Al día siguiente me levanté destrozado. Había llorado toda la noche; me habían roto el corazón. En ese momento algo cambió en mí. Decidí cambiar, ser mejor con la gente y conmigo mismo.
*Campo de fútbol.*
Me miró con cara de orgullo y feliz como un niño el día de reyes.
- Ey Kevin tío. ¿Qué pasó anoche?En ese momento no sabía si sonreír falsamente o ponerme a llorar como un bebé, obviamente decidí sonreír.
- Pues nada Zack, tío. Que cuando lo íbamos a hacer ella y yo pues me paré y le dije que no quería hacerlo aún, que ella me gustaba de verdad. Cogió y me dijo que no le hablase más. Se fue enfadada tío, no la entiendo. Por una que me gusta de verdad y va y me rompe el corazón -dije mientras se me borraba la sonrisa de la cara y miraba hacia abajo tristemente.
Zack me miró asombrado con los ojos abiertos como platos y la boca abierta. Sin duda se había sorprendido de que este mujeriego de mierda haya decidido no hacerlo con la mujer más espectacular que había visto en mi vida.
- Pero Kevin... ¡Eres Kevin! -me agarró de los hombros y me sacudió tal como un saco de patatas- No creo que no lo hayas hecho con ella. No me lo creo...
Pues hay que creerlo porque no hice nada tío y estoy destrozado. Encima no tengo ganas de jugar el partido -lo miré con ojos brillantes y llenos de pena.
- Kev tío, es tu primer partido de capitán y mi primer partido titular junto a ti. Tío no te rayes por una niñata. Que le den.
- Tienes razón, que le den. Soy Kevin Hernández, el terror de las nenas -dije orgullosamente y mirándolo fijamente.
- Eh, eh, tío no me mires así que me das miedo. -ríe.
Ya estamos preparados para sacar del medio campo. Me miré el brazalete y lo besé fuerte.
*Mientras Kevin juega el partido Cristina está con Sonia en la cafetería*
- Bueno tía y tú con Zack, ¿Hubo algo o qué? -la miró sonriendo y pícaramente.
- Que va tía, solo estuvimos hablando tranquilamente de su vida y yo de la mía. Es muy buen niño, vamos despacio -le dijo sonriendo tontamente.
- Uooooh, uooooh. Increíble. Podrías haber ganado la apuesta y no quisiste.
- Él tampoco quería hacerlo tía. Por un tío que por fin no quiere follar y follar nada más, por fin. Cuando encuentres un tío así te darás cuenta de lo especial que es -sonreía mientras miraba hacía arriba y pensaba en Zack.
- Pues yo a Kevin me lo follé, te lo dije -dijo gritando mientras le chocaba la mano a su amiga.
- Minuto 88 y aún van 0-0. Kevin está haciendo un buen partido, pero el portero rival aún mejor.
- ¡Vamos hostias! Tenemos que meter! ¡Vamooos panda de niños! -el entrenador estaba enfadado, creía que le iba entrar un ataque o algo.
Y de repente Zack va solo, entra en el área y cae al suelo. Todos los jugadores pedíamos penalti. El árbitro lo pitó y sacó amarilla al defensa. Era mi hora de ser un héroe, pero pensé en lo que me dije a mí mismo esta mañana y le dije a Zack que lo tirara él. Zack sorprendido como todos los del campo. Cogió el balón con fe y convencido de que iba a meterlo, sin saber que ese gol le iba a traer grandes problemas. Zack disparó. Lo hizo, metió el gol que nos daba el partido. Él fue nuestro héroe, pero la alegría en él duró 5 segundos después de quitarse la camiseta y enseñar la que tenía debajo, gracias al mensaje: "Soy Hetero ¿y qué?"
Todos lo empezaron a decir: "hetero de mierda", "enfermo", "que das asco", "muérete". En ese momento Zack no pudo aguantarlo y se fue llorando hacía el vestuario. Se fue hundido.
ESTÁS LEYENDO
Heterofobia.
Fanfiction¿Os imagináis un mundo en el que la homofobia no existe? Sería genial ¿Verdad? Pues es tu día de suerte porque en esta "novela" no EXISTE pero.. Si hay "Heterofobia" y diréis ¿Heterofobia? Para saberlo leedme y si os gusta ya sabéis a vuestra biblio...