PDV Alexis
Eran las ocho de la tarde cuando decidí pasearme por el parque donde una vez decidí ir a correr, no estaba a medio camino cuando veo a un hombre con una botella a mano vestido de chándal a pocos centímetros del río, sin dudarlo un segundo a paso rapido llego hacia el sujetandole de la cintura hacia atrás
Usé bastante fuerza no voy a mentir me costó llevarle hacia atrás, su cuerpo estaba rígido, estaba decidido en ir al río, balbuceaba frases que para mi no tenían mucho sentido
Tropecé con mis propios pies cayendo los dos al suelo, mentire si digo que no me hice daño creo que me retorci el tobillo pero en ese momento mis daños no eran lo mas importante
Con mis dos manos sujete la cara del aquél hombre me llevé una gran sorpresa al saber que era Angelo, su nombre salió en un susurro pensé que reaccionaría ante mi voz pero pasó todo lo contrario
Sus ojos aun seguían fijos en el río estaban mas frios y vacíos que de costumbre
Ellos contaban una historia sin fin, el mismo era una gran historia perdida entre muchas otras
Le pegué delicadamente en las mejillas para que me mirase pero nada funcionó, seguía balbuceando cosas sin sentido
- no la ves, allí está
Repetía una y otra vez miré detras mío pero solo vi oscurida, un río vacío sin nadie flotando dentro
Un poco angustiada intenté levantarle busqué su coche y a pasos cortos conseguimos llegar hasta el, busqué sus llaves en sus bolsillos le senté en el asiento del copiloto y sin esperar le llevé a casa
~*~
Podría seguir mentiendo diciendo que dormí las ocho horas seguidas pero sería otra mentira, apenas dormí dos
Mi cabeza no daba crédito a lo que vi horas atrás, era la primera vez que veía a una persona tan rota por dentro
Angelo físicamente es una persona fuerte y no lo digo simplemente por su buen físico si no también por como se comporta frente a los demás
Nunca pensé que por dentro estaba echo mierda, no soltó ninguna lágrima pero sus ojos demostraban todo y a la vez nada, la forma en la que su cuerpo no reaccionaba a nada, sus palabras sin sentido
Me dio pena y también valor para intentar ayudarle con la mínima cosa, quería ser su amiga o algo parecido no la chica del bar la que cada cierto dia le sirve el café bien cargado y su chocolate caliente
Disipando un poco todos estos pensamientos preparo una taza de café y otra de té bien caliente
Cuando ya están listos me dirijo a mi habitación donde reposa tranquilamente mi inesperado huésped, abro la puerta con la cadera con cuido intentando no hacer ruido dejo la taza de café en la mesita de la cama
Andando por la habitación cierro un poco las cortinas dejando algún que otra luz de las farolas alumbrar la habitación
Aun es de noche y creo que soy la única persona despierta tomando una taza de té que me está quemando la garganta
Suspiro varias veces ya que no podré retomar el sueño una vez despierta, giro mis pies dirección hacia el pequeño estante elijo cualquier libro y me dispongo a leerlo sentada en el cómodo sillón que compré hace algunas semanas por internet
No estaba ni a la mitad de la historia cuando siento una fuerte mirada sobre mi, levanto los ojos con cautela y veo los penetrantes ojos verdes de Angelo mirarme con curiosidad
- Ya te han dicho que te ves muy interesante leyendo?
Vaya eso si que era inesperado
- Siéntete afortunado, eres la primera persona que me lo dice, café? - le apunto con la cabeza el café reposando en la mesita
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Real
Teen Fiction"Lloré lloré por ti, por mí y por el hilo rojo que nos unía. Por el Karma que aparentemente nos castigaba y por el destino que constantemente nos unía y nos separaba." Rosa Cortez