「sentimientos en un post-it 」 ✧ cth

Parte 4: Post-it

Pasadas las clases, Alice desapareció cogida de la mano de Luke entre la gran multitud de alumnos y ­­­________ los miró con una sonrisa en el rostro. Su corazón le decía que se atreviese a hacer lo mismo, que arriesgase y que fuese a buscar a Calum pero su cabeza le decía que aquello podía ser el peor de sus errores. Dejarse caer en los brazos de su mejor amigo tal vez no era una buena opción. ¿Qué pasaría si luego su relación no resultase? ¿Lo perdería para siempre? Aunque si lo pensaba en frío, a Calum ya lo había perdido el día anterior al ir a devolverle sus cosas y rechazarlo de una manera tan dura. Se mordió el labio inferior y se fue hacia su casa...

Arrastró los pies por las calles hasta llegar a su bloque de apartamentos donde empezó a subir lentamente las escaleras que llevaban al piso que compartía con su madre. La rubia llegó al rellano donde estaba su apartamento y empezó a hurgar en su cartera buscando la llave cuando algo en mitad del pasillo captó su atención. Cerró la hebilla de su cartera sin encontrar las llaves y observó con atención el balón de fútbol que había allí abandonado. Viéndolo más de cerca lo reconoció enseguida. ¿Qué hacía aquel balón delante de su casa? Miró hacia las escaleras y miró hacia el fondo del pasillo pero nada así que se agachó y cogió el ajado balón al que le faltaba la mitad del cuero que había ido saltando a medida que se jugaban partidos de fútbol con él. Le dio la vuelta y descubrió que en la parte que había estado tocando el suelo había un post-it de color amarillo fosforescente de esos que su madre pegaba en la nevera con la lista de la compra o con la hora a la que tenía que ir al médico.

Lo despegó con cuidado la pelota y leyó lo que ponía allí.

"¿Recuerdas el día en que nos conocimos?"

­­_________ respiró hondo al sentir como la emoción se desbordaba en su pecho y amenazaba con salir por sus ojos en forma de lágrimas. La verdad es que ese día estaba sensible y muy llorona. Volvió a mirar la nota escrita con la caligrafía de Calum y no pudo evitar esbozar una sonrisa.

-¿Cómo no iba a acordarme? - susurró para sí misma mientras su mente viajaba varios años atrás.

Flashback on:

_______ tendría entonces unos cinco o seis años y había salido a pasear con su madre. La rubia tenía ganas de jugar así que su progenitora la llevó a un parque que no estaba muy lejos de su casa. De inmediato, nada más pisar la arena de aquel parque la niña se fijó en un niño de pelo oscuro que jugaba cerca allí con una pelota de fútbol. ________ no tardó ni dos segundos en separarse de su madre e ir hacia aquel niño.

Al oír unos pasos que corrían hacia él, el niño se volvió y se encontró con una niña rubia que llevaba un vestido verde y que lo miraba con ojos de corderito degollado esperando poder unirse a su juego. La madre de _______ se sentó bajo la sombra de un árbol cercano donde también estaba sentada la madre del niño con la hermanita de éste.

-¿Qué quieres? - preguntó el chiquillo mientras recogía su balón del suelo con ademán protector.

-¿Me dejas jugar? - preguntó ella suavemente.

-No, eres una niña y las niñas no jugáis al fútbol. Las niñas jugáis a las muñecas.

-No es verdad... - replicó la niña molesta al ver como la tildaban de cursi que solo sabía jugar a las muñecas. - Sé jugar al fútbol, mi padre me enseñó. - el niño la observó con cierta desconfianza pero finalmente se encogió de hombros y asintió.

-Vale pero si no sabes jugar te irás. - le dijo él. Acto seguido, le tendió la mano y le dijo: - Me llamo Calum Thomas Hood, ¿y tú?