capitulo 12

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Desde que salí de casa solo ha pasado una semana  y. Parece que nadie a notado mi ausencia.

Encontre un bonito departamento en el centro de la ciudad, no es muy caro,tiene una muy buena vista ala playa y de noche se ve la claridad de la luna,esta totalmente amueblado,es sencillo pero me gusta.

la casera se ha comportado bien buena onda conmigo.
Incluso ha ido a el departamento llevando comida.

No es que sea muy mala en la cocina,al contrario si no quisiera ser enfermera hubiese sido excelente chef.
Pero con las tareas,el parcial cerca y los exámenes finales para el semestre no.me ha dado tiempo de cocinar así que pedía pizza.

La vecina de enfrente es un amor de persona es joven igual que yo e igual vive sola,es una santa la chava,lastima que estudia en otra preparatoria si no, fuéramos mejores amigas.

Suenan varios golpes en la puerta,nadie conoce mi hubicación , así que,con toda mi pereza me levanto de la silla donde estoy sentada,dejo los lapiceros y las hojas a un lado y camino a la puerta.

Doña Marta esta parada enfrente de mi con una sonrisa,de esas que te transmiten,paz y tranquilidad.
Lleva consigo unos topers con comida.
-pase doña marta
_te traje comida jenoveba,lo mas seguro es que todavía no has comido y no quiero que te malpases,te puedes enfermar._
Dice mientras pasa y me regala una sonrisa calida
-hay doña no quiero molestarle,de seguro esta muy ocupada y yo aquí haciéndole perder su tiempo- dije avergonzada.

Pero como no estarlo si el único que me recibía así era toño.
Al que por cierto le he avisado de donde me encuentro.
bueno solo el lo sabe.

_que va niña,al contrario,estoy solita en mi casa,mi viejo falleció hace un año y mi hijo es soldado,nunca esta en casa,pero es buen muchacho_oooh eso no me lo había dicho.

-bueno doña marta,pase siéntese ahorita le doy sus trastes-dije mientras en un pedazo de la mesa donde no había hojas me dispuse a comer,la comida era sopa de fideos y tortillas hechas a mano era la mejor comida que probé en meses.

_tenías hambre jenoveba,ya vez si no comes,que tal si te quedas a medio camino chamaca,no ni dios lo mande-dijo mientras tomaba el rosario que colgaba de su cuello.
-Gracias doña Marta,de verdad es la mejor persona que he conocido.-digo algo triste mientras le doy otro bocado a la sopa.
_disculpe la molestia niña,pero..hay algo que tengo aquí de curiosidad...nosé si me puedes aclarar o por lo menos decirme_ me dice algo tensa y preocupada
-¿que paso doña Marta? Paque soy buena-
Pregunto algo preocupada.
_¿usted no tiene familia? Digo no es por molestar,pero esque en los dias que llevas aqui,no he visto a nadie de tu familia_dijo algo avergonzada.

-vera doña marta,usted me agrada,pero mi familia ahorita,esta rota,por eso hui de casa si se podria decir,mi madre esta en agonia,a mi padre no le hablo desde hace años,porque es un hijueputa,mis tios la traen contra mi,mis hermanos no tengo buena relación que digamos.
los unicos que me querian uno esta muerto y otro pronto volvere a verlo,sufria mucho ,mi madre,me pide que perdone a mi padre,pero como perdonar a alguien ue nunca presto importancia a su hija,me humilló y me hizo menos,solo estaba conmigo si hacía algo que lo enaltecia.-

No se enque momento empeze a llorar,solo sentia como las lagrimas recorrian mi mejilla.

_hay niña jeno,si hubiese sabido que la iba a poner haci ni hubiese preguntado- me dice mientras ella me abraza,es lo que necesito en este momento.
su calor y su consuelo me ayuda,pero me derrumbo frente a ella.

-no le diga a nadie doña Marta,no me gusta andar divulgando lo que me pasa.-digo mientras me levanto a lavar los trastes para devolverselos.

Asi hippeando los lavo y con mi blusa me limpio los mocos.

Lo Que Nunca SabrásDonde viven las historias. Descúbrelo ahora