Kick Ass! (...¿Y Reader?) (Versión película ).

La confianza de involucrar.

Los ojos del muchacho de cabello negro se abrieron como platos al escuchar eso de ti, separando la vista de su computadora portátil para entonces mirarte -... ¿Qué...?- con su boca ligeramente temblorosa preguntó.

Tú no podías caer más en la confusión, por su reacción era ya completamente confirmado el que algo malo estaba pasando y nadie quería decírtelo... O al menos no completamente.

-...Tú... Christopher... Tú si sabes lo que está pasando aquí, ¿Verdad?- repetiste, una vez más considerándolo apropiado, pues, aunque era seguro que ya te había escuchado y probablemente se estaba negando a contestarte no perdías nada con intentar una vez más.

-¿Yo? ...No...- respondió, de alguna manera al entrar a su habitación estabas confiando en que te dijera un poco acerca de lo que ocurría, ya fuera mucho o poco... Pero... Al responder eso meramente había vuelto su atención a su laptop, como si intentara ignorar el que tú estabas allí.

-...Christopher...- pronunciaste su nombre, eso casi sin pensar –De verdad mira... Si tú sabes algo deberías decírmelo, yo... Yo siento un maldito miedo ahora, ¿Sabes? Mi padre... No tengo idea de a dónde se lo llevaron, pero tú... Tú deberías decirme algo acerca de lo que pasa...-

Conforme seguías con tus palabras que habían salido demasiado naturales sus hombros parecían tensarse... Y no sólo eso, que también parecía comenzaba a temblar un poco, este chico... ¿De verdad podía ser hijo y el supuesto heredero del presunto capo criminal Frank D'amico?

-Chris... Si sabes algo, lo que sea...- al ver a este chico que parecía tan asustadizo no te quedaba más que usar tu amabilidad en un esfuerzo de obtener lo que deseabas -... Debes decírmelo... No importa lo que sea, yo querré escucharte...-

-Yo... No... No sé nada...-

No eran sólo suposiciones tuyas, él en verdad estaba temblando y ya fuera porque estaba asustado o nervioso era porque él, al igual que todos, intentaba ocultarte algo... Y quizás habías llegado ya demasiado lejos como para dejar escapar la posibilidad de obtener toda la verdad en ese preciso momento.

-Christopher... Por favor...- el ser paciente y amable no estaba resultando, a tal grado que a pesar de que tu padre te hubiera pedido que fueras buena persona en algún punto ya estabas deseando gritarle a este tipo que parecía demasiado tímido para ser verdad -...Tú... Dime lo que se...-

-¡No sé nada!- exclamó sin más con su ceño fruncido, bajando la tapa de su laptop para dejarla a un lado suyo, pareciera con eso que en cualquier momento se iba a poner de pie -¿¡Cómo se supone que sepa algo si todo me lo ocultan!?- estaba temblando todavía más de lo que antes había hecho... ¿Qué era lo que estabas haciendo con él? Tu propia paranoia te había empujado a eso que como bien podía ser considerado como una interrogación también podía no serlo, el punto no era eso, que al parecer él también se estaba controlando para ser "una buena persona" y al final había estallado en eso que a tú parecer no era más que una rabieta de un adolescente... ¿Y qué era él? Si un extraño hubiera entrado a tu habitación para empezar a interrogarte tú también te hubieras enfadado y quizás hubieras reaccionado peor.

-Chris... Lo lamen...-

-Ellos... Todo el tiempo me ocultan cosas... Como... Como el que tú llegaras aquí... Confiaron mucho más en ti que... En...- hizo una pausa, bajando la mirada, ese muchacho tímido que en un principio te había parecido ver estaba de vuelta allí -...Que en su propio hijo...-

Guardaste silencio por un segundo, intentando procesar algo de lo que ocurría, desde un principio al llegar le habías visto, él parecía raro y no, no porque su personalidad fuera así, sino porque algo le estaba ocurriendo... Y por poco estabas a punto de descubrirlo... Algo que al parecer también te involucraba a ti.

-Chris, tú... ¿Qué quieres decir?-

-Ya... Ya me escuchaste...- tenía el ceño fruncido, Angie tenía razón al decir que su hijo se había estado comportando así durante un tiempo, el problema con ella en realidad era que ni siquiera se había molestado en descubrir lo que era, ¿Este chico de verdad les importaba? –Ya sabes, sólo... Confiaron más en ti que en mí, ellos no creen que yo pue...-

Antes de que pudiera terminar con sus palabras la puerta fue abierta interrumpiendo a ambos.

-¿Qué es lo que está ocurriendo aquí?- un hombre alto y de complexión grande preguntó, aquel que parecía responder bajo el nombre de "Stu", eso por un comentario que anteriormente habías escuchado de Frank. Los ojos del alto hombre fueron de Chris hacia a ti, primero el muchacho de cabello negro, que había bajado su mirada y luego tú que meramente mirabas con algo de sorpresa -...Dos muchachos no deberían estar solos en la misma habitación... Y encerrados...- podía ser tu imaginación, pero igual podías jurar que Stu te había mirado de pies a cabeza al decir eso... Y vaya mirada apreciativa que te había dado, que incluso era incómodo.

-¿Ah?- dudaste, dudaste mucho, el acercarte para hablar con Chris había funcionado de algo... Aunque no de mucho en realidad –Yo... Sí... Lo siento, señor, volveré a la sala...- ¿Qué otra cosa te quedaba? Le habías prometido a tu padre que durante tu estancia allí te comportarías, además, los rumores sobre estas personas eran horribles, temías por ti... Y mucho más por el hombre que te había dado la vida.

-... Adelante...- Stu respondió, haciéndose hacia a un lado en la puerta para así dejarte pasar. Miraste al de ojos cafés por última vez, tu inquietud iba aumentando de a poco, luego, meramente caminaste de vuelta hacia la sala justo a ese momento en el que el hombre de piel oscura daba una severa mirada a Chris y luego cerraba la puerta, dejándole de nuevo a solas.

Caminando de vuelta detrás de ti cambió de canal en la televisión, enseguida ofreciéndote el control a ti y luego yendo de vuelta hacia la puerta del muchacho al cual acababan de dejar, parándose con los brazos cruzados y las piernas ligeramente separadas... Como si estuviera protegiendo esta, como si quisieran que nadie más entrara.

Volviste tu atención hacia el televisor, mirando el programa que en este estaba ignorando todo por un momento incluso tomando en cuenta que este no era uno de tus favoritos, entonces fue que te perdiste aquí durante un rato, entreteniéndote con la variedad de comentarios y cosas que hacían los presentadores de aquel show, en algún punto se había vuelto llamativo... Y todavía más al escuchar la mención de cierto nombre, frunciendo el entrecejo apenas volviste a ver cómo hablaban de aquel video de nuevo... "Kick Ass, el primer súper héroe real"... No era que no te hubiera parecido genial en un primer momento, que el tipo lo era, pero había llegado un punto en el que te había comenzado a cansar el que hablaran de él todo el tiempo, quizás le estaban dando más crédito de lo que merecía, quizás no, fuera como fuera...

Volteaste a mirar hacia atrás cuando escuchaste unos pasos, allí estaba de vuelta el hijo único de los D'amico, mirando casi hipnotizado la pantalla mientras sujetaba un vaso de agua, aparentemente sólo había salido de su habitación para conseguir este, le miraste por unos segundos, había una sonrisa que se curvaba en sus labios mientras miraba la pantalla... De él lo comprendías, era como una especie de friki y eso de alguna u otra manera estaba bien, entonces tú, teniéndolo indirectamente enfrente...

-Hey Chris... - pronunciaste despacio -...Lamento lo que ocurrió hace rato en tu habi...- y tus palabras fueron interrumpidas cuando el elevador se abrió revelando a Frank junto a sus hombres... Menos tu padre, probablemente todos los que se habían ido con él estaban allí a excepción de tu padre. Tanto tú como Chris les miraron mientras caminaban por el pasillo, fue allí que Stu se acercó a ellos, precisamente a Frank, acercándose a su oído para susurrar algo que probablemente no querían que tú escucharas. El hombre miró a su hijo en un primer momento con una mueca y el ceño fruncido, Chris por su parte sólo bajó la cabeza, luego de eso te miró a ti, sus ojos fijos sobre ti durante un tiempo más, hasta que...

-... Más tarde llévale a mi oficina, hay un asunto importante que tratar...- mencionó y Stu solamente asintió.

"Llévale" ¿A quién? ¿A ti? ... La confusión se apoderaba de ti cada vez más, la curiosidad siendo tan fuerte en ese momento que sentías todo eso te involucraba.