Creepypastas Y Leyendas Mexicanas

"MÍA" el experimento KP25806A

Hubo una vez en un pueblo del país de México ,un laboratorio que hoy en día esta abandonado,les contare por que quedó así...

¡Oh! Se me olvidaba,hola mi nombre es ariadna lucia rojas cuevas,tengo 19 años,trabajaba en un laboratorio clandestino escondido al que nos gustaba llamarle "el nahual" me encargaba o mejor dicho nos en cargábamos de crear nuevas especies de animales y personas, pero lo que yo ayude a crear no tiene perdón, jamás me perdonare lo que paso ese día....

Me encontraba como siempre en casa estudiando los materiales y los informes que últimamente han salido de los experimentos y "personas",hasta que recibí una llamada de mi jefe, me platicó sobre un nuevo proyecto que le apodó "MIA" o por el número de experimento que en este caso seria el "KP25806A",teníamos ya varios meses con esta nueva creación, me sentía emocionada por esto me dijeron que me fuera allá inmediatamente y así fue.
Llevaba ya varios minutos caminando por el monte hasta que lo encontré,era un laboratorio con el disfraz de una casa casi cayéndose a añicos,entré y encontré a varias personas mutiladas, tanto hombres como mujeres, ya estaba acostumbrada a ver esto cada vez que tenían algo nuevo que crear, me coloqué mi bata azul al igual que el cubre bocas y me dirigí al sótano, me fije que ya le habían avanzado algo,se veía que en este caso seria una mujer ya que le habían colocado los pechos y el cabello azabache que esta poseía, lo que me llamo la atención fueron sus ojos, estos tenían algo en ellos uno tenia la pupila blanquecina y el otro lo tenía rojo,este me llamó la atención tenia un brillo llamativo, como si te analizara con la mirada, me quede tan ida en mis pensamientos que no me di cuenta que mi jefe me llamaba.
"Ari,querida pasame la piel por favor" me pidió y yo como aprendiz fui lo mas rápido y se la entregué, me había fijado demasiado en los ojos de la "chica" que no me di cuenta que no poseía la piel por fuera, solo un poco de grasa y músculo en su cuerpo la sangre caía a gotas de su cuerpo.
Habían pasado ya varias horas cuando pasé a ver la creación de mi jefe, me sorprendió como había quedado,su aspecto era un poco tétrico lo primero que me llamó la atención fueron sus ojos seguían con ese brillo que me ponía un poco incomoda con su mirada como si me mirara, parecía estar viva como lo había dicho mi jefe, fui al baño para lavarme las manos que traía bañadas de sangre,ya estaba a punto de salir cuando de repente oigo un grito,podría haber jurado que alguien toco la puerta antes de ese desgarrador grito y me llevé una horrible sorpresa al abrir la puerta, en la puerta,detrás de esa puerta, estaba mi jefe con que el llevaba varios años trabajando,estaba muerto, me derrumbe en el piso llorando a mares,hasta que escuché el sonido de uno de los bisturí caer, pude reconocer el sonido gracias a que ya estaba acostumbrada, levanté mi vista y me encontré con la asesina de mi jefe, esta traía consigo el corazón
De mi jefe en su mano, lo último que hizo fue estrujarlo entre su mano y lo tiro al piso pisoteando este con una de sus zapatillas negras manchando estas con la sangre que salpicaba, la chica aun no se había dado cuenta de que me encontraba ahí, así que tomé el valor necesario e intenté caminar hacia la salida, pero como el maldito destino me odia pise en falso y caí lastimandome el brazo derecho,esto hizo que aquel extraño ser se diera cuenta de que trataba de escapar e inmediatamente se dirigió hacia mi, creí que seria mi fin pero...
Nada pasó, simplemente me miró fijamente, como cuando estaba en esa camilla una mirada calculadora y fría, duró así durante unos segundos antes de lanzarse hacia mi y enterrarme
El bisturí que momentos atrás se había caído, en mi brazo que ahora se encontraba dislocado y
Sangrando, fue tanto el dolor que tuve que morder mi propio brazo para reprimir el grito haciendo que este sangrara mas,la criatura con cuerpo "humano",no se para donde le había dado, corrí lo mas que pude y me escondí en una de las bodegas trataba de detener la hemorragia y que no salpicará tanta sangre, escuché unos pasos fuera de la bodega... Ahí estaba yo,esperando, comencé a llorar,cubriendo mi boca con mi mano izquierda para impedir que los sollozos salieran, estaba esperando el momento en el que entrara y fuera mi turno para el mismo destino que mi jefe.
De nuevo los pasos se escucharon pero,cesaron, estaba ahí, no me lo podía creer, me había encontrado,era mi turno, podía ver por debajo de la puerta, a través de la luz que se colaba, podía fijarme que traía un objeto pequeño en sus manos, por la forma que traía deduje que era el bisturí, pero...
Traía algo mas,era un cuchillo,pero no era cualquiera, era un cuchillo de carnicero, estaba esperando a que entrara y se llevara consigo mi vida, escuché que tocaban la puerta de aquella bodega,esto me hizo que diera un pequeño salto en mi lugar y de nuevo volvieron los sollozos... Y finalmente, abrió la puerta,ya era hora de mi turno, era hora de que me fuera a uno de los cuatro mundos que mi etnia hablaba mucho, después de la muerte todos vamos a un lugar del que ya no sufrirás, por amor o decepción, el mundo perfecto a decir verdad,pero este no es momento para esto...
Se abrió la puerta, esperaba a que la apuñalada llegará ,pero,no llego, me fijé, se le había caído algo. Un corazón. El corazón claramente parecía en mal estado, creo que era de una de las personas muertas,una de esas personas tenían problemas del corazón, ese corazón le estorbo y yo aproveché para escapar en lo que se deshacía de el,miré como tomaba el corazón entre sus manos y lo aplastaba la sangre salpicó por todas partes,me dieron grandes ganas de vomitar pero tuve que aguantar, mi vida ahora era mucho mas importante,corrí por los pasillos de aquel lugar con la esperanza de poder salir viva, me repetí varias veces, no voltees atrás, pero fui muy idiota, voltee, gire de nuevo al frente, la puerta estaba siendo detenida por un brazo humano, lo quité,pero antes de abrir la puerta, escuché una frase que provenía de atrás mio,"voltea solo quiero abrazarte",no me lo podía creer la criatura podía hablar, abrí mucho mas rápido la puerta, salí de allí como pude, corrí, corrí todo lo que me permitían mis piernas, aunque fuera con el brazo roto y sangrando no me detendría jamas, aun no a llegado mi hora de morir...
Después de llegar a mi casa me dispuse a darme los primeros auxilios, me vende el brazo y detuve la hemorragia, luego me fui lo mas rápido posible de ese estado y viajé a otro,no creo que se detenga en encontrarme...
Ahora mismo me encuentro en mi casa sollozando de nuevo estoy al borde de entrar en demencia, los golpes a mi puerta no cesan, escuchó la misma frase de ese monstruo. Tomo una pistola que se encontraba en uno de mis cajones del cuarto...
Adiós...