{Un papá cool} [Segunda temporada]

Un papá cool; cinco.

Por primera vez en la vida, Jungkook se encontraba con los chicos llorando.
Estaba muy asustado.
¿Por qué tenía que pasarle eso a su chica?, justo a ella, el motor de su vida.
Los chicos trataban de animarlo pero nada funcionaba.
Su mente solo reproducía una y otra vez aquella aterradora noticia.
Suga, quien jamás demostraba otra cosa que no fuera sueño, tenía sus ojos llorosos.
V, quien siempre andaba con mucha energía, ahora permanecía quieto y con grandes ojeras.
Jin, quien siempre sabia que decir para remendar situaciones, parecía haber olvidado lo que era hablar.
Jimin, quien siempre trataba de ser el más responsable en cuanto a ordenar sus sentimientos, no podía ni siquiera asimilar las cosas.
RapMon, quien siempre era el sabelotodo, en ese momento no sabía que más hacer para consolar a su amigo.
Y J-Hope, quien siempre era el que levantaba el ánimo de los chicos, ahora era el que tenia el corazón más roto. Claro, después de Jeon.
Jin al sentirse impotente y sin saber que hacer. Se alejó un poco de los chicos yendo a un rincón de la agencia, llamo a su chica, Hani, para que viniera e hiciera de las suyas, ayudar.
Al rato, la chica apareció y aquello parecía un funeral.
Todos estaban llorando junto con Jungkook, y claro que ella también lo hacía, solo que cuando nadie la veía.
_______ era su mejor amiga, y perderla... no estaba en sus planes.
Se acercó a paso rápido y seguro a los chicos tomando aire.
-- ¡Escuchen manga de idiotas! -- miró a Jin-- con todo respeto, amor. -- sonrió y prosiguió -- se que es una noticia chocante y triste pero se supone que luego de llorar un rato, deberían estar apoyando a su amigo y ser fuertes por y para él. Si hubiera estado en su lugar -- dijo haciendo una pausa y refiriéndose a Kook -- ya me hubiera suicidado. -- acotó seria -- Y si, a mi tambien me duele, porque amo a ______, pero tengo las fuerzas que ella me dio para sostenerla ahora que mas nos necesita. -- soltó exasperada.
Luego de decir eso, los miró a todos, y con una fuerza bruta tomó al más joven y lo levantó de la camiseta, haciendo que este se parara  sorprendido y triste.
-- Y tu, maldito narizón, ¿Que demonios haces aquí en vez de estar donde tu chica?. Ni siquiera sabes si el tumor es benigno o maligno. ¿Qué si le quedarán pocos días? -- preguntó enojada y este la miro asustada -- ¡Joder, Jeon!. Ve con ella. Apoyala, ámala, respétala y vive con ella. A si sea lo único que puedas hacer por ella.