Ya ha pasado un mes de nuestras vacaciones las cuales han sido las mejores que he tenido a pesar de que me hacía enojar el echo de que otras chicas miraran a Ian lo admito a una la asesine pero es que el antojo de sangre y el enojo se combinaran, tranquilos le deje el cuerpo a los tiburones, a él le hacía enojar que otros chicos me vieran a mi e Ian intentaba matarlos pero no lo hacía, ahora vamos camino al castillo.
- Amor tengo ganas de helado de fresas con crema-
- Brooke no ya falta poco para llegar, por favor aguanta- comencé a llorar.
- Tu no me quieres, no me quieres cumplir mis caprichos por qué seguro se los cumples a otra- seguí llorando.
- No llores amor, sabes que te amo y que eres la única a la que le pertenezco-
- Entonces ¿Por qué no quieres detenerte 5 minutos a comer un helado de fresas con crema?-
- Por qué ya llegamos al castillo- me baje aún triste por no tener mi helado, los del consejo me esperaban en la puerta del castillo para recibirme.
- Bienvenida majestad-
- Gracias Selene ¿Algún problema que reportar?-
- Ninguno majestad puede descansar tranquila-
- Gracias- sonreí.
- ¿Le pasa algo majestad?-
- Solo los antojos y las hormonas- ellos parecieron comprender.
- Voy a buscar al chef- fui a la cocina el chef se llama Horacio.
- ¡Horacio!- grite al no encontrarlo donde siempre.
- Si... si majestad-
- Quiero un helado de fresas con crema, una malteada de chocolate, un pastel de chocolate y un poco de true blood- sonreí.
- Si majestad ahora mismo hago que se lo suban a su habitación-
- Gracias- me fui acariciando mi un poco abultado vientre, me encontré con Ian sacando la ropa sucia de las maletas.
- ¿Y el helado?-
- Surgieron más antojos así que voy a esperar un poco- agarre un libro y comencé a leer.
- ¿Estás enojada conmigo?-
- Solo un poco pero si me das un beso se me pasa- se acercó a mi y me dio uno de esos besos donde me demostraba todos sus sentimientos nos separamos por qué tocaron la puerta - Adelante- era uno de los ayudantes de Horacio venía con todos mis antojos en un carrito.
- ¿Se le ofrece algo más majestad?-
- De momento no, gracias- asintió y se retiró Ian me miraba asombrado - No me mires así nuestro bebe tiene hambre eso pasa cuando no cumples con mis antojos a tiempo- comencé por el helado el cual está muy sabroso, cuando termine con todo, ya era de noche, baje con el carrito y lo deje en la cocina.
- ¿Asaltando la cocina tan tarde majestad?- era Brandon
- Tal vez, ¿En el tiempo que nos fuimos encontraste a tu compañera?-
- Por desgracia no-
- Tranquilo ya aparecerá, tal vez aún no ha nacido-
- Tal vez pero ¿Y si estoy destinado a no encontrarla nunca?-
- No puedes pensar así, la Diosa Luna sabrá cuando será el momento de conocerla o tal vez conocerlo- reí ante lo último.
- Que graciosa, pues no lo sé, tal vez si, me voy a dormir descansa-
ESTÁS LEYENDO
Reina híbrida (I)
Hombres LoboPrimer libro de la trilogía Híbridos Brooke una chica lobo normal con una vida normal, que odia a los vampiros tendrá un gran cambio en su vida con la llegada de su mitad vampiro ya que la que la crió no es su verdadera madre su madre era la Reyna...