Provocador

Parte 2: Acercamiento

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La palma de jaebum se apoyaba en la puerta mientras trataba de mantener su peso sobre esta, el menor permanecía apenas apoyado mirando a su hyung en silencio, la idea de ser descubierto en ese momento lo asusto, pero también lo dejo extrañamente ansioso. La puerta se abrió ligeramente con algo de esfuerzo y el mayor se apresuró a golpearla con su palma para volverla a cerrada.

Jae abrió sus ojos en grande, era obvio para quien esté del otro lado de la puerta que alguien la había cerrado, ya los iban a descubrir. Abrió los labios tratando de advertirle al mayor pero alguien se le adelanto

-¿hyung, estas ahí, porque cierras?- la voz de Yugyeom llego del otro lado, sus miradas se cruzaron mientras la mueca del mayor se trasformó en una seria.

-sí, estoy ocupado, necesito espacio ¿crees que puedas decirle a los chicos?

-¿paso algo? Puedo ayudarte si deseas- ante el tono amable del maknae, jaebum sonrió, Paseo su mirada sonriendo por el cuerpo del menor para luego detenerse en su rostro

-no te preocupes, yo solo me ocupare de esto, solo advierte a los chicos que no molesten

-claro hyung- escucho a Yugyeom alejarse y poco después transmitir el mensaje. Los ojos del menor se clavaron en el líder tragando nervioso

-hyung ¿Qué piensas hacer?

-¿hacer con que Jae?- jaebum se apartó liberándolo, de alguna forma se sintió más relajado con la distancia entre ambos. Vio atento como este caminaba hasta la mesa de luz y tomaba su teléfono del bolsillo de sus pantalones, luego presionaba un par de veces y su último álbum empezaba a reproducirse. Apoyo el aparato sobre ésta y se giró hacia él.

-¿para qué pones música hyung?- se apartó de la puerta caminando hacia él, jaebum se dejó caer en la cama viéndolo directamente, sus manos descansaban sobre el colchón haciendo de palanca- ¿acaso no queres que nos escuchen?

-¿vas a decirme porque llevas eso Jae?- solto ignorando sus preguntas. El menor se detuvo a pocos pasos de distancia, vio como este cerraba los ojos y tiraba la cabeza hacia atrás, como si tratase de controlarse. Trato de contener la mueca en su rostro, estaba feliz, estúpidamente feliz, no podía creer que esas prendas provocasen tanto en el mayor. Sintiéndose osado deslizo el dedo índice de su mano izquierda por el chaleco, el sonido del cuero apenas audible por la música, pero lo suficiente para llamar la atención del mayor.

Este bajo la cabeza y abrió sus ojos, sus manos presionando el colchón al ver lo que Jae hacia - ¿Qué haces?

-decime hyung ¿preferís que responda tus preguntas o que me acerque más?- jaebum parpadeo, su nuez de adán moviéndose con lentitud.

-no creo que pueda tenerte cerca de nuevo, es...peligroso para mi

-¿Qué lo vuelve peligroso?- avanzo hacia el quedando a dos pasos de distancia, luego se inclinó con la mirada clavada en sus ojos

-vos- la sinceridad en su voz lo hizo sonreír - ¿desde cuándo sos así Jae?

-hyung- sabia que era tonto, casi soñador esperar que el mayor lo tome en serio si él se entregaba, pero había esperado demasiado, había querido tanto eso...que no le importaba cual efímero sea, lo intentaría. – nada de eso importa ¿de acuerdo? – se enderezo viéndolo en forma desafiante- si realmente estas tan curioso, si lo único que sentís es curiosidad, me iré a cambiar ahora y te lo contare todo, pero no esperes nada más de mi.- tras eso se giró, sabía que era arriesgado esperar que el líder tome algún tipo de decisión después de sus palabras pero no sabía cómo mas hacérselo notar. Para su sorpresa este tomo su muñeca reteniéndolo. Se giró viéndolo por sobre su hombro y enarco una ceja al verlo ponerse de pie

-no te cambies, no me expliques nada, solo respóndeme una pregunta- la mirada del mayor era intensa, espero atento la pregunta con algo de nerviosismo.- dijiste que te alegra que sea yo el que te haya visto, es ¿Por qué te sientes seguro por mi o por algo más? –no se animaba a decirlo, no podía solo preguntar si lo deseaba o le atraía, esperaba que este comprendiese su pregunta

-no te veo como un hermano mayor si eso preguntas- la ligera sonrisa de Jae lo animo- y me gusta la forma en que me ves ahora, pero quiero mas

-mas – dio un paso hacia el atento a su reacción, cuando este no se inmuto avanzo otro paso- ¿Qué tanto?

-¿para qué pusiste la música hyung? se sincero- Jae le regalo una sonrisa de lado, jaebum ya no podía contenerse

-tenía la esperanza de que me dejes acercarme más, y no quería que los demás escuchen

-suenas tan pervertido- alzo su mano libre rosando con sus dedos el pecho del mayor, sus ojos siguiendo el movimiento de las mismas para luego alzar la vista y observarlo a los ojos- me gusta

-¿Qué hiciste con mi sunshine? – el menor amplio la sonrisa feliz cuando su mano fue liberada, se apresuró a acercarse rodeando el cuello del mayor

-sigue ahí, solo que más caliente

-oh Jae- no podía seguir controlándose, la mirada que el menor le dedicaba dejaba claro que él también lo quería. Lo tomo de la muñeca tirando de su cuerpo hacia el propio, lo necesitaba cerca, ya no importaba lo desesperado que eso suene.

Antes de que el menor pudiese actuar se encontró con un par de cálidas manos sujetándolo de la cintura, la respiración sobre su oído era un recordatorio de que aquello era real. Cerro los ojos cuando sintió los húmedos labios rosar el lóbulo de su oído, su mano busco a tientas el cuerpo ajeno, deteniéndose en el hombro y presionándolo con sus dedos.

Jaebum beso con lentitud aquella zona, bajando por el costado de su cuello y cubriendo la tersa piel con suaves y sonoros besos. Se había imaginado más de una vez rosando su lengua sobre la pálida piel pero jamás creyó tener tanta suerte, ahora que lo tenía allí, envuelto en sus brazos se veía tan posible, tan real, no quería parar. Sus besos se volvieron húmedos en la clavícula, mordiéndola ligeramente con la esperanza de dejar una marca, luego siguió un recorrido hacia la perfilada mandíbula para marcar un camino hacia su perfecta y delineada boca. Cuando sus labios se encontraron una fuerte descarga eléctrica se extendió en sus cuerpos, como una advertencia de que aquello no era solo físico, que sus emociones estaban involucradas volviendo el momento más intenso e íntimo. Las manos del menor se deslizaron hacia el pecho ajeno, presionando ligeramente la tela para sostenerse, sentía que en cualquier momento sus piernas fallarían. Como si el mayor hubiese leído su mente lo hizo girar en la misma posición dejándolo delante de la cama. Sus labios se separaron viéndose hinchados y humedecidos, sus respiraciones entre cortadas.

-¿te sientes bien, estas cómodo con...esto?- le preocupación en los ojos mayor lo hizo sonreír, aun en ese momento podía priorizar su comodidad, era tan dulce

-estaría mejor si dejas de hablar y vuelves a besarme – jaebum pestañeo un par de veces antes de sonreírle, le encantaba la nueva personalidad que su menor le mostraba.

-puedo hacer mucho más que hablar Jae- lo empujo con cuidado viendo aquel pálido cuerpo caer sobre la cama, no tenía intenciones de quitarle aquel atuendo provocador pero necesitaba estar mucho más cerca. Se inclinó hacia él y coloco una mano sobre el pequeño bulto que empezaba a formársele al menor. Sonriendo de lado busco sus ojos, sus rostros estaban casi a la misma altura por lo que pudo apreciar la reacción del menor al tiempo que lo tocaba- no te preocupes, hyung se ocupara de ti

Youngjae jadeo viéndolo con sus ojos entreabiertos, tener a su líder tocándolo de esa forma era más de lo que podía haber esperado. Su diestra viajo hacia él tomando su mano para ejercer mayor presión sobre su miembro, estaba enloqueciendo con cada rose

-no te detengas hyung, por favor, no pares

El tema cambio dejando un ritmo más lento y suave cubriendo el ambiente. Jaebum mantuvo su mano en movimiento sintiendo la presión de aquella cálida mano sobre la propia. Se inclinó sobre el buscando sus labios casi desesperado, lo deseaba, lo necesitaba, ya no había forma de detenerse.

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