Sin salida

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Llego el último metahumano y Arsenal retomo el control de sí, se miraron unos segundos y atacaron sin contratiempo, esta vez Jason fue golpeado y cayó contra una de las paredes del laberinto jalando a sus compañeros con él a través de las cadenas.

Starfire tomó el control en ese momento, terminando de salir del choque inicial por haber sido proyectados a la pared y aunque se llevó a sus compañeros con ella arremetió contra el hombre con toda la fuerza que tenía, a la vez que Arsenal hacía gala de su asombrosa puntería matando de una vez  por todas al último metahumano.

Al conseguir hacer caer al último individuo los tres cayeron exhaustos al suelo, sin embargo poco les duro su alivio porque de la nada llegaron unos robots que se asemejaban a Slade y comenzaron a dispararles a los muchachos, Arsenal tomo todos los objetos cortantes que llevaba consigo y comenzó a lanzarlos uno a uno, derribando a sus adversarios, mientras que Jason hurtaba las armas de los hombres muertos y le daba unas a Starfire a la vez que comenzaban a atacar una y otra vez contra los robots.

Su piel se desgarraba y la sangre fluía por ellos mientras atacaban a sus enemigos y los veían caer uno por uno, no obstante no le veían fin a su martirio decidiendo volver a correr  y en un descuido de sus enemigos, se montaron a un robot haciéndolo atacar a sus compañeros mientras iban montados en él, quien los llevaba sobre el laberinto haciéndoles ver la verdad de éste, la cual era, que éste no tenía salida.

Aún con el robot a su merced divisaron un ventanal al cual dispararon varias veces hasta lograr romperlo, ahí se encontraba Slade completamente molesto, mientras la furia dominaba a los muchachos y con cada poro de su piel lo querían ver destruido, entrando con el enemigo al impactar el robot contra las gruesas paredes de aquel observatorio.

Starfire comenzó a recuperar sus poderes y sintiéndose plena comenzó el ataque a su acérrimo enemigo.

Slade había tenido una falla en su plan y ahora se daba cuenta, pero era demasiado tarde, los muchachos lo tenían acorralado, así que usando una nube de humo y una bomba paralizante se marchó de ahí, desapareciendo como un fantasma.

Frustrados de haber sido burlados golpearon el suelo e intentaron quitarse los grilletes y cadenas, justo a tiempo, pues el edificio comenzó a colapsar mientras pequeñas explosiones se hacían presentes por todo el lugar.

Apenas lograron abandonar el sitio cuando una gran explosión que se pudo ver a varios metros a la redonda acabo por completo con el lugar, mientras los chicos caían desmayados y Starfire usando la fuerza y resistencia que le quedaban se los llevó a su guarida antes de que la policía se involucrara en ese incidente y, al llegar a la seguridad de su ahora hogar cayó rendida al suelo sin poder hacer nada más, sumergiéndose así los tres en el mundo de los sueños.

El camino de villano a héroe [Editado]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora