Capitulo 3 La batalla de los Dioses

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En una gran corporación llamada Neo-Guns, trabajaban con cuerpos humanos, combinándolos con todo tipo de armas, o partes de otras razas, creando todo tipo de abominaciones, a las cuales se les insertaba un micro chip en el cerebro, para ser controlados.
  Esta corporación tenía planeado por medio de esas abominaciones, adueñarse del planeta, querían usar esos cuerpos como armas.
  Tenían varias centrales alrededor del mundo, que atacaban a los guerreros de la Liga,  estos la mayoría de las veces terminaba destruyendo esas centrales; pero ese no era lo que hacía preocupar a los Guerreros, lo que les preocupaba era algo que estaba pasando en otro mundo, en el de los dioses; el dios del infierno, y del cielo  estaban discutiendo por lo que pasaba en los mundos que crearon.

  Kio_ ¡Rompiste la única regla que teníamos!
  Kan_ Solo ayude un poco a un lado, para que las cosas se pongan divertidas, nada más.
  Kio_ Ellos no tenían que saber que existimos, ¡Estúpido!
  Kan_ Nos hicimos algo famosos, deberías alegrarte, y a demás, ganaron tus favoritos, no sé de qué te quejas.
  Kio_ ¡Eso no importa!, los mortales no podían saber de nuestra existencia, rompiste lo único que habíamos acordado, ¿No tienes nada más que decir?
  Kan_… (No responde)
Kio_ Eso temía, entonces es una guerra.

  En ese momento, los dioses empezaron a pelear; por esa pelea, el mundo de los dioses corría peligro y a demás como peleaban cerca del portal, el resto del universo también, ya que si este era destruido, las diferentes dimensiones, se unificarían, y todos estarían expuestos a ese combate.

  Gan_ ¿Cómo podemos frenar una pelea entre dioses?, nuestros poderes, son insignificantes, frente a ellos.
  Pardo_ Debe haber una forma; hay que ver que dice el libro. (Toma el Libro y lee en voz alta) Lo último que apareció son estas líneas:
  La Liga debe buscar a dos hermanos, que detendrán la batalla de los dioses y salvaran al universo, de la destrucción.
  Gan_ ¿¡Qué!? ¿Eso es todo?
  Pardo_ No dice nada más.
  Rojo_ Es una broma, ¿a donde y cuando buscamos a quienes?
  Azul_ Pueden haber muchos hermanos en el planeta, ¿Cómo sabremos a quien estamos buscando?
  Gan_ Por lo menos podemos hacer algo; hay esperanzas.
  Pardo_ ¡Esperen!, dice algo más: NG. ¿Qué?
  Gan_ ¿De qué nos sirve esas dos letras?
  Pardo_ NG, NG, son iníciales, Neo-Guns; seguro que estará involucrado en esto, vamos a atacar, tengo una corazonada.
  Gan_ ¿Decís que podemos encontrar alguna pista o algo allá?
  Pardo_ Algo así.
 

  Gan y los demás van a la central más cercana, pero no encuentran más que un inmenso edificio en ruinas.

  Gris_ Parece que llegamos algo tarde, sus propias creaciones los traicionaron. (Todos se ríen)
  Gan_ No tenemos nada que hacer aquí, vámonos.
  Negro_ Por lo menos matemos el tiempo exterminando a las abominaciones que crearon.
  Pardo_ Tal vez adentro de esa cosa rota podemos encontrar algo útil.
  Gan_ Es una pérdida de tiempo, pero bueno.
  

  Entran al edificio destruido, por la puerta delantera, pero no tuvieron necesidad de abrir, ya que esta no estaba.
  Suben hasta el último piso, donde encuentran, a dos especímenes, en camillas, anestesiados, pero con pulso.
  Parecían humanos, pero sus cuerpos estaban alterados; tenían extremidades de metal, y otras que les implantaron.

   Gan_ Son parecidos, ¿Qué les parece?
  Pardo_ Podrían ser hermanos, despertémoslos, podrían ser los que detendrá la guerra entre los dioses.
  Gan_ Espero que sean ellos, dos días más que dure esa guerra, y el portal no resistirá más.
 

  Los intentan despertar, pero no relacionan; se llevan a los cuerpos dormidos, porque las creaciones de la corporación estaban entrando al edificio, y podrían matar a los hermanos.
  Se los llevaron al cuartel que tienen en las tierras del norte, pero solo lograron despertar a uno de los hermanos.

La Liga de los GuerrerosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora