Capitulo 3: Un Vínculo Inesperado

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En una Cueva Muy Acogedora yacía dormido un dragón de color plateado. Ha pasado un mes desde que fue encontrado por Kaname.

"¿Cómo está?" preguntó Kaname a uno de sus leales seguidores y amigo. "Él está mucho mejor, Kaname-Sama", respondió Aido. "Todo lo que necesitamos es que despierte. Ha pasado un mes desde que lo encontrasto Yuuki-Sama", dijo mientras revisaba las heridas de Zero para ver si habían sanado, ya que seguía limpiándolas desde el día que el dragón llegó.

"Sí, ha sido un mes", respondió Kaname, pensando en el día en que trajo a su dragón plateado a su guarida.

FLASHBACK

Kaname caminaba hacia su guarida con el dragón plateado en su espalda. Una vez que entró, se encontró rodeado de sus amigos y su hermana, quienes le hicieron muchas preguntas sobre el dragón en su espalda. Ignorándolos, caminó directamente hacia su nido, colocando cuidadosamente al dragón plateado en él. Recibió miradas de sus amigos y una risita de su querida hermana. Sí, Kaname no permitía que ningún otro dragón estuviera en su nido, ni siquiera su hermana tenía permitido acostarse en él.

Aclarando su garganta para llamar la atención de los demás, una vez que logró que sus amigos pusieran su atención en él, comenzó a dar órdenes. "Aido, necesito que lo revises hasta que esté mejor", dijo Kaname. "Sí, Kaname-Sama", respondió Aido, dejando la cueva para buscar hierbas que usar en el dragón. "Kain, Takuma, Ruka, Senri y Rima, necesito que vayan al lado izquierdo de la montaña. No muy lejos de la cueva principal, allí encontrarán un capullo hecho de Rose Vines. Intenten sacarlo y tráiganlo, buena suerte". Todos los mencionados lo miraron con una expresión en sus caras diciendo "¿por qué buena suerte?", pero solo respondieron con un "Sí, Kaname-Sama" y salieron de la cueva rumbo al lugar mencionado por su líder.

Yuuki, por otro lado, estaba sentada cerca del nido de su hermano donde estaba el dragón plateado. "¿Kaname-Oniisama va a estar bien?", preguntó Yuuki con voz triste. "Sí, él estará bien, Yuuki. Me aseguraré de eso yo mismo", respondió Kaname. "Yuuki, ¿podrías cuidarlo mientras salgo por un momento?" preguntó Kaname a su hermana. "Sí, Oniisama. Pero, ¿por qué?", preguntó Yuuki. "Solo quédate con él". Yuki solo se quedó algo confundida, respondiendo con un "sí, hermano".

Kaname salió de su guarida en busca de cuevas que no estuvieran demasiado lejos de la suya. Se encontró con tres cuevas no muy lejos de la suya. Una vez que se adentró en la última, que era una de las más grandes, comenzó a revisar el interior para asegurarse de que fuera segura para su futura pareja.

Una vez que escogió la cueva, necesitó hacer algunos arreglos y traer todo lo necesario para calentarla y construir un nido para su futuro compañero.

Mientras tanto, Yuuki estaba sentada al lado del nido de su hermano, chequeando la apariencia del dragón plateado que se encontraba en él. Yuuki se dio cuenta de que el dragón tenía algo que la hacía sentir segura y protegida solo por estar cerca de él. Se sentía muy cálida al lado del dragón. No se había sentido así desde que su madre murió. Yuuki no se había dado cuenta de que había entrado al nido para recostarse cerca del dragón y sentir esa calidez que no sentía desde hace años. A pesar de que era un dragón extraño que le proporcionaba esa calidez y protección, se olvidó de que no tenía permitido estar en el nido de su hermano.

Un gruñido se escuchó cerca de la entrada de la guarida de Kaname. Yuuki levantó la cabeza rápidamente cuando oyó una voz muy familiar. Yuuki miró hacia la dirección de la entrada de la cueva. Allí, en la entrada, estaba su hermano. Yuuki miró a su hermano con los ojos muy abiertos. Jamás en su vida había visto alguna emoción en él, pero ahora veía enojo, rabia y algo más que la dejó sorprendida: celos. ¿Qué podía ser la causa de los celos de su hermano? Se levantó y dejó el nido para sentarse frente a su hermano, con la cabeza hacia abajo. "¡YUUKI!" Ella se estremeció ante el tono de enojo de su hermano, pero ¿por qué? "¡Te dije que cuidaras de él! No que durmieras cerca de él", dijo Kaname caminando hacia su nido.

Estaba asombrado por lo que veía delante de él, pero lo que más le sorprendió fue que las heridas de Zero ya habían sanado. Era muy raro que un dragón dominante (Alfa) tuviera habilidades curativas; solo los Omegas tenían ese tipo de poder. Kaname movió su cabeza para ponerla en el cuello de su dragón y olfatear ese lugar, ya que tenía un olor muy familiar para él. Llegando a la conclusión de que cierta dragona se había imprimado de su dragón. "Mi querida Yuuki, ¿lo vistes como una madre o algo más? ¿Es por eso que te imprimiste de él?"

"Oh, así que por eso me siento así hacia él", pensó Yuuki, aunque respondió: "Sí, Kaname-Oniisama. Solo lo miro como una madre o otro hermano. Aunque tengo un aura dominante, hay algo más en él, Kaname. Puedo sentir como si estuviera cerca de un Omega". Kaname solo asintió. Toda su ira se fue cuando escuchó la respuesta de su hermana. En ese momento, Takuma, Senri, Rima, Ruka y Kain entraron a la cueva, con Aido detrás de ellos, que llevaba muchas hierbas medicinales que pudo encontrar en la isla. Kaname miró cómo Aido se acercaba a su nido para revisar las heridas de su dragón. Una vez que Aido se acercó, este solo se sorprendió al ver que algunas heridas del dragón ya habían sanado. "Wow", fue todo lo que pudo decir. ¿Cómo puede un dominante tener poderes curativos?, pensó.

Por otra parte, para Kaname era difícil no reírse de sus amigos. Estos tenían heridas en todo el cuerpo y estaban cubiertos de lodo. Parecía como si hubieran tenido una guerra de lodo. "Supongo que no tuvieron suerte en extraer el capullo de la tierra", dijo Kaname con una sonrisa en su rostro. "Sí, Kaname-Sama, lo sentimos", respondieron todos al mismo tiempo. "Está bien, chicos. Hicieron lo mejor que pudieron, por lo que veo", Kaname estaba en awe frente a Ruka y Rima, que ya tenían sus heridas curadas. Mientras tanto, los dominantes le estaban robando algunas hierbas a Aido, ya que este último seguía contemplando al dragón que ya estaba dormido en el nido de su líder.

FIN DEL FLASHBACK

"Kaname-Sama, ya limpié todas sus heridas y las parcheé con algunas hierbas nuevas", dijo Aido. Kaname estaba mirando al dragón plateado sumido en sus pensamientos con algo que no entendía muy bien sobre el dragón. Así que tenía que confirmar algo que lo estaba confundiendo, así que preguntó: "¿Aido es un dominante o un sumiso? Yuuki se imprimó de él". Aido se sorprendió, ya que no se había enterado de que Yuuki se había imprimado del dragón.

Claro, Aido es uno de los mejores dragones que conoce sobre la dinámica de los dragones, pero para confirmar si este dragón era dominante o sumiso iba a ser muy difícil, ya que proporcionaba ambas auras de un Omega y Alfa. "Kaname-Same, por el momento no podré confirmarle si es un dominante o sumiso, pero cuando tenga una respuesta, se la haré saber", contestó Aido. Una vez que Aido se fue de su cueva, Kaname se acostó junto a su futura pareja. "Espero y seas lo que creo que eres. Deseo que siempre estés a mi lado". Una vez que dijo esas palabras, se quedó profundamente dormido.

Pero nuestro querido Kaname se sorprenderá cuando se entere de la dinámica de nuestro amado Zero.


Pero Nuestro Querido Kaname se Sorprendera cuando se entere de la Dinamica de nuestro Amado Zero.


Nota de la Autora loca: 

que alguien me corriga es imprimir, impregnar, imprimado o como carajo se escribe que alguien me ayude porque la mera verdad yo nose.

Mi Reina *~{KaZe}~*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora