—Kibum...ya es de día. –escuchaba aún con mis ojos cerrados, la luz del día calaban en mis ojos aún si nos los abría, había tenido un sueño tan placentero, sólo estaba yo en una playa desierta, disfrutando de una brisa marina exquisita.
Abrí mis ojos y me encontré con Jonghyun observándome anchando una brillante sonrisa, incluso más brillante que la luz que se reflejaba por las ventanas de mi habitación. ¡¿Qué diablos hace aquí?!
— ¡Hey! ¿Qué jodidos haces aquí en mi habitación? –rezongué frunciendo el ceño.
—Me he quedado dormido a tu lado, o más bien, tú pasaste toda la noche acurrucándote entre mi pecho. –dijo calmado haciendo aparecer un ligero rubor en sus mejillas.
¡¿Cuándo diablos he hecho eso?! Le miré ofendido, fijé mi mirada hasta la mesa en donde necesitaba revisar mi celular y ver qué hora era, pero los recuerdos de la noche anterior me invadieron por completo haciéndome sentir un completo idiota, sobre todo al ver ese florero pequeño destellando aún variados colores por la habitación.
No puede ser... ¡¿No fue una pesadilla?! ¡¿En verdad Jonghyun me había visto siendo una nenaza?! ¡Joder! ¡Necesito una bofetada y una patada en las bolas para aterrizar!
—La playa era hermosa ¿no? –soltó de repente interrumpiendo mis pensamientos suicidas por haber revelado mis traumas de infancia a un completo alíen bien parecido.
— ¿De qué rayos hablas ahora? –pregunté sentándome sobre el suave colchón que hacía descansar mis nalgas.
—De tu sueño, me encantó pasear allí, la brisa movía tus cabellos de una forma muy linda –decía levantándose de la cama, caminando hasta la salida.
¡¿Cómo podía ser posible que ni siquiera de mis sueños puedo tener control?!
— ¡Oye! –grité ganándome su atención antes de que abandonara mi habitación. —No vuelvas a entrar a mis sueños, necesito una jodida privacidad en mi vida. –solté molesto. No puedo creer que la bruja sea capaz de joderme toda la privacidad que me quedaba ¡¿Y si soñaba cosas húmedas, también él lo sabría?! ...Espera... ¡Demonios! ¡El día que llegó Jonghyun tuve un sueño erótico con él de protagonista! ¡Mierda, mierda, mierda! ¡¿Él sabe de ese sueño?! ¡Maldita sea! ¡¿Cómo demonios le puedo mirar a la cara si me entero que pudo presenciar esa clase de sueños pervertidos que se me dan en esta podrida cabeza?!
—Lo lamento, no puedo evitarlo, la conexión contigo se está volviendo más fuerte, a decir verdad...–se acercó hasta mi exaltado yo, me revolví los cabellos sintiéndome un pobre desgraciado. Mis mejillas sin querer se sentían ya calientes, diablos, no podía verle a la cara. Jonghyun se sentó cerca de mí. —Desde ayer algo dentro de aquí –apuntó hasta su corazón. —se agita demasiado, quizás es normal en los humanos ¿no? –preguntó preocupado.
¿De qué rayos hablaba? ¿Se le agita el corazón...conmigo?
¡Ugh, eso sonó demasiado cursi!
—Lo extraño es que sólo me sucede contigo –me observó con temor, podía comprender que todo esto era nuevo para él y seguramente se hacía miles de ideas erróneas de lo que le estaba sucediendo a su cuerpo.
— ¿Conmigo?... ¿Cómo estás tan seguro? –pregunté intentando calmar el nerviosismo que provocaba hablar de esta clase de cosas con un...alíen agraciado.
—Pues, con la anciana no me sucede, tampoco cuando me interrogó aquella mujer esa vez que me dejaste fuera de tu hogar, tampoco cuando caminaba solo por las calles buscando indicaciones a personas de la ciudad para llegar hasta la anciana esa vez que también me pediste que me fuera.
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Perfecta Ambición [JONGKEY] ♥
Romance¿Qué tan lejos es capaz de llegar una persona que de un momento a otro perdió la chispa de la ambición? Kim Kibum, reconocido escritor por un libro que marcó su carrera, pero, que lo llevó al hundimiento de su popularidad. ¿Por qué conformarse con...