I'M NOT A TROPHY

Capítulo 21

(...)

Narra Amy

Mire a Beronica y bailamos sin parar en la pista mientras sosteníamos nuestras bebidas en nuestras manos. Reíamos sin parar. Estábamos tan borrachas que si nos dejábamos de bailar posiblemente hubiésemos caído de bruces al suelo. Me tomaron de la cintura y me giraron. Un chico de ojos verdes, con el cabello largo hasta los hombros, moreno y muy tonificado bailaba frente a mi. Sonreí.

-Me llamo Gabriel Epson, me gustaría conocerte.

-Amy Camile Woods, lo siento, tengo novio.-Sonrió.

-Tranquila, amigos resultaría mejor.-Asentí sonriendo.-No hagas eso.-lo mire confundida.

-¿El que?-Sonreí de nuevo.

-Deja de sonreír.-Me reí provocando que el riera también. Me sostuvo la cintura y bailamos demasiado juntos. Mire sus labios carnosos y sabía que podía pecar con tan solo ver esos labios rosados. Me aparte y él me miraba con sus dientes perfecto. Su aliento a menta me hipnótizo.

-¿Amy?-Me gire y vi a Chad. Me acerque a este y lo hale para que conociera a ¿Grabiel? ¿Gabriel? Si, Gabriel.

-Chad amor, este es Gabriel un sobrio dentro de una fiesta.-Se miraron y podía percibir un poco de odio entre esas miradas lo cuál ignore por completo sonriendo.

-¿Que haces  hablando con gente desconocida?

-Pues hablando, padre.-Esbocé una pequeña sonrisa y este me tomó del brazo con fuerza alejando me de él chico sobrio.

-Deja de hacerte la graciosa y apartate de él.-Lo mire con mi ceño fruncido.

-¿Quien te crees? Para que sepas yo tengo control de mi misma y si quiero conozco a todos los chicos que se me den la gana.-Este apartó la mirada.

-Bien, pero no seré el segundo plato de nadie.

¿Esta terminando conmigo?

Creo que si querida.

-¿Que has dicho?-Dije tomándolo del brazo haciéndolo que me mirara.

-Que se acabó Amy. No seré el idiota que le pegaron los tarros.

-¿Acaso hablar es tener sexo?

-No, pero cuando lo conozcas caerás como todas y entonces yo pasare a segundo plano.

-¿¡Estas demente!? ¿¡Sabes cuanto me costó decirte lo que sentía para que vengas a decirme esto!? ¿¡Sabes Chad!? Por estas escenas no soporto la idea de tener novio.

-¡Claro que no soportas la idea de tener novio! ¡Así te tiras hasta con las rocas y no te dicen nada!-Mi mano se movió con fuerza y golpeo su rostro con fuerza haciendo que su rostro girara. Apretó la mandíbula y me miro.

-Espero que en tu infinita vida te encuentres con la peor persona del mundo.

-Ya me la encontré.

-Idiota.-Me gire y comencé a caminar.

-Zorra.

¿¡Zorra!? ¡¡ZORRA!!

Me gire como la exorcista y lo mire. Mis ojos se cristalizaron pero rápidamente las hice regresar a lo mas oscuro de mi corazón.

-No te atrevas a acercarte a mi nunca más en tu vida.

-De todos modos no lo haría.-Se dio la vuelta y se fue. Me quede mirando su espalda y como sus brazos apartaban a las personas de su camino.

-¿Sola?-Gabriel pregunto preocupado. Aunque no creía que lo estuviera.

-Si, pero ya me voy.-Salí del club y me fui caminando hasta el apartamento. Llegue pero fui al de mi hermano. Este estaba parado frente a la puerta. Me acerque y me envolvió en sus brazos.

-Chad me contó todo.-Ignore lo que me dijo y me aparte.

-Nunca quise que pensará eso, pero ni si quiera me dijo que lo sentía. Me dijo zorra.

-Él también me dijo eso y lo golpee. De echo esta en el apartamento.-Asentí y camine en dirección a este. Abrí la puerta. Me adentre y escuche gemidos. Acelere el paso y abrí la puerta de nuestra habitación. Una chica con cabello rojizo estaba encima de el moviéndose. Entre a la habitación, abrí una maleta y comencé a echar todo tipo de ropa en ella. El ruido que hice provocó que estos se separaran.

-¿Amy?-No me moleste en contestar. Cerré la maleta cuando todo estuvo adentro y salí de la habitación a pasos rápidos. La chica salió corriendo sin antes darme una mirada de arrepentimiento.-Amy, detente.-Continúe mi camino hasta que este me tomo del brazo. Lo aparte y tomé la maleta pero insistió. Se paro frente a mi y tomó la maleta para lanzarla hacía otro lugar provocando que algunas cosas se rompieran. Yo solo miraba sus ojos enojada. Esta vez él sería el que saldría lastimado.

-¿Que quieres? ¿Restregarme como me dejaste y que bien se sintió ella sobre ti restregandose? ¿Como gemía sin parar?-Las preguntas solo hicieron que él se enojara.-No necesito explicaciones, tu terminaste lo nuestro y yo me voy.-Camine para tomar la maleta pero este tomo mi brazo con fuerza y me hizo girar me.-¡Sueltame!-Me quite de su agarre.-No quiero que me toques por que de nada más sentir tus manos me das asco. Asqueroso.-Sus ojos se cristalizaron.-Lo menos que quiero en este momento son tus sucias manos sobre mi y escuchar tu asquerosa voz explicando cosas repugnantes.-Tome la maleta cortándome la mano con los vidrios y abrí la puerta.-Espero que en tu corazón sientas el dolor que sentí yo cuando me llamaste zorra.-Salí dando un portazo y me dirigí al ascensor. La chica de cabellera rojiza estaba maldiciendo.

-Soy una idiota, como debí creerle que no tenía novia o esposa o lo que sea que eran. Soy lo peor.-Dijo sollozando. Me harte de que se auto lastimara.

-No fue tu culpa.-Se sobresalto y bajo la cabeza al verme.-Si él te dijo semejante mentira es culpa de él. Para la próxima no le creas a ningún chico que no tiene novia.-Dije sería. Se abrio el ascensor y me adentre a este con calma. Las puertas se cerraron, toque el numero del piso número uno y espere a que este llegara al destino que me esperaba. Salí del ascensor cuando sus puertas se abrieron y llame a un taxi. Le dije que me llevara al instituto. Llegue a este escabullendome de los guardias y entre a lo que era mi habitación. En la sala estaba Alondra y una chica de cabello negro corto. Me miro y su sonrisa se apago al instante. Mis ojos se cristalizaron y esta me rodeo con sus brazos luego de correr hasta donde yo estaba. Lloré en su hombro sin cesar. Me sentía estupida por creerle a Chad el amor que me tenía. Le creí y salí herida, de nuevo.