Window beyond window ♡ [kth & jjk]

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—Aquí, come.

—¡Se ve delicioso! —Taehyung charla, derramando burbujas en una linda actitud tanto dulce como esponjosa. —Lo que esperaba del Galbi de Jungkook. Deberías cocinarme esto para siempre. 

—Deja de condenar mi vida, solo come con calma.

Jungkook observa al chico en frente, devorando la comida hecha por él como si fuera lo más delicioso del planeta, con las mejillas repletas y un lindo puchero asomandose.

Se relajó, no parecía como si hubiera visto tal vergonzosa escena, Kim se estaba comportando como siempre, pegajoso y alegre, amigable como bromista, ni una pizca de incomodidad de la que Jungkook podría correr y esconderse.

Era tan bueno volver a respirar sin tener que pasar malos ratos ni tener que responder preguntas comprometedoras.

—¿Por qué estás sonriendo? —Pregunta el pelirrojo aún con comida en su boca, esta manchada por el jugo oscuro de la carne haciendo de Jungkook una adorable imagen que observar.

—Tu fealdad —Bromea en un tono serio.

—Imposible.

El menor se levanta de la mesa para dos, dirigiendose descalzo y relajado hacía la cocina.

—¿Las costillas todavía no están listas?

—Solo un segundo —Dice tomando la bandeja repletas de pequeños pedazos de carne, trayendola hacía la plataforma donde Taehyung intentaba hacer espacio para dejarlas en medio. —No hay casi nada que comer de esto, ¿Por qué te gustan tanto? Son difíciles de mascar.—El menor cuestiona, tomando asiento y dejando que su hyung disfrute de la comida.

—Me gusta la consistencia —Exclama este sonriendo. —No tiene gracia comer solo las partes blandas.

El pelirrojo toma una costilla entre sus dos largos dedos y la muestra a Jungkook, todo para luego mascarla logrando que toda la carne desaparezca, el hueso resultando ser lo único restante. —Necesitas sostener bien la carne y masticarla con cuidado. Así es como se comen. Después sientes una especie de satisfacción por haber sacado toda la carne del hueso.

—¿Qué mierda? ¿Eres una especie de pervertido o algo?

—¡¿Últimamente no me has estado hablando muy rudo?! —Kim pregunta, en una entonación entre molesto de verdad y divertido.

—Comeré el Galbi —Jungkook le ignora.

El silencio se apodera de la sala, Taehyung posando la mirada en el castaño mientras este come sin muestra de expresión alguna, haciendo muecas de vez en cuando cuando el hueso rechina dentro de su boca, un escenario hogareño y repleto de comodidad si no fuera por tal hecho.

—Jungkookie-ah —Dice para recibir la mirada del llamado.—¿Me estás escondiendo algo?

—¿Por qué preguntas eso de repente? —Responde desinteresado, sin dejar la tarea de alimentarse.—¿Qué habría que esconder de ti?

—No sé, cualquier cosa —Toma una pausa.—Quizá... ¿Alguien que te guste? 

Jungkook se encoge, su barbilla cayendo derrepente, mientras se mantiene comiendo sin detenerse, resguardandose en tener que responder a largas frases.

—¿A que viene esa pregunta? 

—¿Lo hay? ¿Hay alguien?  

—Y que si hay algui-

—Por supuesto que estaría curioso sobre la persona que te gusta, no has salido con nadie desde la escuela luego de Suyeon —El menor deja de comer, soltando las costillas y mirando con el entrecejo fruncido al chico cuestionandole, como si lo que hiciera fuera de mala educación. —¿Qué Jungkook?

—Ah, cállate ¿Qué tiene que ver lo de antes con tu pregunta?

—Vamos, puedes decírmelo —Taehyung forma un puchero.—¿Qué es lo que ocultas? No hay nada que esconder entre nosotros.

—Yo no quiero hablar de eso, para de preguntar.

Y más que nervioso, Jungkook se muestra molesto, molesto de que su mejor amigo dudara de él sobre esconderle alguna relación.

—¿No quieres hablar de eso conmigo?

—Exacto. —Pretende ser maduro, evadiendo cualquier dialogo respecto al tema.

—¿Por qué?

—Solo come tu comida.

Los segundos pasaron, Jungkook suspiró realmente sofocado sobre el tema y personal conversación, sintiendo como si Taehyung lo estuviera aprisionando o algo.

Dejó todo de lado, tomando los palillos dispuesto a comer en silencio.

—¿Es esa persona un hombre, es por eso que no quieres hablar de ello? —La voz de Taehyung sonando como si lo que dijera no fuera del nada controversial.

Maldición, maldición, maldición.

—¿A qué quieres llegar? —La voz del menor sonando oscura y dificil de escuchar.

—¿Es o no?

—¡Para de hablar cosas sin sentido y come! —Grita soltando los palillos, haciendo que el plato en donde cayeran resonara en el incomodo silencio.

—Uh...así que sobre lo de ayer. ¿Por qué entonces estabas masturbandote de esa forma?

Mierda...

Él lo vio, él lo vio todo.

—¿Quién es él, a quien nombrabas?

Y lo escuchó todo...