CAPITULO 2: ¿Enamoradas?

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P.V.P Samantha.

Sonó el despertador no tenía muchas ganas de levantarme ya que comenzaba el instituto, pero recordé que al llegar vería a Nath. Me levanté, le tiré una almohada a Alie para que se levantara ya que ella todavía seguía dormida, y salí corriendo a ducharme. Ví que Alie todavía no hacía ni el menor esfuerzo por levantarse. 

—¡Alison Payne! ¡Levántate que se nos hace tarde!

—¡SI! Ya voy —se levantó, sentándose en la cama a esperar a que yo saliera del baño.

Cogí mi ropa y entré a ducharme. Terminé de vestirme y salí del baño. Alie estaba escogiendo la ropa que se iba a poner; cogió unos shorts tiro alto, una camisa un poco más abajo del ombligo que dice Love  en el medio y unas botas de militar.

Me di cuenta que era algo parecido a lo que yo llevaba puesto pero no le di importancia, bajamos desayunar y la mama de Alie tenía preparado un rico desayuno .

—Hola, mamá. Buenos días —dijo Alie dedicándole una sonrisa.

—Hola, hija. Buenos días —le respondió.

—¿Cómo estás, Jenny? —pregunté dándole un beso en la mejilla.

—Hola, cariño, ¿cómo habéis dormido las dos? —me preguntó. 

—Bien, ¡súper bien! —dije poniendo los ojos como platos a Alie. Ella solo se echó a reír, mientras yo veía como Jennifer movía la cabeza de un lado a otro sonriendo.

Terminamos de desayunar y nos dirigimos hacia su coche, partiendo hacia el instituto. Durante el camino fuimos escuchando música a todo volumen y despeinándonos el cabello. Esos eran los momentos en que disfrutábamos estar juntas. Estaba muy emocionada por ver a Nath, y ver a Alie sonreír con su príncipe.

Llegamos al instituto y vi como las miradas se dirigieron a nosotras, o al coche de Alie, mejor dicho. Enseguida vi como Alan y Nathan se acercaban a saludarnos. Bajamos del auto, y, de un momento a otro, Nath me cogió de la cintura.

—Hola preciosa —dijo dándome un suave y delicado beso en los labios.

Yo se lo correspondí. Todos se dedicaron a ver esos actos de amor, muy asombrados.

Vi como Alan rodeaba la cintura de Alie con sus brazos y ella su cuello, haciéndose naricitas. Me quede viendo aquel espectáculo junto con la mitad del instituto. Volteé y vi una mirada llena de celos y odio, provenientes de Lilian. Me acerqué a ella con cautela, ya que todas las miradas estaban, o bien en mí, o bien en Alie. 

—¡Eh, tía! ¿Por qué los miráis de esa forma? —le pregunté intrigada, pero a la vez con algo de rabia.

—¡No te incumbe! —me respondió alterada, y se marchó. 

Yo quedé en mi lugar, pensativa.  ¡Vergación! ¿Qué le sucede? ¡Se lo tengo que contar a Alie!

P.V.P Alison 

Entre las cosas lindas que me decía Alan, sentí cómo de repente bajé de las nubes y me di cuenta que tenía algo ensangrentado el pómulo izquierdo, y una raja arriba de la ceja derecha.

—¡NENE! ¿Qué te ha pasado? —pregunté muy asustada.

—Nada princesa, solo tuve que resolver uno que otro problema con el imbécil de Alejo.

—¿Alejo? Me vais diciendo lo que ha pasado —dije cruzando los brazos y frunciendo el ceño.

—Nada de importancia princesa.

—¡Si tiene importancia! ¡Se han vuelto locos! Te ha golpea…—No terminé de decir la frase cuando me calló con un beso, hasta que llegó Samantha, a quien realmente quería golpear por arruinar nuestro momento.

¿Por qué a mi?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora