A la mañana siguiente que desperté Harry ya no estaba a mi lado pero yo seguía con su camisa puesta.
—¿Merry?—Escuché la voz de mi madre tras la puerta.
—Ya despierta tenemos visitas—Dijo para después marcharse.Me desvestí guardando la camisa de Harry en mi clóset.
Tomando de él una falda de color rosado con una blusa del mismo color. Con la palabra "Daddy" en amarillo sobre ella.
Al bajar por la escalera no pude tener una imagen más horrible.
Harry se encontraba sentado en el sofá tomado de la mano de Alice, su esposa.
—Ya llegó—Alice volteó a verme de una manera extraña.
—Hola linda—Dijo con su estúpida voz chillona.—Hola—Contesté de mala gana y me senté en el sofá frente a ellos.
—Y bueno Alice, ¿a qué se debe su visita?
—Preguntó mi madre.—Mi Harry—Contestó resaltando el "mi".
—Va organizarme una fiesta por mi cumpleaños número 24 y quería invitarlos—Dijo y sonrío descaradamente.Jodida perra.
Yo me dedicaba a asesinar a Harry con la mirada mientras éste se mantenía serio y con la vista al suelo.
—Claro que asistiremos Alice será un placer—Contestó mi madre.
—Si me disculpan, pasaré al sanitario—Dijo Harry educadamente.
—Claro Harry al fondo a la derecha—Dijo mi madre.
El se paró y subió las escaleras.
—Yo debo ir a mi habitación adiós.
—Dije, y me paré para ir tras él.Al llegar arriba lo detuve en el pasillo.
—Harry—Le susurré.
—¿Qué sucede?
—¿Cómo de que qué sucede? porque traes a esa pero aquí.
—Dije con enojo.—Ella quiso venir a invitar a tus padres.
—Le hubieras dicho que no.
—¿Celosa pequeña?—Sonrío.
¿Celosa yo? Puff.
—Claro que no—Contesté.
Lo miré unos segundos y luego observe sus jugosos labios.
Jodeeeer.
Lo necesitaba.
Ahora.
—Joder ven—Dije para arrastrarlo a mi habitación y cerrar la puerta.
Lo acorrale contra está y lo besé intensamente el sujetaba mis caderas mientras yo hundia mis dedos en su cabello.
—Para—Exclamó apartandome de él.—Nos pueden escuchar.
Yo lo seguía mirando con la respiración agitada y las manos en su pecho.
Salió rápidamente de la habitación y se dirigió al baño.
Me senté en la cama sin dejar de pensar en él, en sus labios, en su cuerpo, ya que ningún hombre lograba ponerme como el lo hace.
No sólo quiero besarlo quiero sentir tu piel y dormir en su pecho.
Esta es una sensación que sólo Harry Styles provoca.
Pero yo no puedo enamorarme.
Menos de el.
Me perdí unos momentos cuando recibe una llamada de mi mejor amigo Nick.
—Hola nena ¿Qué haces?
Nick es mi amigo de la infancia él me había ayudado demasiado en todos mis problemas siempre estaba para mi.
—Pensando...
—¿Y se puede saber en qué?
—Un hombre.
—Es una broma ¿cierto?
—No y necesito tu ayuda.
Empecé narrar desde el principio todo lo que había pasado con Harry remarcando que él era mayor y casado.
—Joder muñeca estás en serios problemas—Dijo después de escuchar mi historia.
—Lo sé ¿Qué hago?—Pregunté.
—Lucha por él, sí es lo que tú quieres hazlo sabes que yo estaré aquí para apoyarte en cualquier decisión que tomes por más estúpido que sea.
—Pero Nick su...—El me interrumpió.
—Su edad no importa Merry y tampoco si es casado, si tú lo quieres y el atí, intentalo.
—Muchas gracias Nick ya que debo irme a dormir.
—Hasta mañana nena—Dijo mi amigo para colgar la llamada.
Salí de la habitación escuchando el ruido de la tv en la habitación de mis padres, pocas veces se quedaban aquí.
Así que subí a mi habitación a dormir.
A la mitad de la noche sentí como acariciaban mi cabello así que desperté sobresaltada.
—Pequeña soy yo tranquila.
—Escuché su voz ronca.—¿Qué haces aquí?—Susurre.
—Vine a verte y a cerciorarme que no estuvieses enojada por lo de hoy.
—No, estoy bien.
—Eso es bueno nena y ¿te veré mañana en la fiesta de Alice?
—Yo, no lo sé.
—Espero que asistas pequeña te tengo una sorpresa que me habías pedido desde hace tiempo—Dijo para depositar un beso sobre mi frente y marcharse por la ventana.
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