Después me miré en el espejo, en el se veía reflejada mi cara , pero cada vez se volvía más borrosa asta que apareció...
Era un viernes, debían de ser las nueve de la noche. Mi familia y yo fuimos a un restaurante al que no habíamos ido nunca pero al ver que la mayoría estaban cerrados nos decidimos por ir a ese. Tenía ganas de ir al baño y fui a preguntarle a un anciano que había dónde estaba.
-Al fondo del pasillo!!! - dijo con una voz muy grave.
El baño estaba situado en el final de un largo y siniestro pasillo. Le di a un interruptor viejo y desgastado, al instante se encendió una luz tenue que parpadea y hacia un ruido un poco molesto y perpetuo. Me dirijo al baño con un paso lento y asustado. Habían dos puertas, una con el dibujo de una figura con bigote y bastón, suponí que era el de hombres, y en la otra una silueta con un sombrero y un paraguas., esta debía ser el baño femenino. Me dirijo hacia el, la madera de las paredes estaba desgastada y descolorida. Había un espejo sucio y agrietado en el cual solo se podía ver un trozo que reflejaba un poco mi cara. Empezaron a verse unos puntos amarillos que cada vez se volvía más grandes, asta que se distinguía que eran ojos. Entonces se empezó a ver una especie de persona deformada, se parecía más a un monstruo. El cristal comenzó a crear olas alrededor de la espeluznante "persona". De dentro salía una mano, mejor dicho, una gran garra. Me cogió del cuello, clavado me las enormes garras y seguidamente me empujó hacia el interior del espejo.
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Un mundo paralelo
ParanormaleUna joven de 15 años llamada Anna va con su familia a un restaurante en el centro de la ciudad, todo era normal, bueno, con una decoración un poco peculiar. Todo estaba lleno de candelabros y cosas antiguas. I al entrar en el servicio...