Oscuro Abismo

Q U I N T O: Agonia

Sangre salía disparada de su nariz, después de escuchar el crujir de sus huesos de su mandíbula, mi monstruo interno, mi alma cubierta completamente de saña,..quería más y yo con mucho placer se la daría...

Con un cuchillo comencé a cortarle el pelo, hasta dejarla sin su amado pelo teñido, igual de falsa que su alma.

Tome varios de mis juguetes favoristos para proseguir a mi tortura, le arranque las orejas con una pequeña navaja que mi abuelo me había obscequiado a los diesinueve años de vida, si supiera que uso le doy ahora.

Una vez terminada de cortarlas y escuchar sus gritos, le dibuje con un cuchillo pequeñas cicatrices en ambas muñecas, luego en brazos piernas y todo su cuerpo mientras ella gritaba de dolor.

-para...por favor, yo no he hecho nada malo,para...

-¿sabes? esto me trae tantos recuerdos del pasado, de MI pasado, en el cual no hiciste nada más que destruirlo, en él cual yo te pedia lo mismo que tú estas haciendo ahora...pero aquí la gran diferencia es que tú te lo mereces y yo no.

- tal vez me equivoque y lo sigo asiendo, sin embargo no eres mejor que yo al matarme, seras una de las demás personas que a través de la muerte sacan sus demonios

Aplaudo sarcasticamente
-bravo...bravo mi hipocrita amiga... ya era hora que usaras tus neuronas para algo útil no crees- suspiro- hablando de cosas útil, sabes cuan útil es tu prima, ella en cambio a ti si supo ver lo malvada y vacia que eres y quiso cooperarme.

P.O.V Mariana

Su mirada desquisiada y sádica eran lo único y último que podía ver, nunca creí estar en esta situación, siempre fuí una hija consentida y mimada, de eso no hay duda, en estos momentos me gustaria cambiar mi pasado, volver en él pasado y remediar mis equivocaciones.

Creo que estos pensamientos de arrepentimientos por nuestras acciones llegan cuando aceptamos caer en brazos de la muerte y yo no soy la esepción, estoy sumamente arrepentida por hacer sufrir a tantas personas entre ellos, Teresa, lo único que espero es que ella no se manche las manos con nuestra sangre, y ¿por qué hablo de nuestra?, es obvio que ella quiere justicia y eso sólo lo obtendrá quitando la vidas de mis amigos y la mia por hacer miserable su vida

-espero que no sea muy tarde cuando te des cuenta en lo que te has convertido.

-hay querida, tú solita debes darte cuentas que a estas alturas me importa un carajo las opiniones de los demás, sobre las decisiones que tomó y cuales no, ahorrate tus ultimos momentos de vida para otra cosa, como recordar ¿no te parece un buen pasatiempo?- en su mano traía una escopeta

-mira marianita, por cada respuesta erronéa que me des, yo te doy un lindo balazo, ¿entendido?- yo sólo miraba su sonrisa de oreja a oreja con lágrimas en mis ojos- disparó cerca de mi oreja, provocando un sonido que me dejo sorda por un par fe de minutos, mientras gritaba por la agonia. En cuanto el sonido paró fue reemplazado por la risa de mi verdugo.

-dije ¿¡entendido!?-asentí con varias veces- bien comenzemos...

Continuará...