Capítulo 1: Confío en ti.

111 6 0
                                    

Sophia:

El despertador sonó a las 5:00am, sentía que no había dormido nada, sentía que me había pasado un camión por encima, obviamente no me quería levantar.

- ¡Levántate morza, hoy es nuestro primer día! - dijo mi hermanita desde afuera mientras me lanzaba una almohada en la cara.

- ¡Ugh mamá! dile a Caitlyn que pare ya - dije gritando mientras Caitlyn cantaba una de sus raras canciones en mi cuarto impidiendome seguir durmiendo.

- Ustedes dos, ¿No hay un día en el que no peleen? - dijo mi madre gritandoo

Me levanté de la cama, ya Caitlyn se había ido al fin,  así que me dirigí a mi closet en busca de una blusa y unos jeans, hoy era mi primer día y definitivamente debía estar perfecta - o eso pensé- Coloque la ropa en la cama y me fuí a duchar.

Mientras me duchaba millones de pensamientos cruzaron mi mente.

¿Habrán chicos nuevos? ¿Serán lindos? ¿Alguien habrá cambiado este verano?

Empezaba a maquinar y revolotear sobre este año; incluso, a veces recordaba como éramos en el primer año - de verdad que éramos un desastre - pensé - De pronto apareció él, apareció en mi mente tan rápido que me sorprendió. Mattew O'Connor, el chico más bello del instituto, era alto, aproximadamente 1.80m, es de cabello negro como el plomo, y unos ojos azules como el cielo, su cuerpo era totalmente musculoso, era sencillamente perfecto -pensé- Era tan hermoso que yo jamás estaría con el, ¿Con tantas chicas hermosas en el instituto y se va a fijar en mi?, ¡Sí, claro!

- Sophia se te hace tarde, gritó mi madre desde afuera sacandomende mis pensamientos.

Salí de la ducha y fuí directo a mi cuarto, me humecte la piel con crema y me coloque mis jeans negros ajustados junto con una blusa manga corta verde manzana con crema, y por último mi vans verdes fluorescentes; me maquille un poco, tan solo polvo, un poco de rimel y lápiz labial, me coloque perfume y me sacudí un poco el cabello para que quedara con ondas, de último me puse una cinta blanca en el cabello, me miré en el espejo y quede satisfecha con el resultado, e inmediatamente baje a desayunar.

-Buenos días mamá, bendición - dije besando su mejilla - Hola mocosa -le dije a mi hermana despeinandola un poco.

-Hey, no me despeines, pase toda la mañana consiguiendo este resultado -dijo haciendo un puchero y colocandose los brazos en pecho; mi madre y yo reimos- ahora tendré que volver a hacerlo -dijo aún con su puchero mientras caminaba directo a su habitación.

-¿Cómo dormiste? - preguntó mi madre colocando el plato que contenía mi desayuno en la mesa.

-Gracias-dije refiriendome al desayuno- bien, aunque sinceramente no tenía ganas de levantarme. -dije haciendo un puchero.

-Claro, si todos los días te levantas a la 1:00pm; no entiendo como haces para dormir tanto.

-Es el ser adolescente mamá -dije riéndome al igual que ella.

Desayune en silencio, hasta que mi madre lo rompió.

-¿Lista para tu último año? Ya quiero verte en toga y birrete, ¡Oh! y cuando te entreguen tu diploma. -dijo casi en llanto.

-Sí mamá, ya casi. -dije sonrojandome un poco.

-Bueno, vamos a llevarte, no quiero que llegues tarde porque "a su madre le entró una crisis sentinental" -ambas reímos.- revisa si tienes todo listo mientras yo lavo tu plato.

-Vale-dije levantándome de la mesa.

Al subir veo a Caitlyn sentada en su cama, entro a su habitación y me siento a su lado.

-¡Hey pequeña! ¿Lista para tu primer día? -digo sonriendole.

-Sí, estoy emocionada, pero también algo nerviosa-dijo con media sonrisa.

-¿Y por qué estás nerviosa? -pregunté con curiosidad.

-Porque puede que mis amigos no se acuerden de mi, ni me quieran -dijo con la cara triste.

-¿Cómo dices? Dime, quien se olvidaría de una pequeña mocosa la cual es hermosa, alegre, divertida, loca -dije haciendo una mueca, ella rió- y además una niña muy cariñosa, ¿A ti te parece lógico eso?, porque a mi no -dije sonriendole, ella sonrió y me miró- ven te daré algo especial -le guiñé un ojo.

Caitlyn caminó agarrada de mi mano hasta mi habitación.

Cuando llegamos, le solté la mano y fuí a mi tocador, regresé y me arrodillé hasta quedar a su altura, la miré a los ojos, le agarré la mano, le coloque un dije y le cerré la mano; cuando ella la abrió, se le abrieron los ojos como platos, y con un pequeño hilo de voz dijo:

-Es el collar que papá le dió a mamá el dia de su boda.

-Sí, creo que en estos momentos te quedaría genial, ¿no crees? -se lanzó sobre mí y me abrazó.

-Gracias, gracias, gracias, lo cuidaré te lo prometo -dijo casi en llanto.

-Confío en ti mocosa -dije abrazandola más fuerte.

                   ♢-♢-♢-♢-♢-♢-♢-♢-♢

Nota:

Foto: Caitlyn.

Del negro al blanco.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora