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-Bien...- mencionó el policía mientras se acomodaba en su silla.- ¿por que estás tan nervioso?, Finn ¿cierto?

-Si, Finn...- respondí.- porque jamás me habían interrogado. Yo no sé que tengo que ver con su asesinato.- el policía rió por lo bajo.

-Este no es un interrogatorio, y tampoco un asesinato, sino un suicidio.
Solo te haré unas preguntas y listo... Te podrás ir...- suspire con nerviosismo.- ahora... Testigos afirman que tu fuiste la última persona que vió a Lucas, ¿esto es cierto?

-¿Yo que mierda voy a saber eso?, tiene muchos amigos con quién acostarse, tal vez a ellos son los que tiene que interrogar.

-¿Que relación tenías con el chico?

-Fuimos novios, hace mucho... Muchísimo tiempo.

-Bien... ¿Sabes si tenía problemas en su casa o algo parecido?- negué con la cabeza.- bueno, ¿peleaban seguido?- bufé.

-Cuando habíamos terminado me preguntaba con respecto a todos los chicos con los que hablaba.

-Entonces...- anotó en su libreta.- ¿algún abuso de parte tuya o de el?- me puse serio.

-¿Esto que tiene que ver...?

-¡Hey!- exclamó.- solo contesta.

-No... Ningún abuso.- notó mi seriedad, así que me miraba con sospecha.

-Bien, te estaré vigilando.- salió de la dirección y en seguida yo...

-Hey rana...- me llamó Jack.- ¿que pasó?- se veía preocupado.

-No quiero hablar de eso, y deja de decirme rana suena ridículo.- salí hasta la parada de autobuses.

Al caminar, me topé con Sophia.

-Hola Finn, ¿podemos hablar?- asentí.

-Claro.

-Escucha... Lo lamento, no pensé lo que dije, ahora veo que no murió.- rió pero yo no.- mira, no tenía porque haberte dicho eso, y la verdad es que...

-Hey, te perdono. Se que solo me estabas protegiendo, y te agradezco eso.- sonrió, al instante nos dimos un abrazo.

-Escucha...- hizo una pausa.- contacté a un psicólogo.- fruncí el ceño confundido.

-¿Para ti...?

-No Finn, para ti.

-Yo no necesito un psicólogo... No estoy loco...- intenté irme.

-Yo lo sé...- me detuve.- pero estás en problemas, tienes una obsesión con ese idiota. Mirate, mira esto.- tomó mis muñecas.- esto está mal, y lo haces por el, no lo niegues.

-No Sophia, no es por el. Yo no estoy loco y no voy a ir a un psicólogo.- me intenté ir.

-¡¿Nisiquiera por mi?!- exclamó y me giré.

-No hagas esto.

-No lo hagas por ti Finn, hazlo por Wyatt, por Jaeden, por mi... Saca a Jack Dylan Grazer de tu cabeza, piensa en ti, piensa en nosotros.

-Esto no es por el.- me di media vuelta y me fui.

Tomé el autobús con dirección a mi casa.

Al llegar entré, me percaté de que Jaeden y Wyatt no estaban, así que puse un poco de música, saqué una botella de Vodka que estaba en una alacena.

Comencé con un pequeño vaso, horas después estaba más ebrio que Sophia el día de mi fiesta.

Entraron Jaeden y Wyatt.

-Ebrio otra vez...- mencionó Jaeden.- Finn, no es gracioso.- intentaron cargarme.

Me llevaron hasta la habitación que me corresponde, me recostaron en la cama y de ahí no recuerdo nada más.

-¡¿Que pasó?!- gritó.

-¡Llama a una ambulancia, se está muriendo!- gritaba con toda su fuerza.- Finn, quedate conmigo.- la vista se me comenzaba a nublar.- Finn, soy Sophia, quedate conmigo.- su ropa estaba empapada de sangre.

-¡Ya basta!- grité y me levanté.

-Hey rana, calma.

-¿Que haces aquí Jack?- frote mis ojos.

-Wyatt me pidió que te cuidara, fueron a ver a la tía de Jaeden que al parecer está en el hospital. Intentaron llamarle a Sophia pero no respondió.- su vista estaba centrada en la caja del videojuego Outlast 2- ¿ya lo jugaste?- negué con la cabeza.

-No he acabado el primero.

-Acabemoslo juntos para comenzar este otro.- se levantó de la silla en donde estaba y salió de la habitación. Al notar que no lo seguí, regresó.- ¿no vienes?

-Mi cabeza está a punto de explotar. Creo que no...

-Agh vamos, no seas aguafiestas, nadie te ordenó ponerte ebrio.

Bajamos. Conectó la consola y comenzamos a jugar. Horas después, la sala se había convertido en un caos, había frituras por todos lados y soda tirada en la mesa.

-¡Mierda!- gritó.

-¡Vamos idiota, corre!- exclamé.

En eso pausó el juego.

-¡¿Que mierda te pasa?!

-Necesito orinar. Rana, recuerda no dos litros de soda antes de cualquier juego.- se dirigió al baño.

-¡No me llames rana!- exclamé.

Cinco minutos después, salió con una caja en mano.

-¿Que es esto?- preguntó al ver su contenido.- ¿navajas?

-Eh... Creo que son de Jaeden.

-¿Jaeden se corta?- me encogí de hombros.

-Talvez con esas se afeita.

-¿Afeitárse?, lo dudo.

-Deja de meter tu nariz en donde no te importa y ven a pasar esto...- le di el control y la manga se subió un poco.

-Eres tu.- aseguró asustado. Subí la manga.- te cortas.

-No es lo que parece, solo son rasguños.

-No te creo, quiero ver.

-¿Acaso no confías en mi?

-No, dejame ver...- rodé los ojos.

-No, Jack.

-Geniál, maldito loco.- tomó su chaqueta y salió del lugar.

-¡Vete a la mierda!- grité y lancé un vaso lleno de soda a la puerta.- ¡hijo de perra!- tomé una navaja de la caja y la pasé por todo mi brazo.






































Los amo.💓
Sale, bai.✌

Zorra- Fack                                              [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora