lo que Carla nunca supo

Agramainio

-¡No!, ¡me niego a tomar esas cosas! _Vamos Carla, que el doctor te las recomendó. _¡No, no y no! El doctor no sabe nada!, yo estoy bien, ¡mírame! Vamos hijita, tu mami y yo estamos preocupados por ti y...

Carla tiró el frasco de jarabe y corrió a su habitación mientras gitába: ¡Esas pastillas solo me hacen ver cosas feas!Si las tomo, ¡Agramainio vendrá por mi! _Agra, ¿que? Y Carla cerró la puerta de su habitación-Que hacemos, ¿María? No estoy segura, la niña cada ves se pone más insoportable, pero de una manera u otra,tendremos que darle el suero. 

Al otro lado de la habitación se encontraba Carla con su conejo mascota. Hay, Dalki, estoy asustada, además siento como si alguien me observara. ¿Peor es una tontería, verdad? _kwick kwick. _Si, eres muy inteligente. Tu eres el único amigo que tengo. Gracias por estar a mi lado siempre. _kwick kwick kwick.

De repente la puerta se abre de un golpe. _Cariño, tenemos que darte tu medicina. Esto te hace bien. _¡nooooooooooo! Carla agarro sus almohadas y peluches, y empezó a tirárselos a sus padres. _!Dios, ya me canse de esta pequeña! Grito Drake, el padre de Carla. Agarro el suero, de un color espeso como plomo, y lo introdujo en una jeringa. ¿Que- Que haces? Preguntó Carla asustada mientras retrocedía lentamente hacia su escritorio. María, sujétala. Le dijo seriamente.

María la trató de agarrar de os brazos pero Carla agarró una tijera de la cercanía. y se la clavó a su madre en el hombro izquierdo. ¡Dios mio, esta completamente loca! El doctor  tenía razón, ya no hay duda alguna, las voces y alucinaciones, hablar con objetos y animales, ese tal Agramainio del que siempre habla...  eso es, _esquizofrenia. Completó Drake.  

María solto un grito agudo mientras retrocedía asustada  en tremendo dolor. ¡Maldita! gritó Drake con cólera y se abalansó sobre su propia hija. Los desesperados gritos de dolor de la pobre Carla mientras era torturada por su padre rezonaron en toda la calle. ¡Dalki! ¡Ayúdame! grito con un chillido agudo. _kwick kwick. _¿¡Cuantas veces te tengo que decir que ese maldito conejo no habla!? ¡Ahhhh! ¡Daaalkiiiii!

En ese preciso momento. todo se oscureció. parecia como si todo el mundo se hubiese congelado. Menos ella. Carla, sangrando por los múltiples golpes se arastra hacia Dalki mientras solloza. ¿Por-que? ¿porqué me pasa esto?, no-no he tomado el suero. Hay pequeña Carla. No necesito de ese suero para entrar a tu realidad. Eso solo me facilita las cosas. Un terrible e insoportable sonido casi destrozó los oidos de Carla.

¡Basta! gritó desesperada mientras sus oídos le comenzaban a sangrar.  ¡Dije baastaaa! Carla agarró otro objeto del escritorio, el cual esta vez fue una navaja para cortar cartón. Y trato de apuñalar a Agramaino. Solo que este se volvió humo al pleno roze de la navaja y siguió su trayectoria hasta el corazón de Drake. _Creo que he hecho suficiente daño por hoy. Dijo la niebla espesa y escapo por la ventana. 

En eso todos empezaron a moverse de nuevo, excepto Drake, que con sus últimos alientos, solo pudo ver decepcionado y aterrado la cara de su hija, su homicida.