Tengo miedo

Capitulo 10

Ya era de noche cuando Otabek y Yuri volvieron a la casa de los abuelos del rubio, habían recorrido y sacado muchas fotos de los lindos lugares que visitaron y sin duda fue un día espectacular, ambos se sentían libres de no tener que esconderse de nadie.

Yuuri apenas vio a su hijo entrar se acercó a hablarle

- vengan a comer..tu abuela preparo una cena estupenda para todos hay Katsudon tu favorito - dijo sonriente

- papá esa es tu comida favorita - respondió divertido el rubio

- ya ya, si lo es- rio - ven Otabek amaras este plato - tomo al moreno del brazo y lo guió hasta estar ya en la mesa

Otabek algo cohibido tomó asiento y se relajó al sentir la mano pequeña de su rubio chico acariciando su pierna y mirándolo con esos hermosos ojos agua Marina que lo volvían loco, eso bastó para hacerle sentirse más tranquilo

La familia conversaba e intentaban comunicarse con el alto moreno debido al idioma. Yuri le traducía todo y sonreían felices.

- Yuuri.. mamá, puedo tener un cuarto para mi y Otabek ? - preguntó de la nada el menor y todos voltearon a mirar al rubio

- yuri...- susurro Otabek avergonzado debido a la mirada penetrante del abuelo del menor

- por que se sorprenden? Otabek es mi novio y creo que es ridiculo que no nos dejen ya vivir como una pareja ... - comentó molesto

- ahh los jóvenes de hoy en día.. - hablo la abuela - bien chicos no hay problema, pero les pediré que mantengan el respeto por esta casa y los demás que viven aquí - sonrió - no metan huella y listo-

- abuelaaaaa! - grito avergonzado el menor - te amo - sonrió feliz a la anciana

- muchas gracias Señora - hablo por primera vez el kazajo dando una pequeña reverencia - no se preocupe nos sabremos cómo portar -

- me parece bien Otabek eres un chico ejemplar -

Luego de algunas charlas más, la pareja comenzaron a poner rumbo a la que sería su cuarto de pareja, el moreno tomó la mano de Yuri para ayudarlo a levantarse del piso y se alejaron del ruido del comedor.

- no puedo creer que nos estén dando esta libertad - comentó Otabek mientras se encaminaban a los cuartos

- Beka hay que aprovechar todo esto no crees ?, pero también es nuestra oportunidad de demostrarles que seremos excelentes padres - acarició su vientre hinchado y le sonrió al moreno

El alto detuvo su andar en el pasillo y tomó el rostro níveo del rubio para mirarle a los ojos. Lo acorraló contra la pared del lugar y Yuri sintió en su estómago mariposas.

- te amo más de lo que imaginas.. quiero ser el mejor padre y esposo - le hablo bajito sobre los labios

- es...esposo?- susurro el menor con el corazón a mil

- si Yuri, cuando cumplas tu mayoría de edad.. cásate conmigo por favor -

El rubio no esperó más y con su corazón a punto de estallar se lanzó a los brazos del alto kazajo para luego ambos enredarse en un beso apasionado.

- si..si Otabek si, - decía entre besos el menor sin dejar de abrazarlo

El beso continuo y subió de tono, hacia días que no habían podido hacer nada más que pequeños besos y roses, Se extrañaban.

Otabek pasó su grandes manos desde la espalda menuda hasta la curva de la cintura de Yuri hasta bajar hasta los glúteos redondos. Carnosos y perfectos para apretarlos con contenida fuerza. Llegando al punto de casi levantar al menor del suelo. Amaba esa diferencia de tamaños, levantar al menor y hacer miles de posiciones, Dios ya estaba muy caliente. Y empeoró cuando su travieso novio pasó sus pequeñas y finas manos  por la protuberancia de su pantalón aparentando el miembro grueso y duro como una roca.