Capítulo III

11 1 0
                                    

Cuando llegué a mi casa, al rededor de la 1:30 encontré un mensaje de este chico, este mensaje decía "gracias por estar conmigo esta noche" me sentí muy bien, más que un chico lindo lo sentí como un amigo sincero, un confidente que es lo que necesitaba justo en esos momentos.
Así empezamos a hablar, hablamos hasta las 3:00 am, sin importar que moría de sueño y que al día siguiente tendría que levantarme temprano para ir con mis abuelitos.
Fue tan bonito, conocer la historia de alguien tan real como yo, saber sus gustos y todo.
Pasé mi fin de semana hablando con este chico, JAJAJA, ¡qué forma de pasar mi fin de semana! Pero así fue, no me arrepiento.
Mis días mejoraron un rato, tuvieron un poco más de alegría después de aquel problema.
Pero eso no duró mucho, solo una semana, lo sé, hasta para mí a veces es algo tonto.
Una amiga me preguntó
-¿Por qué sufro por alguien que no me quiere?
-Porque no te quieres a ti-Le dije.
Sé que yo no era la mas indicada, pero con él pasó del tiempo lo fui entendiendo, sufrimos por alguien porque no sabemos como querernos a nosotros mismos, porque queremos que una persona nos quiera por el simple hecho de que nosotros no sabemos hacerlo.
Me pregunto:
-¿Por qué las personas de la actualidad estamos tan cegadas para ver la realidad?
Me refiero a que buscamos que alguien nos de una historia de amor perfecta cuando los únicos que podemos dárnosla somos nosotros.
Así fue como entendí lo que es amar de verdad...

Mi verdadera alma gemela.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora