Se volvía una pesadilla cada anochecer... era como si pudiera ser yo realmente... aquella depresiva chica la cual llevaba una profunda herida abierta y pasaba su día a día tratando de esconderla tras una máscara con la sonrisa más brillante; el dolor inundaba cada rincón de mí, mi mente, mi corazón, mi cuerpo físico, todo dolía... era como si un simple sentimiento hiriera todo mi ser.
Mientras lloraba desgarradora mente, mire por el rabillo del ojo el alba del amanecer; en ese momento agradecí profundamente que fuera sábado, pues no tenía ningún tipo de ánimos. A pesar de mi dolor a flor de piel, seguí observando el alba por unos segundos más mientras pensaba sobre mi localidad, quizá Downtown no era tan malo, después de todo tenía una vista muy hermosa de Seattle.
Decidida a dormir gracias al cansancio acumulado, cerré los ojos y no sentí como pasaron las horas. Cuando desperté el clima estaba húmedo y llovía -- cuanto amaba la lluvia -- traté de levantarme para hacer cafe y surgió un mareo repentino, con la misma caí, me sentía tan adolorida, tan débil, tan cansada y con un inmenso dolor de cabeza; decidí no levantarme más, no tenía ganas ni de café, así que seguí durmiendo, realmente dormir aliviaba mi dolor, por eso dormía mucho.
Nuevamente abrí los ojos y busque mi celular con la mano entre las sábanas, lo tomé, vi la fecha mientras me quedaba sorprendida.
-- ¡Genial! Domingo... -- dije arrastradamente.
¿En que momento se había hecho domingo?.
Vagamente trate de levantarme, fui y prepare café, recordando que tenía algunas rosquillas y unos panecillos en el bolso que había dejado en un rincón; los lleve a mi cama y fui al baño, tome una ducha, me lave el rostro y cepille mis dientes... me sentí exhausta después de eso --mis fuerzas bailaban entre vagas y nulas -- regrese a la habitación, tome mi café, las rosquillas y panecillos... después de un largo rato de duda me senté en un sillón que tenía frente a la ventana -- me recordó una escena de la saga de crepúsculo que había leído hace mucho tiempo -- contemplé la lluvia durante horas, no se cuantas pero se que ya era de noche, pensé en lo extraño que era la lluvia en julio -- se suponía que era verano en otros países, ¿Por qué aquí llovía siendo primavera? -- prácticamente aquí nunca era verano y eso me gustaba ya que odiaba el calor y mucho sol; abrí la ventana y pude gozar de mi sonido favorito "el de la lluvia". Me quedé en silencio e inmóvil, sintiéndome totalmente vacía, sin emoción alguna; me levanté y fui a la cama donde me tendí a llorar nuevamente... y así pasaron días... semanas... meses...
AgostoSeptiembre
Octubre...
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Thoughts
Short StoryOphelia es una chica con muchas interrogantes, entre sus gustos está el café, la fotografía y la lectura. Está buscándole constantemente sentido a su vida. Con una sonrisa falsa fingía disfrutar su día a día mientras ocultaba su dolor, hasta que ll...