capitulo 5

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A la mañana del sábado, Alexander se despertó a las siete en punto, lo cual era costumbre en él, por lo cual solamente se sentó en su cama tallándose un poco los ojos sin abrir estos aun, cuando los abrió y que su vista se pudiera acostumbrar a la luz, miro toda su habitación.

-"como es que logro encontrar las cosas en este desorden"-se preguntó a si mismo, mientras se paraba y cogió lo primero que encontró de su ropa la cual estaba como una montaña en el piso, las camisas en una pila, los pantalones en otra y ropa interior también.

-al menos, es un desorden arreglado-susurro divertido mientras se dirigía al baño y se adentraba a la bañera, la cual tenía ya agua tibia, cuando se adentró completamente, soltó un suspiro mientras pensaba en todo lo que había pasado los últimos dos anteriores días.

"1: vi a un ángel; 2 volví a ser algo así como amigo de luna; 3 amenazaron con llevarse a luna un tal J, demasiadas cosas que analizar en apenas dos días-pensó mientras soltaba otro suspiro.

Al terminar de cambiarse, bajo donde ya se encontraba su hermana menor, comiendo un tazo de cereal aun con su piyama puesto, Alexander tomo un tazón sirviéndose leche y cereal, y se sentó para comer junto con su hermana.

-Cora, hoy vienen unos compañeros para un trabajo así que no quiero que molestes-dijo

-compañeros?, ok no molestare-dijo con inocencia fingida la menor de los hermanos-pero...

-por qué contigo siempre debo esperarme un pero?-interrumpió a lo cual Cora se encogió de hombros con una sonrisa de superioridad que cabreaba a su hermano de lo cual ella estaba consiente.

-no me interrumpas o mostrare tu álbum te cuando eras pequeño a tus "compañeros"-dijo haciendo comillas en compañeros a lo cual Alex rodo los ojos –y lo que iba a decir era quienes son los chicos a los cuales no deberé de molestar.

-no te diré-dijo mientras se paraba y dejaba el tazón en el friegaplatos, y de dirigía a su cuarto-voy a mi cuarto.

-suerte con el desorden-grito desde el comedor.

-bien manos a la obra-dijo Alexander mirando el desorden que él debía o le gustaba pensar que era su habitación o desorden arreglado como lo llamaba su hermana de pequeña.

Seis horas después, Alexander estaba muy sudado y cansado, pero logro terminar de arreglar, la ropa estaba donde debía, la cama estaba arreglada, sus libros en los estantes etc...

-guau, no pensé que lo lograrías hermanito-dijo Cora entrando al cuarto de su hermano-de verdad quieres causar una buena impresión,...una chica hermanito?-pregunto

-no te interesa-dijo mientras se tiraba en su cama.

-mmm, recuerdo que con la única persona que te obligaba o querías hacerlo era con...luna-dijo a lo cual Alexander no pudo evitar sonrojarse recordando el día anterior en el cual casi besa a luna-así que si viene luna, será bueno que hable, tal vez ella si me diga por que dejaste de ser su amigo- dijo mientras salía del cuarto

Al sonar las dos en punto, el sonido del timbre se escuchó, rápidamente Alexander bajo, para que su hermana no se pudiera adelantar, y abrió. Hay se encontró con todos los chicos.

-hola, pasen-dijo Alexander, mientras veía luna embobado por su atuendo que consistía en una falda hasta las rodillas de color celeste y una camisa blanca y el cabello suelto.

-hola Alex- dijo Charlotte mientras entraba de primera- es linda tu casa

-gracias-respondió- vengan los llevare a mi habitación.

MI ANGEL DORADODonde viven las historias. Descúbrelo ahora