La mayoría de los hospedados en la Academia dormían plácidamente, aprovechando que aún gozaban de un día más libre de clases para descansar hasta el mediodía. El Baile de Bienvenida había terminado tarde por lo que todos los que habían concurrido se encontraban durmiendo en sus respectivas habitaciones. Muy pocos se hallaban transitando los pasillos o caminando alrededor de la institución para aprovechar la frescura de la mañana. Y al igual que los demás que continuaban durmiendo, las villanas dormitaban profundamente. O almenos dos de ellas.
Debido a la luz natural que entraba por la ventana, Grace había sido la primera en levantarse al no soportar la luminosidad de los rayos de sol en su rostro. No dudó en frotar sus ojos para intentar apaciguar la molestia y sentarse en su cama para comprobar que no había soñado durante toda la noche y que realmente se encontraba en Auradon, precisamente en la Academia junto con aquellas dos muchachas con quienes compartía cuarto; y Tegan que se hallaba en otro.
Miró a sus dos confidentes dormir plácidamente a pesar de la inminente luz natural y no dudó en arrojarle una almohada a Katya tras ser ella la más cercana para así dejar de ser la única en encontrarse despierta. La pelirroja se despertó apenas sintió que alguien le arrojó algo suave en el rostro, y soltó un bostezo antes de mirar a Grace de mala manera.
-No quería ser la única despierta –se excusó la hija de Gothel sonriendo alegremente, y tomó el cepillo que había dejado en la mesa de luz junto a su cama para comenzar a cepillar su cabello. Katya soltó un suspiro al escucharla y formó una mueca de disgusto tras darse cuenta que se encontraba en un espacio que no era de su agrado.
-Odio este lugar –dijo.
-A mí tampoco me gusta este lugar –escuchó tanto ella como Grace, y ambas dirigieron sus ojos hacia Mae, quien acababa de levantarse y también se hallaba mirando con asco a su alrededor. Ella y la pelirroja se incorporaron al igual que Grace y permanecieron mirando la nada misma porque aún era demasiado temprano.
Luego del momento incómodo del cual habían sido protagonistas, Evie una vez más había decidido ser ella quien irrumpiera la situación junto con una sonrisa, y no había dudado en cambiar de habitación a Grace y Mae a una más grande para que ambas estuvieran en el mismo lugar que Katya. El cuarto era lo suficientemente amplio para las tres, contaba con una cama para cada una así como una mesa redonda de madera en el centro para que pudieran sentarse allí y conversar o hacer otras cosas. Pero aunque todo se encontraba en perfectas condiciones y las sábanas de los colchones continuaban siendo igual de suaves, las tres no precisaban manifestar en voz alta que extrañaban sus respectivos lugares en la Isla de los Perdidos.
Katya se desperezó al mismo tiempo que alguien tocó la puerta y ella se levantó para encontrar a su mellizo malhumorado. Él mismo cerró la puerta luego de entrar y ambas muchachas que aún permanecían en sus camas, lo observaron confundidas.
-Ustedes tienen suerte de no dormir con Zevon. Apenas he podido dormir con sus ronquidos de fondo –manifestó sin necesidad de que alguien soltara alguna palabra. Se alborotó el cabello y tiró de lleno en la cama de su hermana, quien soltó una risita al oírlo.
-Si hubieran aparecido más tarde, te hubieras ahorrado una noche libre de él –inquirió Mae mirándolo divertida. Tegan la fulminó con sus ojos y ella sonrió aún más.
-Vaya sorpresa han dado anoche –añadió Grace observando a los dos pelirrojos.
Katya optó por soltar una risita y tomar lugar en una de las sillas junto a la mesa tras su cama hallarse ocupada.
-Podríamos haberlo hecho mejor, pero almenos los sorprendimos –fue lo único que dijo.
-Jay es quien más se ha sorprendido.
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Descendientes 3
FanfictionTras haber fallado y con la lista de Evie en sus manos, Uma decide cederles el papel protagónico a aquellas dos personas que cree que finalmente marcarán la diferencia. Y siendo la última posibilidad de poder brindarles orgullo a sus padres y una vi...