La traición

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¡¿Qué acaba de pasar?! Pregunto asustado. -Bueno, es que... El camionero se despertó a media noche, ¡y me quiso apuñalar! Respondió alterado. -Vale, no te preocupes, ya pasó. -Si, pero esto me quitó el sueño. ¿Seguimos?

Simón estaba al volante, y conducía fatal. Era como si nunca hubiese conducido. Cosa que era rara, porque el era mayor de edad. -A todo esto... ¿Me pudieras contar un poco de ti? Ya sabes, para pasar el rato. Pregunto. -¿Yo? Es que... no me gusta hablar de eso. -Entiendo, perdona.

Seguimos hasta llegar a Aplletown, aunque algo me sorprendió. La ciudad estaba vacía. ¿Que diablos? ¡Hace unos días esto estaba de maravilla! Exclamo sollozando. -Simón se hizo el de la vista gorda. Sin duda, algo raro pasaba con el. Tal vez ese camionero lo cambio. Quien sabe.

Recorrimos las desalojadas calles, viendo el deprimente paisaje y buscando supervivientes. Escuchamos un ruido extraño proveniente de una casa en ruinas. El lugar estaba hecho polvo. A duras penas pudimos traspasar los pasillos llenos de muebles y escombros.

A medida que nos acercábamos podíamos escuchar que los ruidos eran sollozos, de un hombre de tercera edad. ¿Quien anda ahí? Pregunta asustado. -Oye amigo, tranquilo, nosotros no somos 'ellos' -¡No te creo! vi con mis propios ojos como mi querida esposa fue aniquilada. 

Era una tarde cualquiera. Leía clásicos de la temperatura y Juliana tendía la ropa. En cuanto uno de nuestros vecinos timbró y pregunto si teníamos limones. Mi esposa lo llevo a la cocina, y segundos después escuche un grito de terror. ¡Hay, que dolor! Dijo con su quejumbrosa voz.

Bueno eso es triste, pero te tenemos que sacar de aquí. Le digo. -Me acerco cuidadosamente a el, pero de repente. ¡Cuidado, esta armado! Grita Simón y le dispara. -¡¿Que fue eso?! -Yo, yo vi un arma. -Era un collar, ¡tienes que ser ciego para!...

Y ahí lo entendí. Lo callado que estaba. El hecho de haber matado al camionero y al hombre. La falta de capacidad al volante... Ahora todo encajaba. -¡Eres uno de 'ellos'. Desenfundo mi cuchillo y lo ataco frenéticamente. Siento como una fría sensación invade mi nuca. Me había agarrado del cuello y me estaba extrangulando.

¿Por que tuviste que hacer esto? ¡Ya me empezabas a caer bien, incluso te iba a perdonar! Dice mientras la vida se me escapaba de encima. Sinceramente, ni siquiera se por qué te estoy hablando. Creo que es, para guardar esta personalidad. Me vendría muy útil para engañar a esa tal "madre".-¡Ni te atrevas a lastimar a mi madre! Trato de apuñalarle pero el aprieta más fuerte y suelto el cuchillo.

¡Suficiente! Ahora me tienes harto. Acerca su boca a mi cara mientras le intento hacerle resistencia, solo que era inútil. En mis últimos momentos de vida veo aterrorizado como 'Simón' Abre su boca para revelar el horrible ser que es. Me muerde, y me tira al suelo, y caigo pálido, como un saco de arena.




Sin confianza, sin piedadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora