Caminaron durante media hora antes de llegar a su destino. Flora y Ventisca caminaban en silencio pero Aura no dejaba de hacer preguntas sobre absolutamente todo de la vida de Cinia, la cual agradeció considerablemente que llegaran a su destino y su entrevistadora dejase de hablar.
- Hemos llegado- anunció triunfante Flora.
Entraron y se pusieron cómodas. Fue extraño porque nada más entrar, con un giro de muñecas, una cuarta hada hizo que una llama se encendiera en la chimenea.
- Buenas, Fatuo- saludó Ventisca.
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Pregúntale al viento
FantasyNo te obsesiones con los recuerdos, o puede que te pierdas en ellos