Capitulo 24 Segunda Temporada

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Narradora

A Rubén le pareció curioso aquel sonrojo que se extendió por el rostro de Ian cuando Evan le dijo algo al oído «Mocosos pervertidos» Pensó divertido, aunque poco le importo, después de todo, era algo natural ¿No? Incluso él en su momento llegó a pensar en muchas cosas, incluso a desear otras tantas  que le daba vergüenza admitir en voz alta

Sonrió curioso y Evan soltó una pequeña risa traviesa, de esas que soltaba cuando era niño y hacía una travesura, como esconderle las llaves del departamento. Como le gustaba hacer eso cuando era niño y a él como le fastidiaba aquello, incluso en ocasiones pensó en golpearle la cabeza con cualquier cosa para que dejara de hacer eso, nunca lo hizo, pero ganas no le faltaron para hacerlo

Ian estaba avergonzado y Evan reía entretenido, como si fuera un juego que sólo ellos comprenden. Tal vez estaba de más, por lo que se levantó de la mesa y les sonrió con cortesía. Murmuró un “No se duerman tan tarde. Buenas noches” y camino a su habitación. Cermismo y puerta y soltó un suspiró un tanto cansado, porque últimamente tenía la cabeza echa un lío y aquello lo estaba jodiendo porque ______ era lo único que pasaba y le hacía un lío todos sus pensamientos. Pero ya no era como antes, cuando estaba enamorado de ella, ahora era diferente, muy diferente y eso no le causaba nostalgia, solo rabia, ¿Eso estaba bien?

Ahora no le importa. Suspira y se acuesta en su cama, pone sus brazos detrás de su cabeza y cierra los ojos, hoy no podra dormir, no sabe cuando esa loca pueda atacar lo y tampoco le gustaría saberlo. Siempre es mejor estar preparado, lo aprendió desde hace mucho

Escucha pasos, sabe que son los chicos y aquello no le preocupa. La puerta de la habitación de Evan se cierta y Rubén decide tomar unos cigarrillos, saca uno y lo enciende «Supuestamente lo habías dejado. Patético» se reprocho mentalmente y suspiro. Aquello le importaba un carajo. Un cigarrillo no le haría mal

«Acabaré con ella» Pensó, porque joder, él necesitaba dormir, descansar aunque fuera unas cuantas horas. No estar pensado en que mierda hará si a esa loca se le ocurre atacar a Evan, «Ahora todo se centra en él» aquello no le molestaba. Quería a Evan como si fuera su hijo, aunque prácticamente lo es, porque un padre no es el que engendra, sino el que cría  o al menos eso le dijo su padre cuando era un niño

En dos meses sería el cumpleaños de Evan, quiere hacer algo especial, pero no tiene  cabeza para pensar en eso siquiera. Cierra los ojos y suspira, ¿Qué sería bueno para la fiesta de un adolescente? Él no lo Sabe, nunca organizó una fiesta. Principalmente, porque no habria nadie en ella y tampoco le gustaban las fiestas. No les veía ni les ve sentido, pero ahora que es padre, quiere hacer algo especial por ese chico

De no ser por él, probablemente se habría rendido hace mucho, quien sabe, igual y hasta se trataba de quitar la vida. Aveces la presión era tanta que solo quería darse un tiro, pero por Evan se alejaban esos pensamientos, pensamientos que tuvo desde joven y que ni las pastillas que tomó en su momento le hacían olvidar. Le debía mucho a ese simple chico

No solo por quitarle presión de sus hombros, sino por recordarle que es humano y aunque no le guste. El también siente, como todos y que también se equivida, pero eso está bien, al menos ahora si. Ahora, gracias a Evan, muchas cosas que odiaba terminaron gustando le y solo le bastaba saber que Evan estaba bien para sentirse tan jodidamente orgulloso de sí mismo. Entonces algo hizo click en su mente y sonrió. Porque ya tenía todas las respuestas que necesita

«Voy a acabar contigo, ______»

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