Lauren Dixon ha escapado del Santuario junto con su fiel hermano el arquero. Ahora que estan fuera de ese infierno, podran reunirse con sus seres queridos. Aunque eso es algo que alegra a la hermana del arquero, Lauren tiene otros planes. La sed de...
No podia creerlo. Mis ojos solo se concentraban sobre el, a lo lejos, mirando a sus alrededores. ¿Sabrá que estoy aqui? No lo creo, yo me fui sin que el lo sepa. Tal vez Morgan le contó sobre mi plan... Sabia que no me convenia, no debo confiar en nadie. Comienzo a desesperarme : Daryl no puede intervenir en mis planes, no debe hacerlo, puede estar en peligro por mi culpa. El no lo entendería, ni siquiera le dije el por qué de toda esta venganza. Ni quiero que lo sepa el, ni nadie. Jesus deja de mirar por la ventana y siento sus ojos mirandome. - Esta aquí - susurro, aun mirando anonadada por la ventana. - Si - dice Jesus -. Se nota que es bueno buscando.
Tiene toda la razón. Auque Morgan no le dijera donde estoy, Daryl es bueno en las busquedas, y no deberia de estar sorprendida por su presencia. De seguro Maggie le cuente que estoy aqui, y el vendrá a buscarme para volver al maldito Reino. No... Todo esto arruinaria mis planes. Debo evitarlo de alguna forma. No tengo que volver con el, ni siquiera debe encontrarme. Suspiro al seguir mirando por la ventana. - Debo irme ya - susurro. Me doy vuelta para mirar a Jesus -. Se que sabes todo del Santuario amigo, entonces necesito que me ayudes con eso. Vuelvo a mirar por la ventana para ver si Daryl sigue ahi. Estaciona su moto a un costado, aunque no la suelta ni un segundo, mientras sigue hablando con Maggie.
- No - dejo de mirar por la ventana y me encuentro con los ojos de Jesus. El me observa, seriamente. - ¿Que? - Que no te iras - dice, severamente -. Es tu hermano Lauren, no puedes dejarlo asi. - EL no debeinterferir - exclamo, con los ojos bien abiertos -. Crei que eras mi amigo, Paul... - Y lo soy, y por eso trato te hacerte recapacitar - exclama, moviendo las manos. Sus ojos claros captan mi atención -. Es la unica familia que te queda, y debes confiar en el - las palabras de Jesus hacen que lance lagrimas -, en Rick y los demas... - Confío en ellos - digo, y niego con la cabeza -, pero debo hacerlo. Hice un juramento.
Los minutos de silencio se hacen presentes en la habitación. Se que Jesús quiere protegerme, es un gran amigo, en quien mas confio. Pero eso no cambia mis desiciones.
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Agarro mi carjac con flecasy sostengo mi arco con mi otra mano, y me dirijo hacia la puerta, pero Jesús se interpone y agarra el picaporte con su mano. Cierro mi puño con fuerza y lo miro tan concentrada que hasta todo mi cuerpo tiembla del nervisismo que me causa. - Apartate. Ahora. - No. - Paul... - digo -. Hablo en serio. - Yo tambien hablo en serio - repite, aun con la mano en el picaporte. Seguramente estoy hirviendo como una tetera -. Lo siento, Lauren - Yo tambien lo siento, Paul. Rápidamente le lanzo un puñetazo a su cara, y da justo en su mandíbula, pero el es rapido y me agarra el brazo para hacerme una llave; grito, y trato de patearlo y tiro mi pie contra su estómago, siento como sus manos sueltan mi brazo. Me doy vuelta y me pongo en guardia y el alza las manos. - No voy a dejar que te suicides, Lau, aunque tenga que detenerte de esta forma - veo como cierra los puños, y estoy por darle un gancho cuando escucho un ruido familiar : motores de camionetas. Por ese ruido, deben ser recien reparadas. Me miro con Jesús y rapidamente nos acercamos a la ventana; unos pares de camionetas entran velozmente por la entrada de Hilltop. Oh no, son ellos. - Los... -... Salvadores - continua mi amigo. Nos miramos y luego por la ventana. Desde aqui veo como Simon - perra de Negan - baja de la camioneta principal, mirando todo el lugar. Siempre odié a ese tipo, un idiota que se cree mas que los demas por ser parte de esos malnacidos. Al pensar mas en ellos, lo recuerdo : estan buscandonos, a mi y a Daryl, por orden de Negan. Trato de divisar a Dwight entre los Salvadores que bajan, pero no está ahi. Comienzo a ponerme nerviosa, ¿que habra pasado con el, con el hombre que confesó su amor por mi? Se que Negan le hizo algo, no dejará las cosas asi como así. Espero que no le haya pasado algo peor... por mi culpa. De un momento a otro, ya no veo a Daryl en el patio. - Daryl... - Estará bien - me susurra Jesús -. No lo encontrarán, ni a ti tampoco. - Agachate - le susurro, e inmediatamente nos acuclillamos antes de que un Salvador nos viera. Ellos son los unicos capaces de ponerme nerviosa, los que me causan escalofrios con tan solo verlos. Todo lo que tenga que ver con ellos me hacen acordar a el. A Dwight. A todo el maldito tiempo que estuvo bajo la merced de ese imbecil que llaman "lider", todas esas torturas que tuvo que sufrir para que no lo molesten mas... Todo lo que hizo por mi. Lo que pasamos en el Santuario es una historia horrible y hermosa a la vez, una historia que nadie sabe. Lo extraño. En verdad lo extraño mucho. Ni siquiera se si está con vida... Ojala lo esté. Espero, de en serio, que esté bien... La voz de Paul interrumpe mi pensamiento. - Vienen para acá - susurra, ahora apoyando una mano en mi espalda. Aun seguimos agachados, espiando por la ventana, pero yo me vuelvo para mirar fijo a mi amigo. - Quiero que me expliques como llegar. Jesus se vuelve para mirarme, con un rostro molesto. - Lauren... - Paul - digo -. Si no me explicas ahora, nos atraparán a los dos.
El me mira con duda, y suspira para negar con la cabeza. Se levanta para rapidamente ir a un cajón para comenzar a revolver papeles en ese lugar, hasta que agarra un papel doblado. Se da vuelta para dirigirse hacia mi y me entrega el papel, inmediatamente lo abro y veo un gran dibujo, como si fuera un grafico. - Es un mapa que hice del Santuario - cuando dice aquello, apostaría a que mis ojos se vuelven brillosos cuando se quedan mirando aquel extraño mapa. Es justo lo que necesito, era un tesoro en mis manos, uno de los caminos que usaria para acabar con ese malnacido. Levant la mirada del mapa y la dirijo hacia los ojos de Jesus, quien no parece muy satisfecho con lo que hizo. Aprieto su hombro con mi mano. Sonrío. - Gracias. Oigo unas pisadas acercarse a la entrada de la casa, y nos miramos con Jesus. El me agarra del brazo, y me apresuro a agarrar mi carjac con flechas, mi arco, y otra mochila con provisiones. Me lleva hasta una puerta trasera y la abre, pero antes de que me vaya me da un corto abrazo, y yo se lo correspondo. - Te odio - lo oigo decir. Lanzo una risita. - Yo mas, Paul Rovia.
Y sin mas, salgo de la casa. Me escondo detras de cualquier cosa para que ningun Salvador me vea. El lugar está minado de ellos. Justo, a lo lejos, diviso a Rosita y Sasha tratando de esconderse sigilosamente de los Salvadores. Bingo. A la vez que avanzo y me escondo de los lacayos de Negan, logro llegar con las dos mujeres con las que organicé el plan de venganza. Ellas me reciben con una sonrisa probatoria y nos las arreglamos para salir de alli, ni siquiera sabia que habia una salida secreta.
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Ya estaba fuera.
Frente a mi veo el gran bosque extendiéndose. Sonrío con satisfacción y miro a mis dos compañeras, con las que comienzo a caminar adentrandonos en el bosque con las armas y todo lo necesario para el plan. Cada vez que pienso mas en Negan, mas aumenta mi deseo de venganza. Quiero acabar con todo este sufrimiento que el causó a todos, ese sufrimiento que pasan esas familias, esos niños, esas personas en el Santuario.... pero.... aunque me diga todo eso en la cabeza, no es solo por eso que quiero matar a Negan. Morgan tiene razón. Es por mi. Solo por mi.
Pero Negan es Negan. El lider de los Salvadores, y yo sere su asesina.
