El silencio reina la habitación, Joel está de pie observandome, mientras que yo estoy sentado en la enorme cama de su habitación, un poco incómodo por su mirada penetrante.
-Nunca había sentido esto- era lo único que decía, mientras me miraba.
No sé que decir, de valiente no queda nada, creí que cuándo tuviera a Joel enfrenté de mi, le haría cualquier cosa o me lanzaría a el, pero ahora que está pasando, no sé cómo actuar, me incómoda y me hace sentir intimidado.
-Eres lo que siempre esperé- sus palabras me hacen sonrojar.
¡Dioses! ¡Esto en realidad está pasando!
-No quiero separarme de ti nunca, menos ahora, que he encontrado al amor de mi vida- ¿El amor de su vida?
-¿Amor de tu vida?- pregunto poco audible.
Joel asiente, sus ojos brillan y la sonrisa que tiene en la cara, me hace tranquilizarme un poco.
-He soñado contigo, has estado siempre en mis sueños, diciéndome que te busque y luche por nuestro amor- confiesa.
Abro los ojos al máximo, ¡Dios! Esto está realmente loco, miro sus ojos para ver si hay rastro de burla en ellos, pero no, totalmente serios y con ese brillo.
-¿Es...enserio?- preguntó aún incredulo.
Joel me acorrala, subiéndose arriba de mi, toma mis manos y las sube por encima de mi cabeza, y cuándo nuestras caras están frente a frente, responde.
-Nunca habría jugado con algo tan serio, te he esperado tanto tiempo, que lo menos que quiero ahora es jugar contigo.
Y con eso junta nuestros labios, dejo de pensar y me entrego totalmente a nuestro momento.
Lento y suave es como nos besamos.
-Nunca. Dudes. Qué. Te. Amo.- dice detenidamente.
¡Dios estoy que muero! ¡Mi cantante favorito, está enamorado de mi! ¡Cómo yo siempre soñé!
-Estoy en como siempre estaba en mis sueños- le digo.- Junto a ti, siendo felices-.
*****************
¡Esto acabo! Muchas gracias por leer esta loca historia, sin ningún drama y con mucho amor.
Esperó que les haya gustado, y déjame tu opinión al respecto.
Nos leemos en mis otras historias.
