serendipity ✧ chaennie

[🌙; 3]

Jennie's POV:

Mi abuela se alegró mucho cuando vio a Jisoo entrar en casa. La morena estuvo un rato hablando con mi abuela y le estuvo contando que estaba sacando buenas notas, aunque le estaba costando algunas asignaturas, pero decía qué quería superarse y sacar todo lo que tenía, debido a que el año pasado fue completamente desastroso para ella.

La morena llevaba 2 años en la universidad el año pasado repitió debido a que tuvo que ayudar mucho a su madre ya que no estaban pasando un buen momento económico y tenía que compaginar todos los estudios con dos trabajos para que entrara un sueldo mejor en su casa.

Había conocido a Rosé y a Lisa allí. Había congeniado muy bien con la pequeña, pero según decía la mediana de las tres, era más callada y más tímida y según me había contado sentía que a veces no se abría lo suficiente, lo que provocaba que todavía no hubiera llegado a entablar una mejor relación con ella.

Jisoo nunca había querido tener pareja, poca gente le había gustado y si le había gustado alguien nunca se había atrevido a dar el paso y lo máximo a lo que había llegado habían sido a un mes de relación y ni siquiera se podía llegar a llamar así exactamente.

Le conté a Jisoo todo lo que había ocurrido con Jiyong acerca del trabajo. Jiyong y Jisoo se llevaban muy bien, para mi sorpresa encajaron muy bien ambas de sus personalidades, cosa que a mí me alegraba porque eran mis mejores amigos.

Y todos los días transcurrían igual. Al llegar la noche, no podía dormir y no podía dejar de pensar en todo lo que podría ocurrir, las pesadillas y los recuerdos siempre acaban llegando a mi cabeza y aunque estuviera acostumbrada a tenerlas, todavía me asustaban.

Siempre intentaba ser fuerte para mí, para mi abuela y para Jisoo y Jiyong, aunque no lo pareciera ambos eran un pilar fundamental para mí y yo lo era para ellos.

Así que siempre intentaba cerrar los ojos con fuerza, cómo lo hacía cuando era pequeña y y dejar que la noche pasara, hasta así empezar un nuevo día.

[🌙]

Jisoo me pidió que la recogiera hoy también. Su madre había encontrado un buen puesto de trabajo y echaba horas extras para que Jisoo no tuviera que trabajar y pudiera centrarse en sus estudios y no le pasara lo que le ocurrió al año anterior.

La sorpresa que me lleve fue cuando vi Jiyong esperándome en la puerta del supermercado, apoyado en su viejo coche de color negro, se veía un poco cansado, pero eso no era novedad en él.

-Vaya, que sorpresa, pensaba que ya no trabajabas aquí.

El mayor me miró molesto, comencé a andar adentrándome dentro de supermercado, para ir a la zona de empleados y ponerme el delantal para empezar a trabajar mientras que él me seguía a paso rápido.

-Jennie, espera, tengo que contarte algo.-Me di la vuelta frunciendo el ceño.

-¿Has venido a contarme eso que dices que es tan importante o a trabajar?

-He venido a las dos Jennie, pero ahora déjame explicarte.

Y aquello que me contó nunca me lo había llegado a imaginar. Al mayor siempre le habían encantado las fiestas y era algo normal en la gente de su edad y en la de la mía también, pero yo sin embargo prefería quedarme en casa viendo la tele, escuchando música, leyendo algún libro, o simplemente durmiendo.

Y no solía ser de los típicos que perdiera la cabeza en las fiestas, sí que bebía y sí que es cierto que alguna vez habían llegado a casa algo más que borracho, pero no era lo habitual en él, siempre solía controlarse y era totalmente consciente de sus actos o eso creía.