Capítulo cinco.

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Trampas.”

Zayn -punto de vista-

La carrera estaba a punto de comenzar, faltaba un minuto y yo ya estaría conduciendo a mi bebé por todos los callejones a toda velocidad. Esto realmente me gustaba. Claro que, no cuando la vida de mi hermanastro estaba en juego. Yo no podía jugarmela esta vez. Louis era la única familia que yo tengo.

Su madre y mi padre se casaron hace siete años. Louis y yo nos caímos bastante mal en esos tiempos, él era un debilucho al que golpeaban en la escuela. Hasta que yo me enteré. A decir verdad, todos me tenían miedo en la escuela. Y por mucho odio que le tuviese a ese imbécil, era de mi familia ahora y lo debía proteger.

Peleé con los imbéciles que lo atormentaban y, claramente, gané. Desde ese momento él y yo fuimos hermanos. Hasta que hace unos cuatro años, formamos una pandilla dónde Harry, Niall y Liam se nos unieron. Conocimos a Gallagher y bueno... lo demás ya es lo que viene ahora.

Una morena despampanante se introdujo en la pista, colocándose justamente en medio de los dos vehículos. Cómo había planeado, yo me encontraba en el lado más cercano al acantilado.

La chica dio la señal y mi motor rugió bajo el asfalto. Escuché el sonido sordo del motor de Gallagher. Suspiré y tomé el control.

Divisé el largo y amplio camino liso, aún no veía árboles y eso me aliviaba por el echo de que el imbécil no se haría daño. Seguí poniendo la máxima velocidad hasta que divisé la curva, él no podría girar ni frenar, por lo que se pegaría de canto contra el inmenso árbol de tronco grueso que yacía a unos metros de la curva.

Notaba que me pisaba los talones y entonces miré por el retrovisor, ahí estaba él, mirándome con autoficiencia desde su coche. Sonreí cínico y doblé rápidamente la curva que se acercaba. Miré de nuevo por el espejo y vi cómo doblaba detrás mío. Ahora él iba delante, pero por poco tiempo.

La velocidad era lo que se necesitaba en estos momentos, él la tenía. Pero descontrolada.

Sonreí y aceleré mucho más en el momento en el que nos acercábamos, si él iba delante de mí supondría un grave problema ya que si el coche -por alguna razón- explotaba, también saldría yo herido.

Lo pasé.

Miré al retrovisor una vez más antes de doblar en la curva. Reí al ver su semblante. Estaba pálido, muy pálido. El tronco cada vez estaba más cerca y sus frenos no respondían. Buen trabajo Niall.

Vi como intentaba por todos los medios que la palanca de cambios hiciera su trabajo o como su pie pisaba fuertemente el freno, pero todo lo que hacía era en vano, pues se estamparía de cualquier manera.

Barbara -punto de vista-

Perdí de vista el auto de Spencer en cuanto averigüé que el contricante de mi novio era ese sucio moreno que manchó mi jersey preciado.

Mi vista no se alejaba de su auto y de lo bueno que era ese chico en estos terrenos. Pero Spencer iba en cabeza, hasta que él nuevamente lo pasó.

La gente comenzó a gritar cuando el coche de mi novio iba directo a un árbol y no se movía. Estaba a punto de estrellarse y el moreno ya lo había sobrepasado y estaba demasiado cerca de la meta.

–– ¡Dobla, chaval! ––gritó Lucius observando cómo el coche de su hijo no respondía––¡Spencer, gira!

En ese momento, Spencer salió disparado del auto y éste último se estampó con el inmenso y gigante tronco. Un ruido seco hizo al chocar.

Dark Side «#1 Abduction» || malik. [pausada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora