Homophobia is Gay «Jameson» (1º y 2º temporada)

1.3. Comentarios Homofobicos

Tocaron la puerta a la mañana siguiente. James, enfurecido por que el ruido de la puerta había sido su despertador por segunda vez en dos mañanas seguidas... Se sentó en su cama y buscó por alguna parte del suelo un suéter para la helada mañana. Avanzó por el largo pasillo y vio a sus dos amigos sentados en el sillón, Jason con un café en la mano derecha, mientras que la el brazo izquierdo lo tenía apoyado en el sillón afirmando así su cabeza, se había quedado dormido. Kirk estaba recostado un poco en el sillón con un libro tapándole la cara y los brazos estirados.

Abrió la puerta y vio a su amada hija abalanzarse contra él y abrazarlo fuertemente. Mientras que la madre de Raven, ex esposa de James, estaba de brazos cruzados y con una mochila a sus espaldas. Se la quitó y torpemente se la entregó a Hetfield.

—Espero que te hallas acordado que Raven venía a visitarte todo el fin de semana. —lo cierto era que no se había acordado, su mente andaba volando o en su imaginación o intentando distraerse con cualquier cosa para ahogar la tristeza. —No quiero que se duerma tan tarde ni le des tantas golosinas. James, tú la consientes mucho.

El rubio, harto de escuchar las mismas quejas de su ex esposa, se despidió con su característico tono sarcástico y cerró la puerta. Miró a los chicos, que ya estaban despiertos pero algo aturdidos hablando con muy animadamente con Raven. Ella ya había crecido, con sus 12 años de edad y aún se lo pasaba con los audífonos puestos. En algunos aspectos seguía siendo muy infantil. Traía consigo un peluche del cual jamás se despegaba. Su pequeña mochila en los hombros llenas de casetes y libretas, junto a lápices y un libro de Edgar Alan Poe.

—¿Qué escuchas? —preguntó Jason, mientras la niña se quitaba la mochila dejándola en el suelo, se sentó en el sillón para una persona y puso su mano entre las rodillas, con voz tímida respondió a la pregunta.

—Dimmu Borgir —Bajó su cabeza con vergüenza. Era demasiado tímida. Aún con ellos que ya eran prácticamente -para Raven- como sus tíos.

—Así que ahí estaba mi casete...— dijo James con un tono en su voz de sorpresa, se encontraba en el umbral de la puerta, de brazos cruzados mirando a su hija con una sonrisa, mientras tanto Jason no despegaba la mirada de Hetfield. Kirk miraba a su amigo con una sonrisa.

Los chicos estaban sorprendidos, no podían creer que Raven escuchara toda esa música, a ellos les gustaba el metal, si... ¿pero a una niña...?

—Oye, Jason —llamó su atención James. Este, lo miró atento. —¿Quieres acompañarme a comprar? —El rubio esperaba atento su respuesta. Jason asintió ansioso.

Caminaban juntos en total silencio. El menor pensaba en lo que su amigo le había dicho hace años atrás "Se nota que te atrae mucho el profesor..."

¿Sería esa la razón por la cual no dejo que pensar en él, el por qué me encanta mirarlo? Pensó.

De reojo le echó un vistazo rápido. Se grabó su perfil en su mente como una fotografía y lo admiró como una obra de arte desaparecida y extremadamente hermosa, una obra de arte la cual a Jason le encantaba.

Hetfield lanzó una risa sarcástica. Y dijo con asco:

—Mira a esos maricones, besándose en medio de la calle, esa escoria no debería existir. —Jason levantó la mirada, y, efectivamente. Dos chicos estaban sentados en una banca, se estaban besando. Pero de alguna manera del comentario de James le dolió.

—Uhmm...— fue lo único que se limitó a decir. El rubio lo miró extrañado. Le dio un palmetazo amistoso en la espalda y le dijo.

—Andas pensativo, eh. —Jase asintió. —¿Por alguna chica? —preguntó burlón.

—Ah, sí. Una chica que conocí el otro día, en una librería. —mintió el de rizos. James no volvió a tocar el tema, por la poca interés de su mejor amigo.

—Lleva un carro, por favor. —ya en el supermercado, Jason obedeció la petición de James. Arrastraba el carro de supermercado por los largos pasillos. Tomó un pack de cervezas.

—Este lo pago yo. —dijo Jason con una sonrisa, James se la devolvió, este se sintió extraño y despego la sonrisa de su rostro por varios minutos. Observo el cabello corto de James, iba unos pasos más adelante que él, obtenía una ventaja, ya que podía observarlo sin que el rubio se diera cuenta. Seguía con la sonrisa en su rostro.

Tiraba al carro galletas para Raven, frituras en bolsa, leche chocolatada, latas de bebidas, queso, jamón, jugos y una variedad de cosas "sanas" pero la mayoría eran chatarra.

En la caja, Jason sacó las cosas del carrito de súper, saludo a la cajera y comenzó a avanzar para poder meter todo en bolsas. James comenzó a coquetear con ella. Él miraba toda la acción con un poco de celos, pero no los suficientes para darse cuenta de que: estaba enamorándose de James.

—Uhmm... Pues gracias linda, —y le guiñó el ojo. Salieron de ahí en completo silencio. —Me dio su número. Dijo que la llame pronto. —rió.

—Te felicito hermano. —Le dio una palmada amistosa, pero por dentro se sentía mal.

"Debería buscarme a una chica, no quiero seguir con esto." Pensó.

* * *

Ya en casa, subiendo las escaleras del apartamento, ambos con las bolsas, salió Raven a recibirlos con una tímida sonrisa.

—Hola...— dijo ella en un tono bajito. James dejó las bolsas en el suelo. La abrazó cariñosamente y le dijo.

—Extrañaba esto, que me recibieras con tu sonrisa y tus abrazos, amor... —Jason sonrió ante tal escena tan linda.

Entraron y vieron a Kirk dormido en el sillón, Raven rió, y nos dijo que se quedó dormido con las película que ella estaba viendo.

—¿Enserio? —rió James, —¿Bueno, y de que trata tu película, amor?

—De dos chicos que se aman. — respondió con timidez.

—¿Un chico y una chica? —la niña negó. James se tensó. —Ve a mi habitación, ¿quieres? Busca en mi mesita de noche, en el cajón, unos dulces que tengo para ti. —Raven se paró del sillón, y caminó por el pasillo.

—Joder. —habló entre dientes. —¿cómo pueden pasar esas películas a estas horas? Y peor aún... ¿Cómo existen películas así? ¿¡A que mierda de persona se le ocurre hacer películas de maricones!?

Publicado originalmente: 31-12-2017