Heterofobia.

La Fiesta De Sonia.

*Casa de Sonia.*
Sonia, que había arreglado las cosas con Zack, estaba muy feliz. Iba sonriendo por su casa; se ponía a mirarse en cada espejo que veía. Por fin lo tenía todo; se gustaba ella misma tal y como era.
Llegó Cristina corriendo a abrazarla llorando y llorando que parecía que se le había muerto alguien, pero no. Era porque vio a Irene darle un beso a Kevin, el chico que no le gustaba hasta que le conoció y le hizo tilín en el coño, para que vamos a engañarnos. Cristina no tenía sentimientos, o eso creemos...

- Oye Cris, ¿qué te pasa? -preguntaba Sonia desorientada.
- Tía, que el Kevin se ha dado un beso con Irene -decía Cristina mientras la miraba y se secaba las lágrimas.

De repente Sonia empezaba a reírse fuertemente y a carcajadas. Cristina la miraba y no se lo podía creer. Su mejor amiga, que era como su hermana, se reía de ella por llorar.

- ¡¿De qué coño te ríes Sonia?! -gritaba Cristina enfadada.
- Tía, Irene es lesbiana y es la mejor amiga de Kevin. Lo habrá hecho para ponerte celosa o algo -decía sonriendo mientras le daba un abrazo.
- Buah tía tienes razón, que tonta soy... Bueno, y tú con Zack, ¿qué tal?
-Tía, estoy de puta madre la verdad. Lo hemos hablado y está todo arreglado -decía con una sonrisa de oreja a oreja.
- Buah tía me encantáis, pero le contarás tu secreto, ¿no?
- ¿Qué? En la vida. Cómo voy a contarle ese secreto. Qué quieres, ¿qué me deje de por vida? Él es hetero. Dudo que saliese con alguien como yo que tengo... Ya sabes... Ese secreto.

Lo decía asustada y con vergüenza.

Sonia y Zack lo arreglaron y demás, y se dijeron que fuera las mentiras y secretos, pero Sonia tiene un secreto que no sabe nadie solamente Cristina. ¿Cuál será? ¿De verdad es tan importante como para que Zack quiera estar o no con ella?

*A la mañana siguiente en casa de Kevin y Melanie.*

Ahí estaba él durmiendo con la boca abierta y sin ropa en pleno invierno.

- Keeeeviiin voy a entrar. Espero que estés vestido porque no te la quiero ver. Keviiiiin, joder -gritaba y gritaba fuerte mientras aporreaba la puerta.
- Voy, joder, que ya no dejáis dormir a nadie tranquilo tío -decía Kevin enfadado mientras se preparaba para la ducha.

- Melanie, hija, hoy tenéis ese cumpleaños de tu amiga ¿no? ¿Le habéis comprado algo o tengo que mandar a Afrodita para que le compren cualquier tontería de estas que os gustan a los jóvenes de hoy en día? -preguntó la madre mientras se tomaba su café.
- Que va, mamá. Le he comprado un libro y Kevin pues no sé, pero no hace falta mandar a la criada a comprar regalos a nuestros amigos, ¿sabes?  Bastante tiene con tener que limpiar el cuarto del imbécil de Kevin -decía Melanie riéndose.
- Oye oye. Mi cuarto está muy limpio eh... -decía Kevin indignado.
- Señorito Kevin, permíteme decirle que su cuarto es una leonera. Vamos, que está hecho una mierda.
Y empezaron a reírse todos a carcajadas. Al parecer, Afrodita era parte de la familia si no no haría esos comentarios.

- Afrodita, ¿qué haríamos sin ti? -decía Kevin mientras le daba un abrazo.
- ¿Sinceramente? Nada, la verdad. Así que ya sabéis subirme el sueldo o me marcho -decía riéndose.

*Instituto.*

Llegó Kevin en su moto junto a Zack en la suya mientras Sonia y Cristina se bajaban del autobús. Sonia fue hacia Zack y le comió la boca. Cristina miró a Kevin con cara de querer hablarle y no hacerlo, pero Kevin... él tan... tan él. Se acercó a ella.

- Hey bombón, ¿qué te pasa? -le preguntó sonriendo.
- Nada, ¿por qué Kev?  -dijo mirándole sonriendo.
- Pensaba que sí pero mejor que no lo estés si no vamos a tener problemas tú y yo -dijo bromeando y con una sonrisa.