-¿Quien era ese chico?-pregunto Lizzie por tercera vez, empiezo a pensar que la idea de que las chicas rubias son tontas es verdad gracias a ella, rubia, baja, ojos verdes, tez bronceada.
-No lo se.
-Oh por favor, claro que lo sabes-dijo Grilla, castaña, ojos azules, alta, de tez morena.
-Se llama Keegan, es lo único que se-respondí con pesadez.
-¿Y Keegan buscaba algo en especial?-pregunto Bárbara, de tez pálida, demasiado, pelinegra, ojos negros y estatura normal.
-No, ni siquiera nos conocemos, ahora, me iré a mi clase de historia, Adiós.-dije, ignorando sus pucheros y quejas.
Si, desde que hable con ese tal Keegan, las chicas no han dejado de hacerme miles de preguntas sobre el, tedioso, la clase de historia paso muy rápido, al sonar el timbre, tome mis cosas y me encamine a mi clase de matemáticas, iba pensando en que excusa utilizar con el profesor Finnegan cuando alguien me hizo caer, alce la vista hacia el o la responsable y no me sorprendió ver a Charlotte, rubia, ojos verdes, alta y piel bronceada, sinceramente detestable.
-Oh...creo que te caíste Kim-dijo con voz chillona, rodee los ojos y me puse de pie mientras sacudía el polvo de mis pantalones-Me pregunto como es que dejan entrar a personas tan torpes como tu en el instituto.
-De la misma forma en que dejan entrar estúpidas como tu-dije provocando algunas risas de entré los presentes, su rostro se puso rojo de la ira mientras yo me límite a sonreír de lado-Ahora, si no te importa, tengo que ir a mi clase de matemáticas.
Sin esperar respuesta de su parte, la empuje dejando a la pobre confundida y enojada, entre y me senté en la mesa del fondo junto a la ventana, me recoste en la mesa, ahora si, a pensar en una excusa creíble.
-Disculpa, ¿esta ocupado?-dijo una voz a mis espaldas, me erguí rápidamente y me gire para buscar al dueño de esa voz, Keegan-Oh Kim, hola de nuevo, ¿no importa si me siento aquí?
-No...¿qué te paso en el rostro?-pregunte, el lado derecho de su rostro estaba hinchado y tenía un pequeño raspón en la barbilla, el al principio me miro confundido pero después sólo se hecho a reír.-Ok...creo que lo que sea que te haya pasado te afecto un poco.
-No, no lo recordaba, lo que paso fue que después de hablar contigo, me distraje un poco y un balón de fútbol americano me golpeo-bueno debo admitir que es algo tonto, ¿qué pasa con este chico?.-Bueno, dejando ese tema de lado, no te importaría di me siento ahí ¿o si?
-Siéntate, pero no hables, necesito inventar una excusa que decir al profesor Finnegan-dije volviendo a recostarme en la mesa, el asintió y cruzo los brazos sobre la mesa, después de cinco minutos, el profesor Finnegan llego e inicio con la clase más aburrida del mundo, estaba demasiado distraída que no me di cuenta que el profesor Finnegan me llamaba.
-¡Señorita Johnson!-grito exasperado.
-¿Qué...?-dije distraídamente mientras sacudía la cabeza.
-Si mi clase es tan aburrida por que no mejor sale de ella-dijo el, señalando la puerta, bufe y camine en dirección a la salida, justamente cuando estaba en el pasillo, la puerta se cerró de golpe detrás mío, haciéndome estremecer.
-Malditas matemáticas-murmure caminando distraídamente por el instituto, entre a la cafetería, esperando el receso, estaba casi dormida cuando mi móvil empezó a sonar, mire la pantalla, el señor Manson-Señor.
-Kim, necesito que vengas lo más rápido posible, tenemos trabajo y quien mejor para encargarse de eso que tu, envíe a Jason por ti -dijo el, aveces me daban ganas de matarlo, pero si lo hacia, me separarían de Daniel y estaría de por vida en la cárcel-No tardes, cariño.
-Entendido señor-dicho esto, corte la llamada y camine hacia la salida del instituto, en el estacionamiento, estaba Jason, con su típica chaqueta de cuero y su motocicleta-¡Jason!
-¡Pero miren a quien tenemos aquí!-dijo el dramático, rodee los ojos y camine hacia el-Andando pelirroja, los asesinatos no se cometen solos.
Subió a su motocicleta, me hizo una seña para que subiera, subí, tome el casco que tendía hacia mi, rodee su cintura con mis manos, el río por lo bajo y arranco en dirección a la Mansión Manson.
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Amor A Sangre Fria.
RomanceKim, una asesina en serie de corazón frío conoce a Keegan, un muchacho de su misma edad que trabaja con la policía de Nueva York, ellos se vuelven dos personas muy unidad hasta que descubren la verdad detrás de el otro.