Devastarás Las Noches

Sueños de la distancia

Mi corazón oprimido

Siente junto a la alborada

El dolor de sus amores

Y el sueño de las distancias.

La luz de la aurora lleva

Semilleros de nostalgias

Y la tristeza sin ojos

De la médula del alma.

La gran tumba de la noche

Su negro velo levanta

Para ocultar con el día

La inmensa cumbre estrellada.

Una vez que llegue a mi cuarto me tire en la cama con los brazos abiertos, allí el aire estaba caliente y acogedor, ya que antes de irme, había dejado el calefactor encendido para que el ambiente se calentara.

Mientras se me cerraban lentamente los ojos, sentí como alguien abría la puerta de la habitación se paraba en el umbral y tomaba carrera, luego con todo su peso se tiro encima mío haciéndome cosquillas por todos lados, y me aplastaba con su cuerpo.

-no pude controlarme-dijo Erick riéndonos- como antes.

Se acostó a mi lado, los dos mirábamos al techo, callados después del ataque de risa. Hasta que lo soltó:

-Thomas me conto todo lo que paso.-su voz carraspeaba tensa como si le costara hablar de eso. Y yo lo entendía y el me entendía a mi.-Nunca pensé… yo pensaba que no iba a volver. Me sentía mal y no pude estar allí contigo , te falle Lana, te falle.

La voz se le quebraba, el no tenia la culpa aunque sabía que se sentía culpable. Lo abrace como pude aun acostados las lágrimas calientes me ardían y me resbalaban por las mejillas, apoye la mejilla en su pecho y asi me quede. Podía notar como mi hermano estaba tenso, sabia que se aguantaba la angustia y la rabia que sentía.

-No ha sido tu culpa, y nunca me fallaste, y nunca me fallarías jamás.-dije , después de eso no hablamos , mi hermano poco a poco tranquilizo la respiración hasta convertirla en un profundo suspiro. Se había quedado dormido, y como yo no tenia nada que hacer, y tampoco me molestaba tenerlo conmigo asi que  me quede con el durmiendo.  Sabia que el me quería y que se sentía completamente mal por no estar ese dia en el colegio, pero no podía hacer nada por el. Por  ahora solo descansar en sus brazos acurrucados como cuando éramos niños y teníamos frio. Siempre nos poníamos igual. En sus brazos me sentía más protegida que en cualquier otro, aunque no pasaba seguido, cuando nos abrazamos era un abrazo verdadero de los que nunca se olvidarían.

-Chicos ya esta la comid…-escuche entre sueños, mi madre se había aproximado a mi cuarto y al vernos tan tranquilos y juntos , nos dejó descansar. Pero apenas cerro la puerta yo me senté en la cama restregándome los ojos, el estómago me gruñía de hambre y quería bajar a comer una sopa caliente, asi que mire a mi hermano que estaba profundamente dormido , y fui hasta la puerta.

Baje las escaleras y lo primero que vi es a Adam y a mi pequeña hermana jugando, esa imagen me daba algo tan especial, pero a la vez sentí con vergüenza , celos. Celos de que ella tenia a Adam y yo no tuve a nadie, despeje esas ideas de mi cabeza y me sente en la mesa. Al cabo de unos minutos mi hermano apareció en el umbral con una sonrisa algo triste y con claras marcas de haber dormido, pelo alborotado, ojos rojos y marcas de almohada en toda su cara.

-Como la pasaron hoy?-pregunto Adam sorbiendo una sopa crema, Erick y yo cruzamos miradas , y me apure en sorber la sopa , me quemo la legua y la garganta.

-Bueno…-dijo Erick atragantándose.

Adam se puso serio al verme alterada, el siempre notaba mi preocupación en mis ojos, era algo extraño la conexión que teníamos, como si en realidad fuera mi padre. No me importaba que no lo fuera por que para mi lo era de todas formas, puede que no seamos familia de sangre pero definitivamente lo amaba como si lo fuera, a ninguno de los dos nos importaba la sangre.

-que paso?-su voz era dulce pero a la vez una voz de advertencia.

-Na-nada-vacile. No debi hacerlo, nunca puedo mantenerme firme con Adam , le lance una mirada a Erick.-no paso nada.

Comenzaba a sentirme verdaderamente mal. El estomago se me revolvió.

-no te creo Lana, mira tu cara…-dijo poniéndose serio , y a la vez algo dolido por que no le contaba la verdad. Ya no aguante. Me pare de la mesa y corrí hasta el baño, avente toda la comida por el inodoro. Por que cada vez que las cosas se complicaban asi eso? Era como si mi cuerpo no soportara el peso de la mentira o el peso de una terrorífica idea.

Después de pasar un largo rato en el baño baje las escaleras y me senté en ella a escuchar lo que hablaban Adam y Erick , lo bueno de eso era que no me veían.

-que es lo que paso Erick?-pregunto Adam alarmado, aferre los barrotes de la baranda de madera de la escalera tan fuerte que mis nudillos se pusieron tan blancos como la nieve.

-Yo… lo siento Adam, me siento extremadamente culpable yo-le tembló la voz- no fui hoy, estaba enfermo y paso… y…

-que paso Erick?

-Scott volvió.-dijo sin mas, escuche un ruido como si la palma de la mano de alguien aplastara un bicho en la mesa. Pero solo era Adam golpeando la mesa, a continuación escuche como se corría la silla y como el se paraba. Me pare y subi rápidamente las escaleras hasta mi habitación , allí me senté en la cama.

Unos segundos después Adam ya estaba parado en el umbral con los brazos cruzas y la mirada que contenía preocupación, amor, dulzura, cariño , sobreprotección …Como un padre. Como un padre… un padre un padre… un padre. Esas palabras sonaban en mi cabeza una y otra vez. Me lo quede mirando con los ojos brillosos, el se acerco y se sento a m lado pasándome un brazo protector por el hombro.

-estas bien? Te hizo algo?-pregunto y yo negué con la cabeza.

-Aunque solo con tan solo una mirada es suficiente para sentirme como me sentía antes.-solté, no tendría que haberlo hecho. No quería que Adam se preocupaba pero solo tenia una pregunta ¿Por qué a mí?- ¿ por qué a mi Adam?

Le pregunte lo que me daba vueltas en la cabeza desde que conocí a Scott , ya no aguantaba , mis lágrimas corrieron por mis mejillas y Adam e apretó contra si con fuerza agarrándome del brazo

-No lo se , no se qué se le cruzaba por la cabeza… supongo que al verte tan buena , eso es lo que hizo llevarte a ese mundo de maldad-dijo acariciándome el pelo- Sabes? Cuando un alma negra ve lo brillosa y blanca que es la otra alma , se siente atraída hacia ella , pero cuando la toca la disuelve y la convierte en oscuridad. Pero el no pudo contigo, no contagio lo negro de su alma a tu alma pura y brillosa.

Llore con más fuerza y Adam me abrazo con toda la fuerza que pudo , como si haciendo eso lograra sacarme de la cabeza todo, a veces funcionaba.

Deseaba poder olvidar a Scott para siempre, pero eso me era imposible. Había provocado una herida en todo mi ser. Una herida que nunca se cerraría. Deseaba poder disiparlo de mi mente y cerrarla para siempre para que el nunca pueda volver a entrar. De repente me imagina como sería mi vida sin haber conocido a Thomas, el que me defendió ante Scott. Mi vida sería completamente horrible sin él, no tendría sentido del humor y no conocería lo que podía llegar a hacer una persona tan buena como él.

Nos acomodamos apoyando nuestras espaldas a la fría pared, y sondándonos mas cómodamente en la cama, el me arrollo abrazándome  hasta que me pude dormir.

Cuando me desperté entres sueños estaba acomodada en la cama, tapada con la campera de Adam, seguía siendo de noche, no sabia bien que hora era, me levante y fui al baño. Al volver mire hacia la ventana. Distinguí una figura entre la oscuridad Scott. Scott entornando los ojos y tirándome un beso. Cerré los ojos con fuerza y cuando los abrí ya no estaba , era mi imaginación , solo mi imaginación. Me puse el pijama y me metí en la cama, pensando como seria si seguiría con Scott, posiblemente estos momentos no existían y los que pase con Adam tampoco, probablemente estaría muerta.

Cerré los ojos y me deje llevar por la marea de sueños que inundo mi mente, olvidándome de todo.