fetish [tysh]

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“tengo hambre”

josh trataba de prestar atención al profesor, pero este hablaba muy rápido y era difícil de seguirle el ritmo.

además, el hambre no lo ayudaba.

suspiró rascándose sus rizos y acomodándose en el asiento.

escuchó como su nuevo compañero de asiento, no dejaba de roncar.

sus ronquidos cada vez se hacían más fuertes y era muy probable que el profesor los escuchase.

no quería despertarlo.
el chico, llamado tyler, lo había estado mirando mucho.
se había dado cuenta y eso lo hacía sentirse incómodo.

frunció las cejas. le había prestado el lápiz para nada.

el fuerte ronquido hizo que volviera a la realidad. decidió no despertarlo, sería una venganza por pedir el lápiz y no usarlo.

—soy todo un chico malo

soltó una risa y siguió copiando.

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—¡joseph!¡robert joseph!¡arriba muchacho!

el profesor hacía su mejor esfuerzo para despertar al castaño.

el timbre ya había sonado y el chico aún seguía durmiendo.

tyler tenía el sueño pesado. tenía que ponerse más de diez alarmas para poder despertarse, y aún así, llegaba tarde.

el adulto suspiró con frustración y miró hacia la puerta.

no había nadie. sonrió y tiró fuertemente el mechón castaño del chico.

—¡ah!—gimió con dolor.

—señor joseph—llamó con cierta molestia. el nombrado lo miró de mala gana.

—joseph, ya tengo demasiado con tener que aguantar a estos adolescentes, que seguramente, desconocen la existencia del desodorante—protestó. —mi paciencia hacia usted es nula y eso que recién comenzaron las clases.
así que le pido que esto no se repita y que tratemos de llevarnos mejor, al menos este año.

—¿desodorante?—preguntó dormido.

—¡levántese y salga de aquí!—dijo masajeando sus sienes.

tyler agarró sus cosas y salió rápidamente del salón.

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—viejo, ¿qué te ocurrió?

brendon urie, el mejor amigo de tyler, desde que tienen la mala costumbre de comer en clases.

—¿qué?

—¿qué te pasó? el descanso está a punto de terminar y ¡no pudimos hablar!

—me quedé dormido—soltó un bostezo y caminó con el pelinegro hacía los jardines de la institución.

se sentaron bajo la sombra de un árbol y sacaron sus almuerzos de sus mochilas.

—¿con quién te sentaste?¿me extrañaste? eso es seguro. si te quedaste dormido es por qué tu compañero es un aburrido.

el castaño mordió sus sandwich, mientras miraba como brendon parloteaba.

—¡eso no te hubiera pasado si nos hubieran puesto en el mismo salón!

sonrió y negó.—ya sabes que nos separan desde lo que pasó la otra vez

el año pasado, habían hackeado la red de la escuela para jugar fortnite en todas las clases. había funcionado algunas semanas hasta que alguien los delató.

—nunca voy a entender cómo lo hicimos

tyler se encogió de hombros.
—bueno, me senté con un chico nuevo, se llama joshua dun—dijo, y recordó su pálido rostro y las pequeñas pecas que tenía.

—es muy bonito. tiene los ojos rasgados, como si fuera asiático y sabes como me gustan esos rasgos

—tus fetiches son raros—comentó divertido.—¿del 1 al 10?¿cuánto le das?

—un millón—contestó sonriendo.

siguieron comiendo y hablando de chicos que les parecieron lindos.

—es castaño, alto, se viste muy a la moda y ¡ah! no sabes, me dijo que mi sonrisa es linda, algo psicópata... ¡pero linda!

tyler rió y giró su cabeza hacia otro punto del jardín. bajo otro árbol estaba josh, comiendo una naranja.

—brendon, es él, el chico de cabello azul

el pelinegro soltó un silbido.—vaya, si que tuviste suerte. yo que tú, lo aprovecharía

—lo haré, ese chico será todo mío—dijo sonriendo, sin dejar de mirar al teñido.

really? nunca es muy tarde para actualizar... creo