Real

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Hace unos días que conseguimos acabar con toda la decoración de la casa, esta muchísimo mejor de lo que me imaginé, el salón es bastante amplio y luminoso gracias a los ventanales, la cocina bastante moderna a petición de Alan quien según el nos cocinará los días que venga a visitarnos, la habitación mas hermosa sin duda es la biblioteca o la sala de estar, sala de reuniones, de juegos o como queráis llamarlo ya que para mi no tiene nombre, conseguí rellenar la pared con los libros que tenía, fotos, objetos especiales, jarrones, Cooper me dio un hermoso jarrón que compró en uno de sus tantos viajes a Roma, figuras etc..

La alfombra árabe la dejamos donde estaba, rellenamos el espacio con butacas e una mesa de billar y alguna que otra lámpara de pie

En el piso de arriba me atreví mas bien me insistieron en que colgase un cuadro que les gustó a todos cosa bastante difícil, la primera habitación se encuentra mi caballete con un lienzo en blanco una estantería repleta de pinturas, pinceles, lápices, bolígrafos etc.. y una mesa de estudio para Ana

Tanto en las habitaciones escogí la última la que da directo hacia las calles, sólo situé unas tablas de madera y el colchón por encima y alrededor o por debajo unas luces que funcionan a pila, las paredes son de color crema, un armario empotrado a la pared e una alfombra blanca y lo menos importante un espejo, el  ventanal que me da una perfecta vista a la ciudad, solo espero al próximo día de tormenta para poder encerrarme en la habitación con una taza de te y ver desde la cama la tormenta

Ana me prohibió cocinar ya que según ella no sé hacerlo pero la razón es que quemé el pollo en el horno e hice pitar la alarma de incendios, es verdad que mis platos no siempre son buenos mas bien salados pero son pasables o al menos para mi

Los días van pasando sin ningún problema, de la universidad al trabajo y luego a casa, siempre la misma rutina pero a mi me gusta, no tengo risa para nada y nadie molesta en ningún sentido

En la Uni intente evitar lo mas posible a Angelo, el no me hizo nada pero el echo de que es amigo de la persona que pegó a Ana me molesta y mucho, en la hora de la comida vino a pedirme perdón pero le dejé muy en claro que no es él el que tiene que disculparse y menos conmigo 

Ana cada día esta mas rara siempre con el móvil a mano y respondiendo siempre a mensajes que cada vez la ponen mas irritable y la que paga su enfado soy yo, hemos tenido varios broncas a cerca de su comportamiento y siempre acabamos igual mas enfadadas que al principio y cada una en su habitación 

Esta mañana el enfado de ayer por la noche aun seguía y hoy nos hemos enfadado por una gran tontería, al parecer por mi culpa rompí su taza preferida cosa que le regaló su abuela, pero a sido ella  la causante de todo, se ciega en su enfado y no mira a su alrededor 

No la he visto en las clases y ahora en el almuerzo tampoco está, le envié un mensaje pero no me responde y no pienso insistir mas  

Como el último trozo de jamón mientras limpio mi manzana, intento dejarla lo mas brillante posible pero la mancha negra no desparece froto un poco mas y nada

- Mas brillante creo que no puedes dejarla 

Levanto la cabeza y veo Angelo sentarse con una pequeña bandeja roja dejando la mochila a un lado 

- Hasta que no vea mi reflejo en ella no voy a desistir- oigo su risa y sonrío yo también por la estupidez

- Sigues enfadada conmigo?

- No estoy enfadada contigo pero el simple echo de saber que tu amigo a pegado a Ana me molesta- suelto un suspiro dejando la brillante manzana a un lado 

- El de verdad se siente mal por eso y también por los golpes que le diste- veo que en la última frase suelta una leve risa de orgullo?- sinceramente se merecía esos golpes, soy su amigo pero es bastante imbécil con las mujeres