Capitulo 4

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***

Nunca en su vida se había sentido de tal forma, muerto del miedo, su mente estaba en blanco, su cuerpo no lograba moverse y sus oídos parecían no querer escuchar.

Un golpe en su cabeza me izo mirar al culpable a su lado. Su amigo Leo le hacía una expresión y señas para que que le prestara la atención correspondiente.

-estás tonto o que? - le retó su moreno amigo- oye piénsalo bien y no te asustes solo era una suposición- resoplo cansado del estado del rubio

-suposición? Leo mírame estoy hecho un desastre desde hace días - se tapó la cara con sus delgadas manos, su cuerpo completo temblaba

-bien bien- suspiró Leo- lo han hecho sin condon? - preguntó mientras tomaba las pequeñas manos y las intentaba quitar del rostro acongojado

-un par de veces...?- susurro avergonzado

-okeeeeeeey! Si, tú estás tonto- se golpeó con su podría mano en la cara, no podía creer la respuesta del rubio- Yuri, tu estás consciente de que eres Doncel? Ah?! Mírate tienes quince años y es la edad en la ya puedes embarazarte! Dios - se cruzó de brazos mirando a otro lado, estaba enojado.

- lo..lo se, pero en el momento no se, aah- volvió a taparse la cara y su cuerpo se encorvó en la silla de la enfermería, la enfermera a cargo nunca estuvo en dicho salón.

-Leo?..- llamo a su amigo mirándole quedito.

-ahh no! No me mires así- se levantó el moreno y camino para alejarse aun que las manos del rubio aferrándose a su camisa no le dejaron ir muy lejos- algo quieres y presiento que no es nada bueno- le miro aterrado

-Leo sabes que yo no puedo ir a comprar un test de embarazo...mi padre viene por mi todos los días-

-que??! Y quieres que lo compre yo? - grito avergonzado- no señor, no!-

-Leo.. por favor - los pucheros y lágrimas del rubio eran su debilidad.

- a la mierda.. te odio Yuri Nikiforov -

- y yo te amo Leo de la Iglesia!!!- abrazo al muchacho agradecido-

Como siempre luego de clases caminaron juntos a la salida, como siempre su padre estaba parado y apoyado sobre el vehículo negro que atraía la mirada de todos los estudiantes, alto y elegante,Victor Nikiforov.

-valla, tu padre si sabe llamar la atención- susurro el moreno

- lo odio tanto, se ah empeñado en hacer mi vida un infierno..- resoplo indignado

- todo por que no te deja hacer lo que quieres, y lo que quieres es a Otabek- le pico con el codo al rubio

- cállate, mi padre tiene odios en todas partes- susurro

Una vez en la calle Leo saludo al hombre peliplata y se despidió de su compañero, Yuri no salido a su padre y solo subió al vehículo en la parte de atrás.

Victor le miro cansado, suspiro agotado y se fue a la puerta del conductor, d envés en cuanto miraba a su hijo que iba sumergido en su celular con los audífonos blancos metidos en sus oídos.

Yuri miro por la ventana y vio un carrito con Hotdog, su estómago gruñó y sintió unas enormes ganas de comer uno con mucha mayonesa. Dios eso era asqueroso e iba contra su régimen. Pero lo quería. Se sacó los audífonos y miro a su padre. Se mordió el labio, habían parado en un semáforo en rojo.

Tengo miedo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora