Don't ever let me go Horan

Capítulo 25

La noche previa

Empaqueté todas mis cosas, las necesarias para el viaje. Dos pares de calcetines, boxers, camisetas y pantalones, teniendo en cuenta que serían dos días. Por último cogí el cargador y el móvil y caminé hacia la cocina.

Al preguntarle a Dani dónde ibamos a dormir y demás, me contestó que iríamos a la casa de un amigo suyo, casualidad que sus padres se habían ido de viaje ese mismo fin de semana. Es curioso por qué no pensé en dónde íbamos a pasar esas noches ya que eso supondría más gastos pero ahora sabiendo esto me resultará menos costoso.

-Te doy 100, no gastes demasiado.-me devolvió una sonrisa, me abrazó y se despidió. Mi hermano, que estaba a su lado lo imitó.-Pasadlo bien, cualquier cosa que necesites, llámame.

-Todo irá bien, papá. Adiós.-Me despido con una sonrisa.y corriendo las escaleras hasta la puerta.

-¿Todo listo?

-Perfecto.

-Entonces podemos irnos.

El próximo autobús salía en media hora, pero de aquí a la estación distaban unos 15 minutos, más o menos, depende del andar de cada persona.

Todos iban acompañados de mochilas en la espalda. Yo iba al lado de Niall, a la parte de izquierda del grupo y delante de ellos. Por detrás se oían risas y comentarios de los cuales no prestba atención. Estaba absorto en mis pensamientos. Realmente tenía la mente en blanco. En este momento solo pensaba llegar a tiempo a la estación.

Dani nos asaltó por las espalda poniéndonos sus dos brazos sobre nuestros hombros :

-¿Ganas de pasarlo bien?.-Preguntó mirándonos a los dos.

No le contesté, no tenía ganas de hacerlo y aparte me pareció que estaba siendo retórica.

Llegamos a la estación y nos dirigimos a la cola para comprar los tickets. Yo me estaba poniendo nervioso porque veía que quedaban 15 minutos y siempre me gustaba llegar con antelación. Con  suerte la cola avanzaba medianamente rápido. Niall me miraba a cada momento y me daban ganas de saltarle diciéndole que parase porque no quería que me viese en ese estado.

Nos tocó nuestro turno y fuimos uno por uno. Recibí el mío y me aparté esperando a Niall y luego a los demás. Una vez que todos ya los teníamos bajamos al piso de abajo para esperar el tren. Niall me pasó su brazo izquierdo por el cuello y pude sentir su calidez. Si no fuera porque es él, probablemente me hubiera desquitado el brazo en un segundo, no estaba de humor para muestras afectuosas. Formaba parte de mi carácter raro, no tenía nada que ver con el viaje, es más estaba feliz por eso.

Pudimos coger buenos asientos para nuestra suerte y Niall y se sentó enfrente de mí, a su lado Dani le estaba dando un codazo y contándole una especie de chiste que no llegué a escuchar, solo ví que se estaban ríendo.

El viaje se me hizo corto y mi humor cambió pese a que de primeras me repugnaba la idea de tener que estar todo el viaje escuchándolos y formando parte de la conversación.

Llegamos a nuestro destino y nos pusimos un gorro, los que teníamos, debido al cambio de temperaturas, ya era de noche y allí hacía más frío. Nada más salir nos saludó un chico que iba acompañado por tres más, supuse que sería el amigo de Dani que nos iba a dejar dormir en su casa.

 -Jordi, este es Stefan.

-Encantado de conocerte.-le estreché la mano y no tuve que fingir una sonrisa. Era bastante atractivo y por lo poco que sabía o había visto de él parecía mucho más agradable. Almenos eso es lo que percibí. Pelo por la barbilla, ondulado, castaño, ojos verdes y apenas unos centímetros más alto que yo. A continuación se presentaron los demás y nos fuimos dirigiendo a la salida a buscar su 4x4 aparcado. Cabimos todos, aunque un poco apretujados.

Alguien de los que estaban delante sugirió cenar en KFC y todos empezaron a expresar su conformidad. Me pareció bien, realmente cualquier sitio me parecía bien con tal de cenar, estaba demasiado hambriento y Niall por lo visto igual, no paraba de bostezar continuamente.

La cena fue bastante agradable, sobretodo por la pelea de comida y toda la gente mirándonos. Estuve reflexionando sobre ello durante el viaje de ida mientras me interrumpían Stefan y Dani peléandose por qué emisora poner. Este año había sido un gran cambio en todos los sentidos, nunca hubiera pensado en mí abriéndome tanto y participando en una conversación en grupo hasta que conocí a Dani y sus amigos y sobretodo esta noche. No me reconocía.

Stefan iba dando vueltas por la carretera como si estuviera borracho solamente por esa típica gracia al voltante. Todos íbamos con las ventanas bajadas. A mí me encanta, era una de esas cosas que te hacen sentir vivo, respirar aire fresco y sentir la brisa azotándote.

Se detuvo ante una gran valla y apretó un botón del mando y empezaron a abrirse. Ya sólo eso me había dejado fascinado. A medida que íbamos entrando se podría apreciar la gran casa que era. Bajamos después de aparcar el coche en su cochera.

-Coged esas botellas.-dijo señalando a unas que estaban en una esquina junto a la puerta que accedía a la casa. "Alcohol" pensé al verlas.

Nos fue indicando nuestras habitaciones y estuvo esperando a que dejaramos todas nuestras cosas y enseguida nos acompañó al salón. A mí me tocó en la misma habitación que Niall. El salón era increíblemente grande, a decir verdad, esa parte de la casa era como dos, o incluso tres. En el centro había una gran televisión de plasma y enfrente una mesa de cristal y un sofa, dos más a los lados. Y luego al fondo y las esquinas había un billar, un futbolín, dos bicicleta estáticas y más piezas propias de un gimnasio.

-Como si estuvieráis en vuestra casa.-dijo Stefan en voz alta.

Todos estaban tan asombrados como yo, dos se lanzaron al billar pero sin intención de jugar.

-Había pensado en jugar al Just Dance si os apetece, siempre acabamos jugando, borrachos es más divertido.-se echó unas risas y todos le imitaron.

-¿Dónde están los vasos?.-preguntó Seth.

-Coged estos de plástico, no me apetece ensuciar los otros.-nos dijo Stefan sacando unos vasos grandes de una estanteria al lado de la puerta y dejándonoslos en la mesa. Nos acercamos todos a coger uno y se fueron serviendo. Yo no sabía que escoger y tampoco me apetecía beber alcohol, almenos por ahora y me puse fanta de naranja.

Al cabo de un rato no paraban de hacer gracias sin parar de reirse y es cuando empezamos a jugar al Just Dance. Fue bastante desmadre, muchos jugaron con el vaso en la mano y ya te puedes hacer una idea de cómo acabaron las alfombras y algunos muebles.

A todo esto pregunté a Niall a qué hora íbamos al concierto ya que era al día siguiente y contestó que empezaba a las 8:30 osea que tendríamos que salir un par de horas antes ya que estaba a un rato de distancia el recinto.

-Me voy ya, estoy agotado, y eso que casi no he bebido.-solté una carcajada.-Niall, ¿te quedas?

-No, me voy contigo.

-No tienes porque hacerlo, de verdad.

-Que no, estoy cansado igualmente y nosotros más que los demás necesitamos estar descansados para mañana. -Buuuuuuuuuuuuenas noches a todos.-les dijo a todos antes de dejar la habitación, en su voz se notaba que había bebido, quiero decir más que yo, en mí apenas se apreciaba, solo estaba más suelto. Había sido una noche genial, no sé si sería por el alcohol, por mi repentina soltura o las dos cosas pero me atreví a besarle varias veces, aparte que los demás nos vitoreaban cada vez que lo hacíamos, lo cual me hizo sentir más seguro.