Segunda Carta.

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1,2,3,4,5,6,7,8,9,10,11,12,13...Siguieron contando, cantando y aplaudiendo deseándole feliz cumpleaños, ella, pidió un deseo, nadie lo sabia...solo ella.

Aplausos, todos hipócritas,le duele, como si le clavaran miles de cuchillos en llamas...muere, más de lo que ya está...llora...todos piensan que es de felicidad y emoción...Nadie sabe la razón...solo ella.

Llora, sola, en su refugio de cuatro paredes, donde nadie sabe nada, donde todos la ignoran, donde solo está ella y su soledad.

Suicidio...mátate...no vales nada... eres un error...eres estúpida...ayuda...nadie te va a querer...estas sola...pero...a quien le importa? a quien le importas?...ella piensa...todos los días mueren miles de personas...hay 1 de cada 5 que son suicidios...cierto?...pero...suicidarse no es matarte a ti mismo...no...es volar desde el infierno hacia el paraíso, dice en susurros y con una sonrisa maquiavélica.

La monotonía la lastima...una y otra vez...ella...ella llora...se hace daño y sonría cada vez que ese elixir color carmesí recorre su cuerpo...le duele...no las heridas físicas...le duele su corazón...si es que aún lo tiene...aquella chica...la ignorada por todos...aquella chica...la chica de los rechazos

Cartas al vacío (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora