Todo lo que siempre quise... hasta que llegó el POLIAMOR

Capítulo 3

Estoy en shock, después de quedarme mirando a esos hombres decido intentar hablar aunque no sale nada coherente de mi boca. Veo que uno de ellos de cabello rubio oscuro, ojos azules y altísimo me habla.

- Buenas, soy Ethan McDougal, no se que te habrá dicho mi hermano Will, pero siento si se ha sobrepasado.

- Solo han sido sus formas a la hora de referirse a nosotras - digo sin poder apartar la vista de su mirada.

- Pues siento entonces su impertinencia -dice muy educado.

Me giro para observar a los demás y veo que todos están escuchando la conversación. ¿De dónde habrán salido estos hombres tan atractivos? Cuando veo que nos estamos mirando unos a otros y nadie habla empiezo a sentirme incómoda, por lo visto Ethan se da cuenta y decide presentarnos a quien le acompaña y nosotras hacemos lo mismo. Ya se de donde venía ese parecido entre ellos. Los cuatro son hermanos y por lo que nos han contado les gusta compartir entre ellos a su pareja, me sorprende un poco aquello, creo que me cuesta asimilarlo, pero después de un rato y viendo como ellos lo hacen ver tan natural me siento un poco más relajada.

Miro mi móvil y veo que se ha hecho tardísimo son mas de las 12 y mañana empiezo a trabajar, así que después de avisar a Lauren nos despedimos de los chicos.

Cuando estamos a punto de salir del local, Adam el mayor de los hermanos, moreno de ojos verdes y alto muy alto nos para y veo que nos mira fijamente.

- Nos gustaría a mis hermanos y a mí volver a quedar con vosotras, creo que si llegamos a un grado de confianza en el que os sintáis a gusto con nosotros, podemos pasarlo muy bien.

Yo no puedo hablar, no me lo esperaba, así que miro a Lauren y esta contesta por las dos.

- Sí claro -oigo que dice- no perdemos nada ¿no?

- Perfecto - dice Adam sonriendo- me dais algún número de teléfono y así podremos quedar.

Me doy cuenta que estoy siendo un mero espectador en este momento. Observo que se están dando los números y que Adam se despide de nosotras. No hablamos mientras vamos hacia el coche y me doy cuenta que me he puesto bastante nerviosa solo con la expectativa de volver a verlos. Cuando ya no aguanto más miro a Lauren y ella que veo que está igual que yo empieza a chillar como una chiquilla.

- ¿Pero los has visto? -dice gritando- tienen pinta de empotradores naturales, son de los que con solo mirarte se te mojan las bragas, creo que quiero conocer a su madre, pero que hijos que ha hecho y mira que son distintos entre ellos pero a la vez todos son súper atractivos - me dice mientras no para de gesticular-.

- En eso te tengo que dar la razón , excepto William que no me ha caído muy bien, los demás son impresionantes.

- Creo que si los conocemos bien y nos sentimos seguras con ellos podemos pasar buenos ratos entre las sábanas.

Me rio, pero es una sonrisa nerviosa, me despido de Lauren y camino hacia casa pensando en todo lo que me ha ocurrido hoy. Creo que dentro del surrealismo de esta noche, el día ha ido genial.

Ya en casa y en la cama solo puedo pensar en aquellos hombres, Adam, Ethan y Callum. Me había dado cuenta en lo poco que los había conocido que eran muy diferentes, Adam era bastante serio pero muy sociable, Ethan era muy gracioso y hacía que no te sintieras incómoda y Callum que aunque parecía que era el más tímido te transmitía una tranquilidad increíble. Por el contrario, William, el primer hermano al que conoció seguía sin transmitirle buenas vibraciones, suponía que era por la forma que tuvo de presentarse, aunque tampoco quería darle muchas vueltas.

Por fin consiguió dormirse, mañana iba a ser un día duro y no iba a poder dormir mucho.