la pelea callejera que encabezaba Travis. Alex se encontraba sentado en un peldaño de la escalera de la entrada, limpiando con un pañuelo la sangre que salía de su labio, argumentando que ya había tratado de intervenir en la pelea.
—¡No te vuelvas a acercar a mi novia, Wright!
Aquel hombre se llevó por la fuerza a la chica con la que Travis pasó toda la noche. Los espectadores comenzaron a dispersarse, algunos regresaron a lo suyo en la casa, otros cuantos decidieron irse.
—Luke, querido, si no termina esto ahora tendré que llamar a la policía.
—Le prometo que en cinco minutos todos se irán señora Alysson.
Luke entró rápidamente a la casa, yo fui detrás de él. Se acercó al DJ y paró la música, tomó el micrófono para hacer el anuncio que terminaría con la fiesta.
—Esto se terminó, salgan ahora o esperen a que la policía se encargue de sacarlos.
La casa se fue desalojando poco a poco, Travis cerró la puerta después de que salió la última persona, se acercó a nosotros después sosteniendo un vaso con hielo que mantenía junto a su mejilla, los cuatro nos sentamos en los sofás, Luke se veía realmente enojado.
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Dulce perfección
RomanceIrina tiene un sólo objetivo en mente: convertirse en la primera solista de la compañía de danza en NYC, sin importar cualquier cosa que tenga que hacer con tal de estar ahí. Una serie de sucesos llevan a Irina a conocer a Ben, el front man de una b...