Capitulo veintiocho

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La noche ya había caído, la luna estaba en lo más alto del cielo, las estrellas no estaban presentes dando la probabilidad de una lluvia ó tormenta.

Le cambie el lugar a Luna y ahora ella se encontraba conduciendo. Mientras yo trataba de dormir, pero los estúpidos pensamientos no me dejaban hacerlo en paz.

Narra Luke.

Nada estaba saliendo bien, las cosas iban de mal en peor.

-Todo estará bien- Murmuró Ashton de manera reconfortante, aunque mis sollozos no paraban.

Estábamos ocupando los últimos asientos del bus ya que las dos chicas se habían marchado con la furgoneta y Sean y Nathaly habían desaparecido con un auto, habían huido. Por lo cual solo quedaban el auto numero tres y el bus que conducía Christian.

Las únicas cuatro personas que realmente había amado más que a mí mismo se habían marchado; mi padre que nos abandono cuando yo tenia quince años, lo cual aun estaba resentido por aquello.

Flash back.

Estaba jugando baloncesto en el patio trasero de mi casa. No era muy bueno juzgando a ello, pero mi padre había puesto el aro y ninguno de mis hermanos o yo lo utilizábamos.

Retrocedí cinco pasos de al frente del aro y lancé la pelota, no le atine ni de broma. Di un suspiro frustrado al no poder meter una estúpida pelota dentro de un estúpido aro a tres metros del suelo. Atrapé la pelota en el aire entre mis manos y la hice rebotar contra el suelo para volver a agarrarla.

-Luckey Luke- Me llamó Nicole caminando hacia mí.

-¿Qué me vas a pedir?- Le pregunté automáticamente sin voltear a verla aun concentrado en tratar de darle al centro del aro.

-¿Qué te hace creer que quiero algo de ti, hermanito?- Me preguntó observando cada una de mis acciones. Volví a lanzar la pelota, pero esta golpeo contra el borde del aro y rebotó, yo observe a Nicole de manera seria- Bueno, esta bien. ¡Culpable! Necesito que...- Ella rápidamente cayó al oír los gritos de nuestros padres.

No se entendía exactamente lo que decían, pero parecían estar furiosos uno con el otro.

Fin del flash back.

Lo que recuerdo es que luego de eso mi padre salió de la casa como alma que lleva al diablo y mi madre le tiró la ropa desde la ventana de arriba, mientras que Nicole y yo nos encerramos en el baño tratando de contenernos de uno al otro.

Mi madre no se marcho, sino que no apreció luego del Apocalipsis. Supuestamente debería estar en el trabajo mientras sucedía esto. Mi desesperación del momento fue increíble y una sensación que no se la deseo a nadie.

Luego Luna se fue por una equivocación , un mal entendido. Yo realmente la amo. Posiblemente ahora mismo esta deseando romperme el tabique, pero se lo dejaría hacerlo siempre y en cuando vuelva a estar conmigo.

Y durante el Apocalipsis lo único que me mantenían los pies sobre la tierra eran mi novia y mi hermana. Mi novia se fue y me odia, mientras que mi hermana ahora era uno de ellos...

Flash back.

Oí como un auto aceleraba y se alejaba a toda velocidad, se habían ido no sé quienes en el auto numero dos.

Estaba distraído y lo único que ocupaba mi mente era la inesperada ida de las dos chicas dejando solamente un vacío en el grupo, eran ellas las que le ponían humor y energía al grupo con sus contagiosas risas y sus malos chistes.

Disparaba a los zombies, pero les daba en todas partes menos en el cráneo y eso me hacia más difícil la tarea de dejarlos sin vida.

Un grito desgarrador invadió el ambiente, era Jena siendo devorada por zombies. Quede totalmente impactado con aquella imagen. No era la primera vez que veía a alguien siendo devorado por un par de zombies, pero era la primera vez que me chocaba tanto.

Near The DeadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora